Miles de emociones recorrieron mi cuerpo llevándome al medio de un paraíso del cual no quería alejarme. Tanto había esperado por éste momento, tanto había añorado estar en ésta situación junto a él que simplemente no quería que nunca se terminara. Pero claro, nada en ésta vida es eterno. De pronto sentí como volvía a la realidad y él se iba alejando de mí lentamente para luego quedar cara a cara junto a mí. Podía sentir su aliento fresco chocar contra mi rostro.
-Éste beso fue para Jazmine Colbeck. -su voz suave y ronca hacía que cada vello de mi cuerpo se estremeciera.
Está jugando contigo no seas idiota Jay.
-No debiste hacer esto. -mi voz fue seca sin emoción alguna. -No intentes volver a hacerlo -lo miré desafiante.
-Si te pierdo, lo pierdo todo. -Sentí como mi corazón paró de latir al escucharlo decir aquellas palabras, un poco cliché, pero aún así no podía evitar las emociones que se desencadenaban en mi interior.
-¿Qué quieres de mi Iam?-mi voz sonada cansada y era de esperarse pues ya no tenía las fuerzas suficientes como para seguir cayendo en su extraño juego donde sólo él parecía divertirse.
-Te quiero a ti. -Sus ojos eran tan intensos que por un segundo hasta pensé en creerle.
-Quieres a Lunn, no me necesitas a mí. -Pronuncié con amargura mientras desviaba la mirada de su rostro hacia la pared.
-¿Dónde está la chica extrovertida y excéntrica que llamó mi atención desde el primer día que la conocí? -Dirigí mi mirada lentamente hacia él, me costaba demasiado mirarlo a los ojos sin caer en sus encantos.
-Si te refieres a Lunn, según lo que sé, está muerta -Me encogí de hombros restándole importancia.
-Me refería a ti. -Colocó una de sus manos en mi mejilla mientras me acariciaba como si fuera una pieza delicada de cerámica.
-¿Entonces cuál es tu relación con ella? ¿Vas a negarme que tuviste algo con ella? -mi voz desafiante hizo que cada musculo de su cuerpo se tensara. Su mirada se oscureció lo suficiente como para hacerme estremecer.
-Ella intento asesinarme. -Su mirada denotaba odio y rencor como nunca antes pude haber presenciado. Era la primera vez que podría decir con seguridad que Iam Desmond tenía algo diabólico en él.
-¿Qué.. -No termine mi frase pues él me interrumpió.
-Ella intento matarme. El hechizo estaba claro. Solo su propia alma podría traerme a la vida de nuevo, fue entonces que apareciste tú Jay Colbeck, y por alguna razón inexplicable me devolviste a la vida. Tú tienes el alma de Lunn. Tú eres la reencarnación de Lunnael. -Sentí como mi cuerpo se paralizaba lentamente dejándome caer en un trance profundo. No podía creer lo que Iam estaba diciéndome, no podía entenderlo, era demasiado para mí.
Era algo ilógico, inexplicable, simplemente no podía ser cierto.
-No puede ser cierto... -susurré con los ojos desorbitados por el pánico que recorría cada centímetro de mi cuerpo.
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DARK SOUL
Paranormal"Si no estas dispuesta a amar sus demonios, simplemente no intentes sacarlo del infierno." -No tienes que estar aquí-inquirió él mientras me miraba con frialdad. -Mi lugar es junto a ti-espeté mientras me aferraba a èl. -No confies en mi.-sus palabr...