- 911, ¿cuál es su emergencia?
- Por favor n-nece...sito a-ayu...da...- La joven sólo pudo pronunciar, con un hilo de voz, aquella frase, por culpa del insufrible dolor que sentía en el pecho.
-Por favor, hable lento y pausado, dígame qué le ocurrió y en dónde se encuentra.
-N-Nos robaron... vi...nieron unos... hombres y nos a-asal...taron. Me dispararon... a mi mamá, a mi papá y a mi h-hermana tam...bién. E-Ellos no res...ponden...
-Por favor dígame, ¿esos hombres aun siguen ahí? ¿En dónde se encuentra? Enviaremos una patrulla y una ambulancia inmediatamente a ese lugar.
-N-No ellos ya sé fueron... estoy en...- la llamada se había cortado, el celular de la joven se había quedado sin batería. Tenía la esperanza de que tal vez ese 5% durara para poder avisar sobre su estado. Las lágrimas de dolor, pánico, bronca, miedo, rabia comenzaron a brotar de sus ojos.
Las sombras la envolvían completamente. Podía sentir como gota por gota de sangre, la vida se le iba escapando de su cuerpo. El dolor que sentía en ese instante era indescriptible, no sólo por la herida de bala que tenía, sino porque si ella salía de esa, sabía perfectamente que lo haría sola, ya que para su familia era demasiado tarde. Miró con gran dificultad su alrededor, observando la macabra escena sacada de una película de terror. Vidrios rotos, todo desparramado por todos lados, los cuerpos ya casi sin vida de sus seres queridos tirados en el piso de la sala, cubiertos de sangre. Y ella ahí, sentada en el suelo apoyada sobre la pared, aun con el celular en su mano y la bala incrustada en su pulmón derecho. Tampoco le quedaba tiempo. Era cuestión de segundos para que ella terminara igual que el resto, muerta. Y lo sabía.
Todas sus esperanzas ya se habían esfumado. Tan sólo cerró sus ojos y se dejó llevar por los brazos de la muerte. Pero, como si hubiera recordado algo sumamente importante, abrió sus ojos con brusquedad y colocó dos de sus dedos sobre su herida. Tal vez sea algo ridículo... tal vez sólo sea un simple cuento para niños... pero en ese momento era necesario intentarlo todo, por más tonto que sea.
-A... yú... den... me... Ayúden...me...- iba mencionando con una voz casi inaudible mientras terminaba de dibujar el círculo especial, con su propia sangre, en el suelo. - P-Por favor... que alguien escuche mi... petición...- Esas fueron las últimas palabras que pronunció la joven antes de caer rendida al igual que el resto.
ESTÁS LEYENDO
Agonía de amor [Pausada]
Fantasy"¿Sabes? Dicen que si le pides un deseo a un ángel, este te lo cumplirá... claro, siempre y cuando puedas pagar el precio. Porque... después de todo... no puedes recibir sin dar algo a cambio..." ----------------- MIL GRACIAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS...