Prefacio 01 (Rachel)

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En esta historia Dick será llamado Ricardo, que es su equivalente para los países latinos, esta historia se sitúa en un Universo alterno en el cual los Jóvenes Titanes son un grupo que ayuda a otros jóvenes héroes a desarrollar sus potenciales, por eso sus miembros van rotando, no obstante, siempre será liderado por un Robín, este no es Ricardo, el dejo el grupo y se desempeña de manera autónoma como Nightwing y mantiene una relación amorosa con Star. Los personajes tienen unos 25 años, todos menos Raven, su cuerpo tendrá eternamente 15 y ella nunca dirá su verdadera edad. En este Universo la muerte de Jason fue una farsa orquestada por el Guasón quien lo secuestro y torturo para lavarle el cerebro, tras huir volvió a ser un ladrón como lo había sido en su infancia, sin embargo todos lo creen muerto. Tim tiene 18 años y Jason 22, la existencia de Red X es una "mancha" en la moral de Robín, sin importar quien lleve el manto. Los miembros del grupo tiene sus respectivos hogares junto a sus mentores menos Chico Bestia, Star, Raven y Cyborg, quienes a pesar de no ser los miembros fundadores son quienes más tiempo llevan en los Jóvenes Titanes.

Corvus Corax

El silencio sepulcral de la noche reinaba en el edificio. La oscuridad lo cubría todo. En una habitación olvidada por la mayoría se encontraba un viejo escritorio rodeado de miles de artefactos sin uso. Allí habían ido a parar los inventos fallidos de Cyborg, los viejos juguetes de Chico Bestia, las armas que Robín ya no quería, la ropa vieja que Star se negaba a desechar y los miles de libros olvidados por Raven. El escritorio en cuestión no llamaba la atención. De hecho, pasaba totalmente desapercibido. Quizás por eso, por estar a la vista de todo aquel que entrara y a la vez estar tan escondido, era el lugar perfecto. En la parte inferior del mismo, pegado con cinta de embalar, para que la gravedad no hiciera su trabajo, había un pequeño Nokia 2000 siempre encendido. El artefacto tenía una batería de gran duración y era casi indestructible; era uno de los mejores teléfonos que podías encontrar en circulación, siempre y cuando lograras viajar en el tiempo y comprar uno.

La pantalla brilló por pocos segundos pero no había nadie allí para notarlo. El artefacto había recibido un mensaje de texto.

De Avis Latro:

"La pajarera se siente vacía, deja el nido por una noche"

Ese texto permanecería allí hasta el jueves. Porque todos los jueves entre las 2 y las 6 am una sombra entraba a revisar el teléfono celular.

Una sonrisa casi invisible se dibujó en el pálido rostro de una joven de cabellos oscuros. Su mente analizó el mensaje, claro para ella. La urgencia cifrada en esas palabras era innegable. Su corazón palpitó con fuerza pensando en todos los mensajes que había recibido hasta la fecha y de como leerlos... No. Permitir ese contacto siquiera ya era una traición a todas las bases morales sobre las cuales se regía su mundo. Pero no importaba. La sensación de peligro, la sensación de autodestrucción, la sensación de libertad, eran emociones que ansiaba de forma desmesurada.

Tecleó una breve respuesta.

Para Avis Latro:

"Vuelo esta noche"

-Chicos -llamó la joven-. Iré a meditar. No entren a mi habitación por nada en el mundo. Si llego a desconcentrarme podría perder el control y sería muy peligroso-

Mientras hablaba, Raven miró fijamente a Chico Bestia. Sabía que el joven tenía una insana obsesión por descubrir todos los misterios que lo rodeaban y no pensaba dejar que su curiosidad arruinara sus planes. Su conducta estaba tan meticulosamente planeada que durante dos años ninguno de sus amigos había jamás sospechado de nada. Sus prologadas ausencias nunca habían sido tema de discusión y su habilidad para mantener su rostro inexpresivo había sido la carta que le había dado el triunfo. Por un momento, agradeció ser hija de un demonio inter dimensional y no tener pleno control de sus habilidades. Esto le daba la excusa perfecta para desaparecer durante una hora o dos. Incluso, llegó a irse durante tres días sin que a su regreso nadie le hiciera ningún desplante.

A dos Bandos, la frontera entre el bien y el mal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora