Se encontraban sentados en el sofá de Louis, observando la ya familiar televisión, con cajas abiertas de comida china frente a ellos y una invisible e impenetrable pared entre los dos.
Harry había echado a Louis de su departamento en el momento en que se sintió con tanto sueño que ya no podía ni tener los ojos cerrados. Louis no se molestó en decirle que no importaba, que se quedaría aunque estuviera durmiendo, así que después de obligarlo a tomarse otra dosis de medicinas, le dejó una nota que decía "en cuanto despiertes, quiero que tomes un taxi y vayas a mi departamento. Si no apareces, no dejaré de llamarte y mandarte mensajes hasta que lo hagas" y a un lado dejo un billete de 30 libras.
Louis había pasado toda la mañana revisando el reloj, y limpiando lo que pudiera encontrar en su departamento. Pero eventualmente terminó y no había nada más que pudiera limpiar u organizar. Zayn lo llamó justo en el momento en que no sabía qué más hacer. Lo acusó durante tres veces durante toda la conversación de estar escondiendo algo, hasta que Louis le confesó que Harry iría a su flat. Zayn se rió por unos buenos treinta segundos y después le preguntó si el chico estaba bien y cómo había ido todo la noche anterior.
Cuando eran casi las siete, Louis llamó a un restaurante de comida china y ordeno una cantidad ridícula de comida, pero de todos modos, si no la terminaban probablemente eso comería por una semana. Se vio tentado a llamar a Harry, pero afortunadamente el toque en la puerta vino justo después de que llegara la comida.
La primera cosa que Louis notó es que Harry se veía increíblemente bien. Bien en una manera que hacía que su estómago diera vueltas. La segunda cosa que notó es que parecía que se estaba congelando.
-¿Cómo te sientes...no tomaste un taxi ,verdad? -
-Relájate, tome el autobús -dijo Harry rodando los ojos y poniendo las 30 libras que le había dejado sobre la meseta de la cocina -
Louis pudo ver sus dientes temblando del frío, y esta vez el rodó los ojos. Le señaló la comida que lo esperaba en la mesa de la sala, y fue a su habitación por una manta. Harry se negó cuando quiso cubrirlo, pero Louis pensó que él era la persona más lógica de la situación y no escuchó ni una palabra. Harry se limitó a agradecerle y se sirvió una cantidad inmensa de comida en su plato, para después quitarse los zapatos y enredarse en la manta, subiendo los pies al sofá.
No estaba seguro de cómo pasó, pero en cierto punto Louis se encontraba también bajo la manta. Lo suficientemente cerca para sentir el calor de Harry, pero no para que sus pieles se tocaran. Comenzó a regañarlo y a decirle que tendría que aprender a usar suéteres para que no le diera gripe, Harry sólo se reía y lo molestaba con que ya estaba envejeciendo.
Como era normal para Louis, se encontró prestando más atención a Harry que a lo que veían en el televisor después de comer. Era muy difícil estar tan cerca de él y no tocarlo. No podía resistir las ganas de abalanzarse sobre él y abrazarlo. De un momento a otro Harry lo miró y el rápidamente volvió su vista a la televisión, pero podía sentir la mirada de Harry y se sonrojó, porque eso quiere decir que el chico se había dado cuenta de su mirada todo este tiempo.
-¿Y...cuando compraste esto?
-¿Eh? -
-La película....no la tenías antes ¿Cuándo la compraste? -
La combinación de la mano de Harry tan cerca de su hombro, y el hecho de que sabía qué DVDs tenía, lo mareó un poco, lo miró un segundo tratando de estabilizarse.
-Eh...sí eh...el otro día -
Harry aceptó la respuesta balbuceada y volvió hacia la televisión. Louis podía sentir que Harry lo miraba de vez en cuando, pero no podía devolverle la mirada...porque sería más difícil decir lo que diría con Harry viéndolo.