BIPOLAR

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Las siguientes clases se me pasaron volando, claramente porque no estaba prestando atención , ¿por qué habrá hecho eso Brian?

Llego a casa y lo primero que hago es cambiarme de ropa y ponerme algo cómodo, en pocas palabras la camiseta de Brian, hago algo de comer y espero hasta que lleguen mi madre y mi hermano.

Escucho el sonido de las llaves y la puerta abrirse, miro quien es y es Elliot pero no viene solo, está con su mejor amigo Federico, pero lo llamamos Fede, es italiano y Brian ¿Desde cuándo son amigos?

—Pequeña, cuánto tiempo—dijo Fede abriendo los brazos para que le diera un abrazo.

—Aún seguiré creciendo —dije poniendo un puchero y dándole un brazo largo.

—Elliot —digo mirando a mi hermano —Brian —digo mirando al susodicho, que si quiera se digna a mirarme, luego las chicas son las bipolares.

—Saludas a un desconocido mejor que a mí, olvídate que somos hermanos, esto es una indignación —dice Elliot fingiendo dolor.

—Elliot sabes que yo te quiero—dije dándole otro abrazo.

—Yo a ti no, bueno cambiando de tema, ¿qué queréis comer? —dijo Elliot mirando a sus amigos .

—A mí me da igual—su voz me hace estremecer—, aunque me apetece algo dulce y pequeño —dijo mirándome, ¿soy la única que se ha dado cuenta? Esa indirecta es para mí.

Oh, que emoción.

—Pues elijo yo la comida —dijo Fede con ese acento tan bonito que tiene.

Empezaron a desaparecer del salón para dirigirse a la cocina, él último en salir fue Brian, antes de irse me susurró al oído "Bonita camiseta" y me dio un beso en el cuello.

QUE LE PASA ÚLTIMAMENTE A BRIAN.

Aunque no niego que me haya gustado, rectifico, que me guste su actitud de estos últimos días, pero me preocupa, que llevemos desde la Guardería juntos y que de repente se empiece a interesar por mí, ¿Y si me ve como su próximo ligue? ¿O cómo otra más ? Yo no quiero eso, yo quiero algo más que eso.

—Jally, ¿qué quieres comer?— preguntó el Italiano.

—Ya comí tranquilo—dije sonriéndole.

Solo sentí unos brazos rodeándome y dándome un beso en la cabeza.

—Te conozco bien minion, ¿en qué piensas?

—Yo en nada.

—¿Es por Brian? He visto como lo miras  y he pillado esa indirecta.

—Claro que no, mentiroso, yo no miro a nadie.

—Nadie me miente—y me dio un beso en la mejilla —nadie minion.

Escuchamos como alguien tosía falsamente, nos dimos la vuelta y estaba allí Brian, mirándonos con mala cara.

—La comida está hecha ya, ven a comer.

—Okay.

Me soltó y se dirigió a la cocina, Brian se quedó mirándome unos segundos de más y luego se fue.

                                 (*****)

Dos horas después se fueron todos a su casa, menos mi hermano claro, subí a mi habitación y me tiré en la cama, haciendo que me entrara sueño.

Siento unas manos recorrer mi muslo derecho, abro los ojos lentamente y me encuentro con Brian, entonces me levanto de un brinco.

—Estas invadiendo mi espacio personal —dije mirándolo mal.

—Tú llevas invadiendo el mío desde hace años, ¿Crees que no me daba cuenta que entrabas a mi habitación ? ,¿Por qué crees que la puerta del balcón siempre estaba abierta?

—¿Acaso te gustaba que entrara a tu habitación?

—¿Acaso te gustaba rebuscar entre mis cosas?

—No has respondido a mi pregunta.

—Ni tú a la mía —dijo sonriendo.

—Me sacas de quicio —dije rodando los ojos y tumbándome otra vez en la cama.

—¿Te he dicho alguna vez, lo sexy que te ves con mi camiseta?

Sentí que mi cuerpo se ponía caliente, estoy segura que ahora estaré ruborizada.

—Nunca lo dijiste —mi voz salió desequilibrada.

—Pues ahora ya te lo he dicho, hasta luego niña—dijo dándome un beso en el muslo, cerca de mi entrepierna.

Salió por el balcón, y entonces pensé:

"En vez de besarme en todas partes, prefiero que me beses en los labios "

Eres Mío,imbécil.  *CORRIGIENDO*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora