-Capítulo 4-
Me despertó la alarma a las 7:00, Nick pasaría a las 8:00 así que tenía bastante tiempo. Luego de bañarme me vestí con un jean de tiro alto, un top blanco de encaje, un collar de una luna y me maquillé lo mínimo indispensable. Luego de eso, bajé a prepararme un café, lo tomé y fui a lavarme los dientes, cuando estoy a la mitad de eso, suena el timbre. Bajé a abrir con toda la pasta en la boca y vi a Nick con un pantalón beige y una camisa casi del mismo color que le quedaba WOW simplemente WOW, sin palabras. Me sonrió y yo asentí para que pasara. Subí a terminar de lavarme los dientes y cuando bajé, me encontré a Nick dormido en la mesada, me acerqué y como no se me ocurrió mejor idea, le saqué el brazo en el que tenía apoyada la cabeza.
-¿QUÉ? ¿CÓMO? ¿CUÁNDO? ¿DÓNDE?- Dijo sobresaltado. Me reí y fui a subirme al auto.
***
Cuándo Nick se subió, prendí la radio y busqué alguna canción que me gustara, hasta que sonó Jets-Are you gonna be my girl. Le subí el volumen, empecé a cantar y Nick me siguió. Al terminar el estribillo, tomé un poco de agua mientras lo miraba.
-I said: are you gonna be my girl? - Cantó mientras el me miraba.
En ese momento llegamos al instituto, me bajé y salí disparada. Entré y busqué la administración, ya sabía donde estaba ya que había recorrido el instituto. Una señora de unos treinta y tantos años me abrió la puerta y luego de buscar unos papeles me los entregó.
-Megan Rooden, tu primer día y ya eres más conocida que el mismísimo diablo- Dijo sonriendo. Le devolví la sonrisa un poco confundida y salí, revisé los papeles algo apurada y corrí al aula que me tocaba.
Llegué justo en el momento en el que el profesor entraba, estaban todos los asientos ocupados menos 2, uno al lado de Nick y otro solo, cuando iba a sentarme, alguien me empujó y se sentó en mi preciado lugar dejando libre solo es de Nick.
-Señorita, ¿piensa quedarse parada todo el día? Vamos, siéntese.- Asentí e hice lo que me dijo.
-Hola muñeca, saliste huyendo del auto, ¿Qué te pasó?- Dijo confundido y burlón, me limité a no contestarle y a prestar atención.
-Hoy salimos a las 2, nos vamos juntos, espérame en el auto.-Dijo ¿enojado?, ¿Quién se creía?, obvio que me iría con el, ni pensaba irme caminando.
***
Las clases pasaron sin más y ya eran las 12, eso significaba que era el almuerzo, me dirigí a la cafetería, me compré un agua, una hamburguesa con papas fritas y fui a sentarme. Cuando iba por la mitad de mi delicioso almuerzo una chica castaña se sentó a mi lado.
-Me alegra de no ser la única aquí que no le preocupa su peso y no se priva de los mayores placeres de la vida.- Dijo y la miré confundida. -Oh, lo siento, soy Rebecca, Rebecca Bramson, ¿y tú? -Megan Rooden -Oí hablar de ti toda la mañana, la chica que llegó con Nick Bramson, sí que eres conocida aquí.-Dijo riendo
-Pues él y yo solo somos vecinos, y él se ofreció a traerme, aclaro para que no haya malentendidos.- Ella solo rió y asintió.
-Lo sé, por desgracia es mi hermano. Tengo auto, si quieres nos vamos juntas y así no tienes que aguantar al pesado de Nick- Yo solo asentí eufórica mientras devoraba mi hamburguesa. Ella rió y espero a que yo terminara de comer, en cuanto acabé, nos dirigimos al salón.
***
Las últimas clases habían sido demasiado aburridas, había cambiado mi lugar con una chica por lo que ahora estaba sentada con Becca. Habíamos charlado un rato y me caía bien, no era hueca como las otras chicas del instituto.
Quedaban 2 minutos para que el timbre sonara, 2 eternos minutos en los que me dediqué a guardar mis cosas y decirle a Becca que iría al baño y que me esperara en el auto, así que cuando por fin sonó, fui al baño, me lavé las manos, la cara y fui a buscar el auto de Becca. Cuando salí, choqué con algo muy duro y caí de espalda al piso.
-Lo siento, no te vi.- Dijo un chico muy atractivo la verdad, alto, castaño, musculoso, todo un dios griego.
-No, discúlpame vos, no te vi, estaba buscando a una amiga.- Dije mientras el chico me ayudaba a levantarme.
-¿A Becca? Si te llamas Megan, te estaba buscando, dijo que estaba atrás de Nick y que te apuraras.
-Gracias... - iba a decir su nombre pero no lo sabía
-Ben Fisher, mucho gusto. -Sonrió y yo casi me derrito.
-Bueno Ben Fisher, un gusto, pero debo irme si quiero seguir viva.-Dije riendo, el sonrió y se alejó mientras yo comenzaba a correr hacia el auto de Becca.
En cuanto llegué me encontré a Nick en la puerta del auto discutiendo con Becca por quién me llevaría y solo me limité a empujarlo y a subirme a la parte del copiloto, él me miró confundido y luego fulminó con la mirada a su hermana mientras ella lo miraba victoriosa, se subió al auto y nos dirigimos a casa, dejando atrás a un muy enfadado Nick.
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HOLAAAAAAA!!!!!!! POR FIN PUDIMOS SUBIR CAPÍTULO, HOY MAÑANA Y PASADO VAMOS A HACER MARATÓN
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GRACIAS POR EL ESPACIO..
ESTÁS LEYENDO
Megan Rooden
Teen FictionMegan Rooden, Una chica de 17 años, medianamente alta, rubia, con ojos celestes y con unas curvas de infarto. Se mudara a Boston Y tendrá dejar todo atrás, a su mejor amiga Sophie Sprousse, su colegio, su ciudad y su vida entera a causa del trabajo...