El Jodido Recuerdo

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Tenia 8 años cuando le pusieron por primera vez una camisa de fuerza. Era muy frustrante, el no poder movilizar sus brazos y el tenerlos en una posición muy incómoda.
Ella solo quería jugar, no era su culpa que las voces le dijeran que mordiera a la chica voluntaria. Tampoco era su culpa que la misma le empezará a hablar como si de un retrasado tratase y llegara a enojarla.
Generalmente, en ese tiempo, si América se enojaba dejaba que los sentimiento se apoderarán de ella, o mejor dicho, hacía lo que las voces la mandaban a hacer; escuchando una conversación que tuvieron unas enfermeras, enfrente de ella, que pensaban que estaba dormida, se enteró que estaba destinada a vivir en ese lugar, para toda la vida. Ya no había sentido en portarse bien...
De igual manera, el lado positivo de sus ataques de rabia era lo que pasaba despues de que la inyectaran para quedarse dormida: soñar con su hermano, imaginar que iba volando sobre los árboles con total libertad, cuando en la realidad estaba atada a una cama.
Su primera noche en la nueva casa fue tan... Raro. No estaba acostumbrada a nada; La suave y acolchonada cama, obviamente, era lo opuesto de la rígida y dura cama en la que solía dormir; La suave pijama, que su madre le había provisionado, era tan placentera, muy diferente de las pijamas que la mandaban a usar cuya tela de confección era un misterio para América.
Todas las comodidades que se había perdido por tantos años.
"Pronto nos vengaremos de todos los que nos abandonaron"
Fue lo último que dijeron las voces, ese dia tan agitado, no en tono amenazante, sino en modo de recordatorio...
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América despertó en un lugar oscuro, parecía una habitación; Sus ojos azulinos percibieron varios marcos, con vidrios en vez de pinturas en ellos, colgados en las paredes, color negro, de la habitación.
Parándose del suelo, se dio cuenta que llevaba un vestido blanco, sucio, con manchas de tierra y sagre; Examinando su cuerpo, noto que las palmas de sus manos estaban totalmente limpias...
-¿Hola?- Su voz sonó por toda la habitación causando el efecto de un eco- ¿Hay alguien ahí?

Lo mas extraño era que no podía escuchar a las voces ni sentirlas...
Era como si le hubiesen quitado un, gran, peso dentro de su mente; muy liberador.

Atraída por la curiosidad se acercó al marco que se encontraba a su derecha, al acercarse pudo ver la escena de su familia 13 años atras; teniendo una "Cena Familiar", un año antes de que su padre se volviera un alcohólico y abusador. Fue, en su opinión, la mejor época que su familia tuvo. El recuerdo, que estaba proyectándose, pronto se volvió oscuro y distorsionado.
-No, no, no, no... -América puso la palma de su mano, en la imagen, tratando de aferrarse a la escena- ¡NO POR FAVOR!

La familia cenando se fue y donde estaba su mano sólo se sentía húmedo, retirando su mano vio que estaba cubierto de un líquido espeso color negro; daba asco la sensación así que rápidamente se trató de limpiar con su vestido.
Tratando de buscar ayuda se acercó a otro marco, este proyectaba la imagen de su hermano ayudandola a andar en su bicicleta por primera vez... Tan buenos recuerdos, pero como en el otro marco, todo se distorsiono y quedó en negro; está vez América no puso su mano en el marco sabiendo que iba a llenarse de la sustancia negra.
Resignada, se acercó a otro marco que también representaba un momento feliz de su vida y como los otros también se fue.
Por último, se acercó al otro marco, ya esperando que también viera su felicidad infantil irse... pero este marco no representaba un momento feliz... de hecho era el recuerdo de la primera vez que su padre llegó borracho a casa y los golpeó.
América estaba tan decida a dar la vuelta para no ver tan horrorosa escena, pero sus pies parecían estar pegadas con goma al pavimento.
Ver como llegaba el a la casa y darle un golpe a su madre sólo por intentar ayudarlo. Como se acercaba a ella dispuesta a patearla para que se callara. Esto era demasiado...

-¡SAQUENME DE AQUÍ!

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América despertó totalmente sudada, volteo a ver el reloj que marcaba las 4 de la mañana. Ella sabía que no podía regresar a dormir, y si lo hacía solamente tendría la pesadilla de esa noche; y ya estaba cansada de revivirlo.
Así que se acercó a su armario, al parecer su hermano o su madre habían comprado ropa para ella y también zapatos. América saco unas zapatillas blancas y se las puso para salir, en el centro psiquiátrico los hacían hacer ejercicio constantemente. No quería cambiarse de sus pijamas porque aunque estuviera sudado la tela era tan suave, que sería un crimen no aprovechar de ellos.
Salió de su habitación, y se dirigió a la cocina para salir por la puerta de allí, tal vez así no despertará a nadie. Intentando no irse tan lejos, se fue por la parte de atrás de su casa donde la mayoria era árboles y flora silvestre, en el futuro todo esto sería derrumbado para hacer más casas. Se dirigió a una parte donde había un montón de arbustos, tal vez ahí podría hablar sola con las voces.
Se sentó en una piedra viendo alrededor para comprobar que nadie la viera y notarán, como algunas personas dicen, su «comportamiento raro».

-No sé que hacer. ¿Serán buenos conmigo los del nuevo colegio? ¿Estás ahí Miss Maple?

Miss Maple era una de las primeras voces que hicieron presencia en la mente de América, era la más sensible y dulce voz, le gustaba hablar con ella, sabía que si la llamaba por su nombre ella aparecería para aconsejarle, pero últimamente había estado callada.

-¿Miss Maple está ahí?- Enarcó las cejas. La angustia empezó a corroer su cuerpo, ella no la podía dejar, no en estos momentos.- Por favor, aparece Miss Maples necesito consejo.

"Aquí estoy querida."

América no se dio cuenta que había aguantado la respiración hasta que dejó ir una bocanada de aire.

- ¿Tu que piensas Miss Maple? ¿Crees que me traten bien en el colegio?

"Querida, ¿cómo podría saber yo eso? Mientras no le veas bastones a la gente, creo que estarás bien."

-Ese es el problema, no se como son los colegios, Charles nunca me describía como eran sus escuelas y menos como fue su colegio.

"Oh pequeña niña, tu hermano no quería ilusionarte con un lugar al que probablemente nunca te hubiese visto ir ni en sus sueños más alocados."

-Tienes razón, siempre la tienes... Cuando sea el jueves, estarás ahí ¿Verdad? ¿No se desaparecerá como antes Miss Maple?

"Si te hace sentir mejor, aquí estaré lista para hablar contigo, querida."

-Tu siempre sabes que dec... - Un ruido paro sus vocablos.

Se levantó de la roca buscando de donde provenía el sonido, asustada, porque tal vez alguien presenció su conversación; volteando el rostro se encontró con un par de ojos negros.

ANTES DEL FINWhere stories live. Discover now