NOBODY ✿ [THE ORIGINALS.]

XIV

Tocaron la puerta del departamento de Emilie, ella la abrió topándose con la hermana mayor Mikaelson.

—Linda escena de celos.—habló Freya recostándose en el marco de la entrada de la casa de la blonda.

—Perdón.—exclamó indignada.—¿Deseas algo Freya?—preguntó cansada.

—Deseo saber que fue lo que sucedió hace rato... ¿Acaso no podías ser más obvia?—exclamó Freya.—Ambas sabemos que sigues sintiendo algo por Elijah como antes lo hacías.

—¿Y tú qué sabes, eh?—dijo furiosa. Odiaba tan solo la simple idea de recordar el pasado, eso solo intensificaba su odio.

—¿A quien quieres engañar? Te sigues muriendo por mi hermano...—antes de que pudiera continuar con su burla, Emilie azotó la puerta, dejando a la rubia Mikaelson fuera de su hogar.

Freya no se marcharía, no hasta resolver una duda presente.

Volvió a tocar la puerta, está vez de una forma más amable.

—Freya si vas a seguir molestándome, lárgate.—dijo Emilie un poco más calmada.

—No es nada de eso Emilie, tenemos que hablar.—dijo pasiva la rubia Mikaelson.

Emilie abrió la puerta, topándose con una calmada Mikaelson dispuesta hablar, ella con un asentimiento de cabeza le invitó a entrar.

—¿Y bien?—cuestionó mientras servía vino en dos copas, entregándose una de manera amistosa a Freya.

—Sé que enamas un nuevo poder.—habló luego de un silencio algo incómodo.—No sé que serás, pero eres todo menos un vampiro común.—continuó mirando cada expresión que tenía la rubia en frente.

No sentía nada.

—No soy un simple vampiro.—completó Emilie.—soy algo más.—dejó la duda al aire.

—¿Qué eres?—el instinto curioso de Freya la estaba carcomiendo internamente, por el simple hecho que Emilie era una persona misteriosa y que por fin sabría el secreto más destacado en ella.

Era como saber por fin quién era el asesino, en una serie de mil páginas.

—Estoy bendecida con el poder de la inmortalidad.—dijo.—Simplemente no puedo morir...

Hace mil años atrás...

—Haré de ti, un infierno.—dijo la madre Mikaelson mirando el cuerpo inerte de su ex cuñada.—acabaré contigo de la peor forma posible.

—No harás nada de eso, Esther.—dijo otra voz desde afuera.—entréganos a la chica.

Ella se negó rotundamente ocasionando que aquella bruja lanzará un hechizo haciendo que le dé un fuerte dolor de cabeza a Esther.

—No te resistas Esther, sabes que no puedes contra nosotras.—

Esther cayó y Emilie fue llevada a un aquelarre.

Practicaron con ella, tratando de hacer unos monstruos similares a los Mikaelson. Y lo lograron solo que peor.

—Eres una nueva especie de vampiro.—habló la líder mirando a su nueva criatura. Su criatura.—Eres un vampiro evolucionado, no creas otros vampiros, te alimentas de las almas, eres más fuerte.—concluyó mirando orgullosa su trabajo.

Pero Emilie estaba ansiosa, tenía hambre. Y acabó con uno de los mejores aquelarres de esos tiempos.