Me desperté a causa de una pesadilla, en ella salía Dennis, cada vez me atormentaba no saber nada de ella, cheque la hora en mi celular, éste marcaba las 5:30a.m.
Me acosté de nuevo, cerré mis ojos intentando volver a conciliar el sueño, pero era imposible.
Me dirigí a la mesita que se encontraba en el rincón de mi habitación, abrí mi laptop, cheque mis redes sociales topandome con una foto de "Annie", una chica de mi colegio.
Ella me gustaba hace unos meses atrás, pero nunca tuve el valor de hablarle, Dennis siempre decía que me arriesgará, pero nunca le hice caso.(...)
De las 5:30a.m. pasaron las 6:15a.m. En todo ese tiempo me la pase mirando el perfil de Annie, y en ese instante supe que aún me seguía gustando.
Cerré mi laptop.Me levante de la silla y me dirigí al baño.
Al salir me puse mi típica ropa, me cepille el cabello, y me puse un poco de perfume al igual que desodorante.
Antes de bajar tomé mi mochila, hice mi desayuno y claro el de mi hermanita, Tilly.
Durante el desayuno mirábamos algo de televisión, al terminar lave mis platos, me cepille y tome mi mochila.
Salí de casa y espere unos minutos el bus del colegio.
(...)
Pasos antes de entrar al colegio, divisé a los chicos a unos pocos metros de mi, los espere en donde estaba, ya al estar cerca todos chocamos las manos en forma de saludo.
Luego de esto, entramos al colegio.Pude mirar en uno de los pasillos a Brad, con su bola de estúpidos amigos, la rabia me recorrió, pero calle.
Seguí mi camino con los chicos, Lukas , Charlie y Harvey se fueron a su respectiva aula, mientras que Was y yo nos dirigimos a la nuestra.
(...)
Las clases eran tan aburridas, cuando por fin se acabaron, me dirigí con Was al estacionamiento, ahí nos veríamos todos.
Mientras esperábamos a Charlie, Lukas y Harvey, buscaba con que entretenerme, ya que Was hablaba con su actual ligue, mire a lo lejos a Annie, ella hablaba y reía con Deby, su mejor amiga.
Al apartar mi vista de Annie, divisé a Brad viniendo hacia mí, la sonrisa se me borro automáticamente del rostro.
-Devries.-escuché su desagradable voz.
Le ignoré, mire a Was, el estaba apunto de venir pero con señas le dije estaría bien.
-¿Acaso no me oyes?-me tomó fuertemente de la quijada.
-¿Qué es lo que quieres?-le sostuve la mirada con enfado
-Quiero que desaparezcas, y que dejes de mirar a mi chica- Exclamó molesto.
-Es una pena, eso no se va poder-curvie mis labios.
El soltó una carcajada, cerró su puño y me golpeó en el rostro.
Was vino rápidamente a levantarme.-Estoy bien- le dije con dificultad, quite la poca sangre de mi labio y me levante.
Brad se reía al igual que sus amigos, unos cuantos que estaban ahí me miraban asustados.
Sin pensarlo, me lancé hacia el dándole unos cuántos golpes en la cara, por supuesto, el también luchaba por darme un buen golpe.
-¡Leo, para!-Escuché a Was.
-¡Qué demonios pasa aquí!-se escucho la voz del director enojado.
Luego de escuchar la voz del director, ambos nos separamos.
La gran multitud que se armó y que veía aquel espectáculo se desvaneció en un par de minutos.
-Están en problemas-mencionó el director, e indicó que lo siguiéramos.
-Leo- susurró Was.
-Estaré bien, no me esperen, los sermones de los directores suelen tardar-reí, pero al instante hice una mueca, ya que el labio me dolía.
Al terminar sus sermones del director nos dejó ir.
Claro no sin antes prometerle que no volvería a suceder.
Al final, tuve que darle la mano al estúpido de Brad.Al salir de la oficina del director, ambos nos miramos de mala gana, pero ninguno soltó ni una sola palabra, sólo dirigimos a nuestros respectivos caminos.
(...)
Estaba en la estación de metro, por lo general se demoraba tanto en pasar, pero era esperar o ir caminando, y realmente iba retrasado, hoy claramente no sólo recibiría los sermones del director, si no también los de mi madre.
Me senté en las banquillas que tenía la estación de metro, claramente esperando.
Tomé mi celular y para que la espera no sea aburrida y se me haga larga, conecté mis audífonos y en unos segundos la música recorría mis oídos.(...)
Pasados ya, 15 minutos se asomó el metro que me llevaría a casa, entré a éste y tomé asiento.
Luego de unos segundos de mirar para todos lados, mi vista se quedó fija a alguien, no podía creer lo que veía, frote mis ojos, los talle lo más que pude esperando que tan sólo sea parte de mi imaginación, pero ella seguía ahí, Dennis seguía ahí.
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»Quedate« [Leondre Devries]
Novela JuvenilDurante ya hace unos meses atrás Leondre Devries, un chico de 16 años ha estado hablando con Dennis Harper, usuario de una red social. Poco a poco fueron ganando confianza entre ellos, incluso Leondre llegó a pensar que se estaba enamorando de aque...