Tierra De Zombies

Capitulo 18

Narra Jossy

La puerta se abre y nosotros estamos agachados bajo la caja del despacho para evitar ser vistos, en caso de una emergencia mi padre se encargaría de descargar todas sus balas sobre esos tipos.

Quise consolarme pensando que con eso seria suficiente pero sabía que no lo era, no sabia si mi padre seria capas de luchar con unos hombres armados hasta los dientes que ya habían posiblemente con miles de esas cosas. 

Los pasos de sus pesadas botas recorrían todo el lugar en busca de provisiones y estaba comenzando a desesperarme por la curiosidad, y si en realidad solo querían ayudar o eran unas víctimas igual que nosotros de toda esta masacre

No tenía miedo, en estos días había aprendido a controlarme pero quería saber que sería de nosotros si nos veían

Por su lado mi padre se limitaba a mantener el dedo en el gatillo apuntando al lado expuesto del mostrador donde estábamos

Mi respiración se aceleró cuando el sonido de el caminar se dirigió hacia nosotros

- ¿Y que habrá por aquí?

Dijo la voz masculina que posiblemente era el de las botas que escuchaba, sus pasos se aproximaban y al subir mi mirada estaba extendiendo su brazo para alcanzar unos cigarrillos que estaban atrás del mostrador

-Oye mira cigarrillos-exclamo el hombre-

Sentí un alivio al ver que no se había dado cuenta de nuestra presencia

No duro mucho esa sensación cuando vi a mi padre levantar los brazos e indicarme que hiciera lo mismo

Levante mi mirada y el otro hombre que acompañaba al de recién nos había visto y tenía su rifle puesto en la cabeza de mi padre. 

Mi corazón dio un vuelco al sentirme indefensa, no podía hacer nada y menos intentar algo o pondría en riesgo la vida de mi padre

-Levántese -dijo el de los cigarrillos-

Ambos nos levantamos con los brazos en alto y mi padre puso el arma encima de el mostrador

-¿que hacen aquí? Pregunto el de el rifle poniendo en dedo el gatillo

- buscábamos provisiones, ya nos íbamos -dijo mi padre-

-¿Y ella? -intervino el de los cigarrillos-

- Es mi hija

-Entiendo...  El es mi hermano y hacíamos lo mismo en este lugar, no esperábamos que hubiese más sobrevivientes

-Mucho gusto - dijo mi padre-

Solo me límite a asentir mientras se estrechaban sus manos y ambos salíamos detrás de él mostrador

Narra Marcela

Empezamos a caminar de regreso por la calle estando aun más alerta que hace horas atrás sin saber por qué lugar podrían aparecer los infectados

Bill y Margaret se mantienen atrás con steph mientras yo observó los edificios alerta de que ninguna zombie trepadora este acechandonos por ahí

Caminamos unas cuantas calles y una trepadora esta asomándose por un edificó que esta al lado de nosotros

Levanto mi brazo para que se detengan todos y nos quedamos estáticos agachados esperando que la trepadora se vaya y poder seguir avanzando

Mi mirada se regresa a Steph que esta poniéndose sus manos sobre la boca

No Steph no te atrevas.... 

-Ah.... H.... H....

¡¿Joder Steph por que ahora?!

Y sin remedio alguno estornuda haciendo que el rostro de la trepadora nos busque y empieze a correr por la pared hacia nosotros

- ¡Corran! -halando a margaret-

Steph se encarga de tomar por el brazo a Bill pero el viejo se saca de su agarre y recargando su fusil soltando las cargas que tenía

El sonido de sus disparos resuenan por la calle, Margaret y yo nos metemos en un callejón y nos acurrucamos tras un basurero donde cuento mis balas y meto el barril de mi revolver

-¡Quédese aquí! -le ordeno y corro hacia Steph y Bill-

Los disparos de la escopeta de Bill son esquivados por la trepadora que salta a unos metros cayendo sobre la calle y avanzando hacia nosotros más veloz

En un momento el anciano se queda sin cartuchos y busca más en su bolsa

Steph y yo disparamos hacia la trepadora dándole en el pecho haciendo que se desplome al suelo

El arma de Bill esta recargada y ambas lo miramos desconcertadas por su actuación, estoy segura que ella al igual que yo no se esperaba tal cosa de Bill

- ¡Eres un testarudo Bill! -me atrevo a decir guardando mi arma-

- Bah! He visto bebés más rudos que esa cosa!

Una amarga risa se me escapa al ver el espíritu que posee el viejo sin duda lo subestime