Bad Boy [Kim Nam Joon]

Parte V

- Estás bien Liz, quedará boquiabierto al verte, lo juro.

Volví a meter el ruedo de la camisa blanca dentro de mi falda de jean por veinteava vez en la noche y suspiré al mirarme al espejo.

- ¿No es muy simple para una cita? ¿La falda no es muy corta? – Volví a peinar mi cabello hacia atrás para que cayera detrás de mis hombros y me di la vuelta observando cómo me veía de espaldas.

Alice apareció frente a mí en el reflejo del espejo y me agarró de los hombros haciéndome mirarla a los ojos.

- Estás bien, le encantará como estás vestida. Amará la falda, ya lo verás.

Intenté girarme para darme un último vistazo en el espejo pero sus dedos clavándose con fuerza en mis hombros lo impidieron.

- Dije que estás bien, ven aquí.

Me agarró del brazo arrastrándome hacia la cama y nos sentamos en ella, me puse las sandalias con plataforma negras que Alice había elegido para mí y la vi sonreír.

- Perfecta.

Asentí con una sonrisa en modo de agradecimiento y volví a revisar la hora en mi teléfono, cinco minutos faltaban para las 9 pm, la hora en que habíamos quedado con Namjoon para que pasara a recogerme. El teléfono de mi amiga vibró sobre el acolchado a su lado y me sorprendió la sonrisa que ocupó su rostro cuando abrió el mensaje recibido.

- ¿Y esa sonrisa?

Pregunté divertida y el rubor en sus mejillas sólo me intrigó más.

- ¿Hoseok?

Ella se limitó a asentir y contestar el mensaje en silencio antes de dejar el móvil a un lado y mirarme, no pude evitar enarcar una ceja esperando que me contara los detalles.

- ¿No vas a contar-

- No hay nada que contar.

Su respuesta inmediata me hizo reír y golpee suavemente su hombro.

- Vamos Ali ¿No confías en mí?

Tardó sólo un segundo en tomar mis manos y negar totalmente ruborizada.

- No es eso. – Se mordió el labio y suspiró.

- ¿Qué sucede entonces?

No sabía por qué pero empezaba a preocuparme ¿Qué era lo que mi mejor amiga no podía contarme?

- Vas a reírte y decir "te lo dije", no quiero oírlo.

Sonreí percatándome de lo que quería decir y negué feliz de estar teniendo esta conversación con ella, nunca creí que el día llegaría tan pronto y menos por alguien como Hoseok.

- ¿Te gusta?

Asintió cubriéndose el rostro.

- ¿Ninguno de los rumores que escuchaste sobre él son ciertos?

Volvió a asentir.

- ¿Es interesante, divertido y sus besos son más deliciosos que tu sabor de helado favorito?

Asintió y tardé un segundo en darme cuenta de que no había corregido lo último.

- ¡¿Se besaron?!

Se dejó caer en la cama y asintió aún cubriéndose el rostro, la carcajada que salió de mi boca la sobresaltó haciéndome reír aún más.

- ¡No puedo cr-

- Ese no es el problema.

Abaniqué mi rostro intentando que el calor en mis mejillas producto de la risa disminuyera y la miré confundida.