Ahora tampoco podía negar la progresiva locura de Rarity; cada vez se acentuaba mas y eso solo hacia que el corazón de Applejack se encogiese. Sin poder verla siquiera, podía ver como su amiga iba degenerando. No, amiga no.
"Querida Applejack, ya he llegado hasta lo mas alto; las vistas son increíbles, se ve la totalidad de la isla y, por un momento, pude serenarme después de tanto tiempo. El viento me azota mis estropeados cabellos y refresca mi mente. Es ahora cuando puedo sentirlo por completo. No puedo callarme, tengo que soltarlo, se lo dije al mar, se lo dije a las olas, a la marea, a la playa, a la bahía, al pecio, al valle y al faro. Te amo. Te amo como no amo a nadie. No sabes cuanto te echo de menos, este dolor me quema viva. Por eso iré a tu encuentro, Applejack. He hecho un encantamiento de impermeabilidad a las cartas y las he lanzado con forma de barcos de papel para que el viento te las entregue y así puedas saber lo mucho que te ami. Pero este amor se consume, y es por culpa de esas horribles sombras; por lo que decidí liberarme por completo. La torre de la luz roja es altísima, lo suficientemente alta. Volare sobre las nubes para ir hacia ti. Subiré las escaleras mas angostas con tal de verte de nuevo. Aunque sea la ultima vez. Desde lo mas alto, pude ver la forma de la isla antes de saltar hacia la eternidad. Te amo, Applejack. Ahora y por siempre. Siempre tuya, Rarity."
Esa era la ultima, y no hacia falta ser ningún experto para comprender el texto; estaba muerta, Rarity estaba muerta. El amor de su vida se había ido. Applejack lloro, lloro lo que nunca lloro. Todo Ponyville la oyó llorar de amargura. No podía hacer otra cosa. Perpetuar el recuerdo de su amada. Solo así la podría ver de nuevo.
-Vuelve Rarity... Vuelve...-musito ella, abrazando las cartas.
La isla se convirtió en algo lejano y cercano al mismo tiempo, como si hubieran sido conectadas a través de las cartas. Una ultima lagrima rodó por su mejilla antes de apagarse.
-FIN-