Capitulo 2

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Pov harry

Tia Petunia cumplió su promesa, ella siempre obedecía, en cambio tío Vernon solo me temía y mi primo......bueno gracias a los regaños de tía Petunia se ha comportado mejor que antes

Por fin tengo algo digno de llamar cuarto y ropa de mi talla, le pregunte algunas cosas a tía petunia y ella con el gusto del alma (y un poco de sangre) me las respondió.

Descubrió que soy un mago, y que mis padres no habían muerto por un accidente de tránsito como me habían contado, sino por culpa de un mago oscuro que también era responsable de mi cicatriz, le pregunte el nombre de aquel mago, pero me respondió ella no lo sabia, indignante, también comentó que era el único sobreviviente del ataque cosa que es muy raro ya que no podía defenderme, el solo podía haberme mato con facilidad; me contó sobre una escuela a la cual asistiría en unos 6 años, mucho tiempo a mi parecer, pero tenia que esperar.

Tía Petunia me inscribió a la escuela pues ya era tiempo de estudiar y con mi primo fuimos a unas de las mejores, obviamente siempre fui el mejor de la clase haciendo que me saltase algunos cursos.

Cuando cumplí ocho ya empecé manejar mi magia a mi voluntad, así cuando me aburría jugaba un poco con mi tío Vernon quien se convirtió gentilmente en mi juguete favorito, sus expresiones simplemente me causaba risa y como mi tía Petunia descubrió que el lo engañaba con su secretaria gracias a uno de mis juegos ya no le importaba que le hiciese con tal de que no se metiese con su hijo mucho ya que algunas veces se le subía algo en la cabeza y no obedecía lo que le ordenara, pero tampoco podía matar a tío Vernon, seria algo muy tonto de mi parte ya que el sustenta a la familia.

Al cumplir los 9 años pedí bueno ordené a tía Petunia que me llevase al mundo mágico, ya que me comentó que ella sabía le entrada. Fuimos en su carro, llegamos a Londres y por unas calles algo no muy agradables vi un puesto que me llamó mucho la atención 

-yo no puedo verlo con mucha facilidad como tu debes verlo, debe de decir un cartel "caldero chorreante"- dijo ella mientras me tomaba de la mano y con la otra a su hijo -sera mejor que te pongas este saco querido, como te comenté eres alguna especie de famoso aquí, pero todavía no te pueden ver ya que no me dieron el permiso hasta que cumplas 11 años- solo tome la capucha de mi saco, me la puse y desordenando mas mi cabello tape mi cicatriz 

-ese lugar de ahí lleva ese nombre- comente algo indiferente pero por dentro moría de emisión ya que ese puesto lo había visto desde hace mucho tiempo.

Entramos no era muy agradable que digamos, pero tampoco muy desagradable; Tía Petunia fue con el cantinero que se llamaba Tom, le pregunto como entrar al callejón Diagon, y el muy amable nos lo mostro.

Era increíble, mi primo Durly estaba asombrado y se le podía ver en la cara y bueno yo también pero no lo dejaría ver así de fácil, no era un niño inmaduro

-tenemos que ir al banco, no tengo dinero mágico pero tal ves pueda cambiar un poco- dijo mi tía pensando,

 -je, y yo que no te iba a pedir nada- comente son una sonrisa algo malvada 

-Harry, se que me pediste esto por aprender más. Sobre el mundo mágico- dijo ella queriendo sonreír, lo odiaba, ella odiaba este lugar

-vete- dije algo frío 

-perdón?- dijo ella algo confundida

 -solo te pedí que me trajeses, tengo asuntos que quiero ver por mi mismo Tía, no creo que quieras meterte- dije mirándola a los ojos, ella los desvío rápidamente y solo asintió 

- Tienes razón no quiero meterme en tus asuntos,el banco es aquel edificio blando del fondo- comento y salio con mi primo. Ahora que no estaban podía hacer unas cosas que me estaban atormentando

No todo es como pareceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora