Los Genios Del Equipo (Los Pingüinos De Madagascar) [Editando]

4. Instinto paternal

𝚂𝚌𝚊𝚛𝚕𝚎𝚝

Desde la última aventura me he sentido mucho mejor, he tenido buenos momentos con Skipper y con Kowalski, y en especial con éste último. Al parecer lo pongo un poquito nervioso y, tengo que aceptar que él a mi también, en especial cuando hablamos de ciencia: Nunca sabemos si el otro podrá refutar con algo más inteligente. En fin, un domingo estábamos todos jugando cartas, y llegó Marlene con un huevo.

-Definitivamente es de Pato- dije con seguridad.

-Así es, lo encontré cerca de un estanque- dijo Marlene - Y pensé, que como ustedes son aves,  creí... que tal vez podrían...

-¡De ninguna manera! - reclamó Skipper de inmediato.

-¡hay! por favor... - dijo Marlene -

-El tener a un huevo y cuidarlo -dijo Kowalski inesperadamente, y continuó-, es una responsabilidad de los pingüinos macho, es un instinto paternal.

-Pueden cuidarlo. Yo buscaré a su mamá mientras tanto- dije.

-De acuerdo... pero solo por un tiempo -dijo Skipper.

No supe cómo, pero los chicos consiguieron cuidarlo.

Solo podía darse una idea de lo que había sucedido: Primero Skipper, quien más bien lo entrenó; Kowalski, experimentó con él como cualquiera de los dos habría hecho, solo que uno más cuidadoso que otro; Rico... fue más peligroso con él; y finalmente Cabo, quien lo cuidó muy naturalmente, como se esperaría.

Marlene y yo salimos a buscar a la mamá en el estanque, nos quedamos solas, y como no llegaba nadie, empezamos a platicar.

-¿Y cómo vas con los chicos? Alocados, ¿no?- comenzó Marlene.

Reí con su comentario: -Sí, y mucho... Pero la verdad es que me llevo muy bien con todos, Skipper aún no simpatiza más conmigo, pero eso es porque es mi jefe. 

-Es... complicado. Él sí que es estricto y todo, pero sé que es muy tierno por dentro- suspiró levemente, lo que me pareció algo curioso.

- Ammm... haha si, creo que sí -fue lo que pude contestar.

-¿Crees que encontremos pronto a la madre del patito?-

-Eso espero. Ya me estoy empezando a preocupar, ellos no son tan especialistas cuidando un huevo, ¿sabes?

-Yo creo que Cabo ya se encargó de todo.

-¡Oh, mira! Una mamá Pato.

-¡Hola!

Hablamos con la mamá Pato y supimos que ese era su huevo, fuimos lo más rápido que pudimos hacia el zoológico y llegamos con Cabo. El huevo se había roto y vio primeramente a Cabo, fue muy bonito, pero finalmente tuvimos que dejarlo ir.

Con todo esto, me di cuenta de que no los conocía tan bien como pensaba. Quizás mañana sea un día más tranquilo para poder hablar un poco más con ellos y conocerlos mejor y, con él... tal vez podamos hacer un experimento juntos, eso sería fantástico, pero ya no digo más, mejor cuento lo que pase después.