Intuicion "The Vampire Diaries"

Angie Mikelson

Cap 2. Angie Mikelson

Sentí el frío en el pecho, un frío escalofriante, doloroso, un frio que me atravesaba de la espalda al pecho, un frío lleno de vació, como de vértigo, un dolor enorme, dolor como una estaca en el corazón... Sabia lo que había pasado...había terminado,Marcos había muerto.Mis manos se escurrieran por el volante y se aferraron a el como yo me aferraba a cada recuerdo del, que ahora se encontraba repleto de dolor de la partida, repleto de necesidad de volver, repleto de venganza.

El dolor se esparció por cada milímetro de mi cuerpo, no sabía si podía aguantar tanto dolor, quería que terminara... una parte de mi sabía que podía dejar de sufrir y seguir con mi vida. Lo único que quería era apagarlo, apagar la humanidad y dejar de sentir, pero sabía que eso sería trampa, con todo el dolor en el alma sabía que apagarla sería mentirme, distraerme a demás de no cumplir con mi palabra.

Debía aguantar.

Respire y apreté más el volante mientras deje que el dolor de mi alma se fuera directo al acelerador y mi mano al volumen de la música, mientras mi cara se llenaba de lágrimas, acelere mi camino a Mistic Falls, faltaba menos.

Iba a estar bien.

La noche paso, con la noche los estados y para la primera hora de la mañana estaba en Mistic Falls, baje el volumen y la velocidad, comencé mi búsqueda hacia la casa de la cual me había hablado Marcos.

En realidad sabía que encontrar una casa en un lugar donde no conocía absolutamente nada iba a ser casi imposible.

Considerando que no había comido desde...prefería no acordarme cuando fue la última vez que comi...tenía hambre.

me las arreglé para llegar a un grill,encontré uno en medio de la ciudad, parecía que la gente concurría allí con frecuencia.

Estacione la camioneta y baje con mi cartera, guarde las llaves en ella, ya que había abierto la cartera para guardar las llaves aproveche para sacar la escritura de la casa, al final la misión de parar en el grill era encontrar alguna guía para llegar a la casa.

No estaba prestando atención a la calle cuando me choque con alguien

- AY! LO LAMENTO! PERDÓN!- me disculpé con la persona, levante la mirada y vi a un chico de unos 16 años, muy guapo en realidad.- perdón estoy un poco pérdida, soy nueva aquí y media despistada- conteste con una sonrisa mirándole mientras colocaba todo de nuevo en el bolso- soy Angie-

le extendí la mano.

-Hola Angie, soy Jeremy, Jeremy Gilbert- me contesto el saludo de la mano, con un cálido y cuidadoso apretón- no te preocupes, suele pasar el tropezón con un desconocido, en muchas películas resulta es el malo de la historia, creo tienes suerte que no sea ese tipo -me contesto cómico con una enorme sonrisa blanca.

- Creo entonces también tengo suerte de saber karate- conteste mirando el piso y riéndome.

- con que nueva en Mistic? que paso que te atrajo? - me pregunto curioso, pero sin perder la sonrisa ni el carisma, había algo en el que me gustaba, supongo su humor, o su sonrisa, o quizás era su olor a verbena que me hacia saber que sabía que era, que existía la gente como yo, que no iba a correr de mi.

- digamos fue una pérdida familiar y necesite un nuevo comienzo- le contes mirándolo y sonriéndole con los ojos de la forma más cortez que encontré.

- Comprendo lo que se siente, he pasado por eso, vas a estar bien, nuevos comienzos ayudan y mucho -toco mi hombro y me dio su compasión, me gustaba este chico era muy bueno.

-Gracias, confió en eso- me perdí en su mirada, por unos segundo eternos, no sabía que pasaba pero era rara la situación- ehm, vas al grill? -pregunte un poco despistada.