A través del teléfono #AT1

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Maratón 10k

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Micaela

Salí de casa al terminar de despedirme de mis padres, me metí en una tienda, y ahora estoy en caja, he comprado unas cervezas para la pijamada con Ariana, y palomitas que se hacen en el microondas para verla serio con Mateo. Llevo puesto una playera de The walking dead, que no me sienta nada mal, y también llevo unos vaqueros y unos Tenis. Lo sé, no es un atuendo tan brillante, pero me gusta, y es para ver mi serie favorita, con mi chico favorito.

  -Veintidós con ochenta-dice la cajera al terminar de pasar los productos por la caja.

Le doy el dinero, salgo y tomo el autobús.

El trayecto no es muy corto ni muy largo, y llego en quince minutos a la casa de Mateo, está a dos cuadras de la parada de autobús, así que tengo que caminar. La calle es muy bonita, ya había venido antes aquí, pero igual me sigue sorprendiendo lo bello que es. Llego, paso por el pequeño jardín, y antes de tocar la puerta de madera, me fijo que haiga traído todo.

Palomitas, listo; cervezas para la pijamada, listo; lagrimas, están por llegar.

¿Ropa para la pijamada? Seguro que se les ha pasado eso por la mente, pero, ya tengo ropa en la casa de Ariana, eh dormido ya tantas veces ahí, que ya casi es como mi segunda casa. Toco la puerta y espero.

Cuando se abre la puerta, los ojos de Mateo se abren como platos al verme, su cabello está un poco despeinado, pero igual se ve lindo.

  -Micaela-balbucea, solo puedo ver su rostro, ya que todo su cuerpo lo tiene escondido tras la puerta.

  -Hola-digo-¿Puedo pasar?-sus ojos se abren más. ¿Qué le pasa?

  -Son las siete y cuarenta-dice con su cuerpo todavía escondido.

  -Aja ¿Qué pasa?

  - ¿No ibas a venir a las ocho?-pregunto el castaño

Tiene razón le dije que vendría a las ocho, pero no tenía nada que hacer en casa así que vine antes. Pero ¿porque esta así? ¿Estará alguien ahí dentro? No lo sé.

  -Si...bueno...no tenía que hacer...-respondí torpemente-¿Puedo pasar?

  -Si claro-responde mirándome directamente-digo no

  -¿Por qué?

  -Bueno...estaba... a punto de darme una ducha

  - ¿Y?

  - Y...bueno-dirige la mirada hacia un lado-lo que pasa...es que estoy en bóxer

Suelto una risa .Empujo la puerta y me adentro en su casa.

  -Ni que fuera a ver tanto-me burlo. Lo veo, y es verdad lo que ha dicho, lo único que tiene puesto es un simple bóxer. Mis ojos se abren como platos, mi mente pervertida sale y me imagino muchas cosas.

El me señala con una sonrisa en su rostro, me dice que me siente en el sofá, cierra la puerta y lo veo desaparecer en el pasillo.

Su casa es muy hermosa, la paredes de blanco hace que la casa este aún más iluminada, el televisor que está pegado a la pared con un pequeño mueble debajo de él. Bajo unos dos escalones, y estoy en su sala-comedor, me siento en el sillón y saco el móvil y veo que tengo dos mensaje de Ariana.

''Te espero a las diez''

''O si puedes antes, no entiendo ni mierda esto''

Me rió y guardo el aparato. Le grito a Mateo si puedo preparar las palomitas, me grita que está bien. Entro es su cocina y meto la bolsa al microondas, pero la saco rápidamente, ya que la serie comenzara dentro de una hora.

Mateo sale después de veinte minutos con el torso completamente desnudo, me mira y me ruborizo.

  -¿Qué?-me pregunta con una risa

  -Nada

  -¿Qué, te intimida esto?-da una vuelta con la palma de su mano por todo su pecho, y me ruborizo aún más.

Entra a una habitación y sale con una playera igual a la mía.

  -¿Dónde?-me levanto del sillón al instante

  -En una tienda de comics

  -Igual yo-digo sonriendo

Me propone jugar con la consola de juegos mientras tanto, y acepto

  -¡Ahhhh! -grita

  -Si-grito

  -¡NO!

  -Te eh ganado-me burlo sacando la lengua

  -Me eh dejado ganar-inventa una escusa

  -Si claro-respondo poniendo los ojos en blanco

Miro la hora y faltan tres minutos para que empiece la serie, le digo la hora, y nos dirigimos rápidamente a la cocina, meto la bolsa de palomitas en el microondas; Mateo saca una gaseosa de una cajón y unos vasos y sale de la cocina corriendo. Vuelve en apenas diez segundo.

  -¿Qué falta? ¿Te ayudo en algo?

  -Saca un boul-le ordeno luego de escuchar el pi pi pi pi del microondas. Saco la bolsa del electrodoméstico, rompo el paquete y hecho su contenido en el boul que Mateo lleva en brazos.

Salimos corriendo de la cocina hacia la sala y cambio de canal, veo que Mateo sale corriendo por el pasillo, y vuelve con algo en la mano.

  -Solo faltaba esto-dice poniendo el paquete te pañuelos en la mesa, junto a los vasos.

La pantalla proyecta una cuenta regresiva desde diez, y oigo sonar el timbre.

  -Ah-se para rápidamente-yo abro.

Oigo unas gracias y Mateo vuelve con dos Pizzas.

  -¡Pizza!-grito

  -Oh si-me sigue la corriente.

La tele proyecta los últimos cuatro segundos, y comienza la intro.

  -¿Ya está llorando?-me pregunta Mateo, que está sentado junto a mí, cuando ve mis lágrimas.

  -Si-contesto entre lágrimas

  -No te preocupes yo también lo hago-responde, lo miro y sus ojos están rojos.

Luego de unos minutos y unos cuantos pañuelos tirados por el suelo llego ese momento donde Negan mata a uno de tus personajes favoritos. Me rompo en llanto, y escondo mi cabeza en el pecho de Mateo; el también llora, pero no tanto como yo; luego vino la segunda muerte, fue inesperada, solté un grito y seguí llorando. Me recosté en las piernas de Mateo, y deje de llorar poco a poco. Luego que terminara Mateo apago la tele, y nos quedamos a oscuras, salvo por la pequeña lámpara de la mesita al costado del sillón, el me comenzó a rascar la cabeza mientras mi llanto aminoraba, hasta que paro de sobarme la nuca.

  -Sigue por favor-suplique, era una sensación muy dulce que así que sienta las llamadas mariposas en estómago. Y el continuo.

Solo quedaban unos cuantos trozos de pizza, mi llanto paro, y me levante, y él también lo hiso. Se dirigió al interruptor y prendió las luces, sus ojos se sorprendieron por algo, se agacho y se volvió a levantar pero esta vez traía algo en sus manos. Lo vi bien y...ohoh.Me miro con una sonrisa mientras sostenía la caja de seis botellas de cerveza en su mano, bueno en realidad yo solo pensaba beber una botella con Ariana, lo demás lo iba a dejar en su casa para otra ocasión.

  -¿Enserio?-pregunto con una mirada burlona y divertida.

  -No son para mí-mentí

  -Si claro-respondió con una mirada desafiante.

  -¿Sabes qué? Necesito una ahora-responde sin pensarlo.

...

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