Prostituta (J.C.)

6- Jos Canela

- Buscando compañía, cree poder con eso?

El sonríe y está a punto de contestarme cuando un guardia me toma fuerte del brazo

- Deberías estar trabajando -dice enojado, pues he estado parada aqui mucho tiempo- no querrás un castigo verdad?

Susurra lo último logrando ponerme nerviosa, cuando me digno a abrir la boca para contestarle el peli negro lo hace por mi.

- Ella ya está trabajando, si no te has dado cuenta. Así que te voy a pedir que la sueltes antes de que pierdas tu trabajo.

El lo mira y después a mi,que solo puedo mantener mi vista baja.

- Lo lamento, no tenía idea -suelta mi brazo y se aleja de nosotros-

Acaricio mi brazo, seguramente una marca roja aparecerá en el debido a lo mucho que me ha apretado y el guardia estará vigilandome toda la noche.

- Estas bien? - su dulce voz varonil me saca de mis pensamientos de niña atemorizada-

- Si señor, lamento haberlo hecho pasar esta vergüenza

Me disculpo y el sonrie

-No me diste ninguna verguenza y porfavor, permíteme comenzar bien - me extendió una mano- soy Jos Canela

Yo le sonreí, creo que esto ya había comenzado mal aunque a el no parece importarle, extiendo mi mano.

- Candy Doll a sus ordenes

Estrecha mi mano con esa hermosa sonrisa aunque sé que esta insatisfecho por no saber mi verdadero nombre.

- Asi que, eres una de las princesas de aquí?

- Se supone que si

- Como es eso posible?

- Me gustaría seguir hablando contigo, pero como habrás visto, debo trabajar y estar con un hombre toda la noche y no conseguir dinero me traerá grandes problemas.

Estoy retirándome cuando me agarra delicadamente mi mano.

- Entonces te pagaré por tu compañía, el dinero no es problema.

No podía negarselo si el me contrataba,son parte de las reglas.

- Bien

- Perfecto, podríamos ir a un lugar mas privado?

Lo miré de arriba a abajo, traía puestos unos jeans en color gris y una camisa negra con delgadas rayas gris a juego con unas simples Vans negras, sinceramente la camisa dejaba mucho que decir , podía notar que era fuerte y ese pantalón le aprieta de enfrente, lo que quiere decir que, o tiene un miembro grande o se compra talla pequeña para resaltar lo que no tiene, lo que sería una lástima, pero siendo sincera son pocas las veces que veo pollas jóvenes y no son tan grandes como prometen y juran los dueños, con respecto a los viejos, bueno, ¿quien se asombraría de un pito flacido y viejo? Exacto, una completa enferma.

- Claro papi.

Vi como sus hermosos ojos se oscurecieron, el me ofreció su brazo y yo gustosa lo tomé, caminábamos entre la gente con la mirada fija enfrente, algo que siempre debo hacer cuando llevo a alguien arriba, para que no me afecten sus comentarios, al subir la escalera me concedió el paso, sentí su mirada en mi culo, pero la verdad no me incomodó, este chico es guapo y comienzo a sospechar que sexy, me siento alagada en este caso, al llegar a mi alcoba , abro la puerta entrando primero y despues me volteo completamente para mirarlo, esta viendo mi cuarto, que no esta desarreglado pero tiene gusto , no tanto para mi porque tiene rosa en todas partes, se voltea para mirar una foto de mis amigas que esta pegada a la pared y es cuando miro ese trasero, oh dios mio, es tan redondo y perfecto, la mayoría de los traseros que veo son aguados y para nada sexis como este, me muerdo el labio y antes de que se de cuenta que miro su retaguardia me dirijo a la mesita de noche para servir dos vasos de vodka, cuando me giro , ahora está sentado en la cama mirándome, le sonrío y me siento a su lado, pasándole la bebida que recibe gustoso.

- Bien, cuéntame de ti - oh no principe-

- No tengo mucho que contarte, porque no mejor me hablas de ti.

El dió un trago a su bebida que sujetaba con la mano abierta en una forma bastante elegante, este chico es muy formal y a decir verdad me gustaría saber como es y porque se comporta tan estirado a veces.

- Jamás sabré tu nombre? -pregunta con sus hermosas cejas fruncidas-

- Tengo estrictamente prohibido decirle mi verdadero nombre a un cliente -contesté honestamente- y eres un tramposo ya que empezabamos a hablar sobre ti -tomé un trago y lo miré fijamente a esos hermosos ojos café -

El sonrió poco a poco

- Bien, bebe, Mi nombre es José Miguel Canela, pero todos me dicen Jos, mis dos padres viven en Miami dirigiendo una empresa mientras yo dirigo la de planta aquí, su nombre es Corporation "CD9" y la dirijo junto a mis 4 socios y amigos con los que, te aviso, he venido hoy. Tengo 21 años y una hermana que vive en California.

Sonreí

- Pensé que tendría que emborracharte para sacarte información, ahora sé porque eres tan elegante y sofisiticado papi.

El sonrió

- Ahora tu turno muñeca...

Mi sonrisa desapareció por un momento y luego se convirtió en otra seductora, levanté una de mis cejas dispuesta a responderle....