La mayoría del viaje dormí y la otra mitad miré fotos en mi celular y escuche música. Durante mi vida la música siempre ha sido importante, amaba cantar aunque mi voz era horrible, en su mayoría escuchaba rock y otras veces algo de pop aunque eso era más bien un secreto, pero el 100% de la música que me gustaba era en inglés por lo que era un sueño para mi vivir en un país donde escuchara hablar inglés todo el día.
Por fin arribamos en Sydney, ya estaba oscuro deberían ser las 10 pm según mis cálculos, ya tenía un lugar visto para quedarme. Una pequeña habitación con cocina y baño, suficiente para mi. Tomé un taxi y llegué a mi nuevo hogar. Lo primero que hice antes de desarmar cualquier maleta fue meterme a la ducha, dios cuanto la necesitaba. Hacía un calor horrible en esta ciudad. Cuando por fin terminé de ordenar todo me di cuenta que ya eran casi las 1 am y a las 8 am tenía mi primera clase. Definitivamente necesitaba dormir.
Ya era Lunes y empezaban mis clases, me duché y vestí unos jeans, una polera blanca y pos supuesto mis Vans negras. Deje mi cabello suelto como siempre, pinte mis labios rojos pero no sobrecargados y delinee mis ojos verdes para que resaltaran. Ya estaba lista y moría de nervios, según yo literalmente ya que sentía mi corazón latir al mil por ciento, mis manos sudaban y no podía desayunar ya que sentía que devolvería todo lo que aún no tenía en mi estomago. Sabía que me costaría entrar en confianza, idioma nuevo, universidad nueva, gente nueva. Uff! ésto sería difícil - exclame en voz alta mientras cerraba la puerta de mi nuevo hogar.
Cuando llegue a la universidad, por supuesto en taxi ya que no conocía nada aún no me arriesgaría a llegar tarde el primer día, era mucho más grande y hermosa que las universidad en mi país, incluso la gente lo era, en este corto tiempo ya había visto alrededor de 10 chicos lindos, esto era el paraíso. Caminé por la universidad tímida y fuí a ver mi horario, mi inglés no era de los mejores pero al fin y al cabo entendía y creo que me hacia entender de forma clara, después de todo para eso estaba ahí, para aprender.
Paré en mi casillero, en Chile no tenía uno de estos, me hacía sentir como si estuviera viviendo una típica película extranjera, mientras estaba absorta en mis pensamientos voltié para seguir mi camino y choqué con algo, pero cuando logré fijar mi mirada comprendí que no era algo si no alguién.
- Ups!! perdóname - dije algo avergonzada.
- No te preocupes. Hey tu acento no es de acá!!! ¿de donde eres? - pregunto el chico.
- De Chile! - exclame demasiado exaltada por su curiosidad.
- Wooo genial y que haces por estos lados - dijo el chico, mientras yo pensaba en lo atractivo que era.
- Vine por una beca para estudiar inglés, acabo de llegar. Por cierto me llamo Samanta y tú? - No me costaba entrar en confianza con este chico ya que hablaba tanto como yo.
- Mi nombre es Ashton, encantado de conocerte Samanta
- El gusto es mío - ups creo que eso ha sonado algo coqueta pensé luego de haber articulado las palabras.
Nuestras miradas fueron interrumpidas por un chico que golpeó la espalda de Ashton con cierta confianza. - Hey Ash que tal? vamos a clases - girando su vista para toparse justo con mis ojos.
Era un chico atractivo, fue lo primero que pensé cuando lo vi, pero no fue sólo eso, su mirada transmitía algo diferente y sentí como si nuestras miradas hubieran estado puestas uno sobre el otro un buen rato aunque creo que fueron un par de segundos. Se sentía como en las películas. Era rubio y tenía los ojos azules más hermosos que haya visto eran profundos como el mar pensé, para luego reírme de mis estúpidos pensamientos cursis. Era delgado y muy alto pero lo que más me gusto era su forma de vestir, unos pantalones negros ajustados y una polera blanca con un smile amarillo.
Hola dije tímida - dirigiéndome hacia el chico misterioso, así había decidido llamarlo en mi mente.
Un hola aún más tímido salió de aquel chico, más bien era un hola indiferente con, según yo, nada de expreción. Por lo que no pude seguir conversando con él, me costaba mucho comunicarme con personas más tímidas que yo, o que no hicieran ningún esfuerzo por comunicarse.
Nos vemos después Samanta - dijo Ash besando mi mejilla antes de partir.
Ok Ash nos vemos - dije despidiéndome de él y mirando al chico misterioso quien dijo adiós sólo con su mano y sin siquiera dirigir su mirada hacia mi. Bueno estaba acostumbrada a que la gente no me prestara atención al menos que fueran mis amigos cercanos, por lo que no le di demasiada importancia. Otro chico lindo que no presta atención en mi. Creo que las cosas serían igual aquí como en Chile. Como mencioné anteriormente había pololeado un par de veces pero no era una chica que provocara la atención del sexo opuesto a primera vista casi siempre lo lograba con mi humor y forma de ser, pero esta vez no estaba en plan de conquista por lo que no me importaba mayormente, o por lo menos eso pensaba yo.
Camine hacia mi clase absorta en mis pensamientos, cuando me di cuenta ya estaba en el salón y las clases ya habían comenzado. Bien hecho Sam primer día y ya estas pasando vergüenzas - pensé antes de interrumpir la clase.
Permiso, Buenos días - dije con un hilo de voz y mis mejillas coloradas.
Buenos días señorita - contestó el profesor de aproximadamente 40 años - Soy el señor Smith y usted es? - Mi nombre es Samanta Rae - complete la oración del profesor.
Adelante señorita Rae, supongo que usted es la alumna nueva que viene de ... - claramente el profesor no sabía el nombre de mi país y seguramente jamás había escuchado de él. Mientras pensaba esto y estaba apunto de contestar escucho que alguién lo menciona antes que yo.
Chile!! - resultó ser Ashton quien respondía mirando a mis ojos con una sonrisa gigante a la cual yo respondí con una igual, no era mi intención coquetear con él aunque su sonrisa era hermosa, sólo me hacía feliz conocer a alguién en este salón. Miré hacia su lado y pude observar al chico misterioso, tengo que conocer su nombre, pensé.
Bueno señorita Rae tome asiento - dijo el profesor sacándome de mis pensamientos, lo cual hizo que me sonrojara levemente. Indico el asiento que se encontraba al lado de una chica. La clase terminó normal aunque entendía la mitad de lo que hablaba el profesor, malditos australianos por que hablan tan rápido, o quizás era mi falta de concentración la que impidió que lograra entender la clase ya que durante todo el tiempo sentir un par de ojos que no dejaban de mirarme, pero no pude identificarlos ya que no me atreví a voltear. De quién sería esa mirada??
-------------------------------------
Ya se que aún nadie vota o lee esto pero yo estoy entusiasmada escribiendo así que creo que llegaré por lo menos hasta el cápitulo 4 de una vez así la historia se pone más entretenida. Espero que la lean!!!!!!!!!! :D las amaré por siempre si lo hacen!!!! les dejo mi twitter si alguién se digna a ver esto las seguiré al instante si me dicen que leyeron esto pleaaaaaase :) @5SecsofBeaurito !!!