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HimuMido-Erotofonofilia

Parafilia: Erotofonofilia: La erotolalia consiste en excitarse cuando se está hablando se sexo, y si la excitación se obtiene al realizar llamadas telefónicas utilizando un lenguaje erótico, se trata de erotofonofilia.

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— Vamos, ya lo habíamos conversado, dijiste que lo harías por mi baby. — Dijo Tatsuya mientras recostado en su cama hablaba con su novio, la distancia de un país a otro los había separado, hace más de dos meses que no se veían.

— Idiota, es demasiado vergonzoso, no puedo hacerlo. — Respondió Midorima completamente ruborizado, no era que no tuviera ganas, claro que fantaseaba con hacer algo así, pero el sexo telefónico era demasiado indecoroso.

— Tampoco quisiste hacerlo por web cam, vamos, estaremos un año sin vernos las caras, ambos tenemos necesidades, quiero al menos escucharte, saber qué piensas en mí.

— Si pienso en ti maldición.

— En serio y ¿Te tocas?

— ¡Basta!

— Por favor Shintaro, no seas tan tímido, pensé que ya te había quitado esa manía de ser correcto, eras más osado según recuerdo.

— Esta bien, si tanto lo deseas lo haré, no sé cómo se hace así que empieza tú.

— Ok, ok, ves que eres el mejor, aquí voy. — Se aclaró la garganta mientras se acomodaba con la espalda recargada en las almohadas de su cama. — ¿Qué estás haciendo en estos momentos?

—Hablando contigo.

—Holy shit, responde algo más sexy.

Midorima pensó un poco... nada pasaba por su mente.

—Bueno, bueno, entonces, me he estado tocando mientras pienso en ti. —Estuvo a punto de morirse de vergüenza.

—Genial, y dime ¿Ahora te estás tocando?

Midorima se preguntó si debería o no hacerlo, se despojo de la parte de debajo de su pijama, y tomó su hombría para comenzar a masajearla.

—Si estoy tocándome, mis manos recorren mi miembro.

—Oh muy bien bonito lo haces genial ¿Qué te gustaría que te hiciera? — Habló lascivo Himuro.

—Quisiera que me tocaras, que me besaras y me acariciaras.

—Oh yes, quiero tocarte, mmm...

— ¿Tú también te estás tocando? —Preguntó incrédulo el de ojos verdes, se sentía algo tonto, de pronto al escuchar la sensual voz de su novio en un gruñido de placer lo hizo ponerse a tono, su miembro despertó en serio y comenzó a masturbarse con más ganas, dio un jadeo largo que pareció excitar más al del lunar en la línea contraria.

—Ahhh, quisiera estar ahí y arrancarte la ropa, meter mi lengua por todas partes de tu cuerpo.

Ahogó un grito al aumentar la velocidad de sus tocaciones.

—Eso es ahora métete un dedo e imagina que es mi pene. —el ex Shutoku dudó en hacerlo, pero estaba demasiado prendido y quería sentir algo dentro, se recostó en su cama con las piernas abiertas y con cuidado introdujo un dedo dilatando la zona.

— ¿Ya estás en eso?

—Si...mmm...

Nunca supo cómo tuvo el valor de hacer tal cosa, continuó masajeando su entrada mientras con la otra mano seguía estimulado se pene, sus gemidos eran cada vez más fuertes, al otro lado de la línea Tatsuya estaba de excitado, visualizó una de las tantas sesiones de increíble sexo que solían tener cuando este estaba en Japón, poco pasó para que terminará corriéndose en su mano.

—Ya me corrí, por favor no quiero volver a hacerlo por teléfono, te necesito.

—También quiero estar a tu lado, pero debemos ser pacientes ¿Por qué no enciendes la cámara de tu PC?

—Idiota, ya te dije que eso no.

Una cosa era gemir al altavoz, otra mostrarse de aquella manera.