¿𝐄𝐧𝐚𝐦𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐄𝐋? {𝐋𝐢𝐛𝐫𝐨𝟏}

Capitulo 18: ¿Quieres...?

POV's ALEXA

Salí de la duche, tenía el vestido perfecto para esta ocasión, ondule las puntas de mi cabello, me maquille y me vestí.

—Wow, que hermosa estas amiga—. Dijo Angie desde mi cama.

—Le dará un infarto a Ale cuando te vea—. Siguió Sofi.

—Gracias chicas—. Tocaron la puerta. —Ya me voy, deseenme suerte—. Les guiñe el ojo y ellas silbaron.

—Hola Alex...—. Se callo cuando me vio, su mirada me recorrió de arriba abajo, me sonroje al tope.

—Hola Alejandro.

—Estas muy hermosa—Me tómo de la cintura.

—Tú estas muy guapo—. Y es verdad, vestía con una camisa blanca de mangas largas y un pantalón de vestir.

—¿Me permites hacer algo?—. Me miro directamente a los ojos.

—Claro—. Se fue acercando poco a poco hasta que unió nuestros labios.

Me encanta esa sensación.

—¿Vamos?—. Pregunto cuando nos separamos.

—Vamos—. Entrelazo sus dedos con los míos, subimos al elevador.

Cuando llegamos a la primera planta casualmente ahí estaba Sebastián, cuando su mirada cayo en nosotros abrió sus ojos como platos, después bajo a nuestras malos entrelazadas y frunció el ceño.

Ja, púdrete de los celos, idiota.

En la entrada estaba un hermoso ferrari negro, Ale abrió la puerta de copiloto para mi, entre, él rodeo el auto y entró obviamente de piloto.

—¿Puedo saber donde vamos?—. Pregunte.

—Es una sorpresa—. Arranco el auto.

—Odio las sorpresas—. Cruce mis brazos sobre mi pecho.

—Te vez linda cuando te enojas—. Me miro. —Yeres mas cuando te sonrojas—. Volvió su vista al frente.

Lo odio, pero igual me encanta.

Después de aproximadamente 20 minutos de viaje llegamos a un hermoso restaurante.

—Wow—. Exclamé.

—¿Te gusta?—.Abrió la puerta de mi madl, me ofreció su mano y yo con gusto la acepte.

—Sí, me encanta—. Puso sus manos en mi cintura.

—Buenas noches—. Saludo el señor que estaba en la entrada. —¿Tienen reservación?.

—Sí, Alejandro Ruiz—. Él busco en la, supongo yo, lista de reservaciones.

—Aquí esta, mesa para dos, por favor siganme—. Nos guió a la segunda planta.

—Y dime ¿porque tanto misterio?—. Pregunte.

—Ya veras porque—. Al final del pasillo había una puerta.

—Espera, antes de abrir te cubriré los ojos—. Alcé una ceja. —Oh vamos, confía en mí—. Al final accedí.

Escuche la puerta abrirse, ya no sentí la presencia de Alejandro.

—¿Ale?.

—Tranquila, aquí estoy.

—¿Ya me puedo quitar esto?.

—Espera—. Escuche sus pasos. —Ahora si, ya puedes quitarla.

Así lo hice, casi me desmayo por lo que ví, estaba Ale con un ramo de rosas y a la par de él había una luces que formaban una frase.

«¿Quieres ser mi novia?».

Cubrí mi boca de la impresión y mi vista cayo en Alejandro. Este se puso de rodillas.

—Se que hemos pasado muchas cosas tanto buenas como malas, sé que fuimos mejores amigos desde niños, y dejame decirte que siempre me haz encantado, me encanta tu manera de hablar, la forma en que frunces el ceño cuando no entiendes algo, tu cabello, tus ojos me vuelven loco, tus sonrisas en especial cuando yo las provoco, pero lo que más me encanta es tu manera de enamorarme cada día más y tu ni siquiera te das cuenta, así que ahora te digo después de tanto tiempo, Alexa Villalobos, ¿quieres ser mi hermosa novia?—. Mis ojos estaban cristalizados, esas palabras son las más hermosas que me han dicho.

—¡Sí!—. Su sonrisa se agrando, se levanto, yo con toda la emoción del momento me tire en sus brazos y junte nuestros labios.

—Al fin tengo lo que siempre quise—. Me alzo al aire.

Cuando mis pies volvieron a tocar el suelo, lo abrace fuertemente.

—Prometeme que jamás me dejarás sola.

—Eso jamás, prometo estar contigo en las buenas y en las malas—. Beso mi frente. —Ahora, disfrutemos de nuestra noche.

El mesero llego, sirvio nuestra comida, nuestra velada con Alejandro fue mágica, recordamos todo lo que vivimos de niños, nuestra mas grande travesura. Me encanta estar con él, por primera vez me siento bien.

°°°

—Es el mejor día de mi vida—. Dijo él, ya habíamos llegado al hotel, y ahora nos encontrábamos frente a mi puerta.

—El mía no—. Su cara cambio drásticamente.

—¿Porqué?-.

—El mejor día de mi vida fue cuando te conocí—. Su sonrisa volvió.

—Ahora solo eres mía—. Se acerco a mí.

—Y tu eres mío.

—Siempre lo fui—. Me tomo de la cintura. —Ahora despídete de tu sexy novio como se debe—. Reí, pero aún así lo bese, lo bese como nunca.

—Hasta mañana—. Hable en voz baja.

—Se que es muy pronto para decir esto, pero espere muchos años para decirlo, te amo—. Me miro directamente a los ojos cuando lo dijo.

—Te amo—. Repetí yo, me dio un corto beso.

—Hasta mañana preciosa—. Fue lo ultimo que dijo antes de entrar a su habitación.

Abrí la puerta y entre yo a la mía, me recargue en la puerta y mordí mi labio.

Soy su novia...