Aquí empezaba y terminaba.

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No podía pensar en más que en llegar a verla, era la persona que más ansiaba ver desde que la había conocido.

Mientras caminaba a una sala donde solo existía una puerta gigante por donde cruzaría la mujer que amaba solo podía pensar en este fin de semana.

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Después de estar aproximadamente 15 minutos en aquella silla que elegí para sentarme; ella cruzaba esa puerta entre las cinco personas más que habían salido de allí.

Me levanté de la silla y las piernas me estaban temblando, las manos no paraban de enfriarse y los ojos expresaban emoción y tristeza. Era ella, era la laura de la que me había enamorado, estaba ahí frente a mí y ninguna podía parar de temblar.

"La...lau...laura"

laura no podía responderme, ella solo podía sus manos en la boca y veía como lentamente bajaban lagrimas por su rostro.

Cuando ninguna de las dos  respondía correctamente, me lance a ella y la abracé como esa primera vez (en realidad mejor que la primera). Escuchaba como laura susurraba "aquí estoy"

Yo lo único que quería era estar así un tiempo más.

Lau: ¿vamos? ¿empezamos?

levanté mi mirada y fue cuando menos dude en darle un beso, nuestros labios se juntaron y siendo la más sincera, no quería otra cosa más que tenerla cerca en esos momentos.

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Después de estar en un auto saliendo del aeropuerto recibí una llamada de mi mejor amigo preguntando como iba todo y seguido pidiéndome que fuera la persona más fuerte del mundo para lo que se venía.

Me quedé pensando después de colgarle que así debía ser, mientras durara debía disfrutarlo; pero cuando pasara debía aceptarlo con total humildad y fortaleza.

Laura no dejaba de mirarme, era como si nunca lo hubiera hecho. Yo la veía de vez en cuando, pero esos pequeños instante en lo que la miraba, podía jurar que no quería nada más.

Lau: te pasa algo?

"no, porqué la pregunta?"

Lau: es que hacía un momento no te había escuchado, te quedaste muda después de la llamada.

Yo solo le sonreí, no quería responder más.

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En lo  que llegamos a mí casa mi madre estaba esperándonos, independientemente de si se había terminado o no todo con laura; ella la quería demasiado.

Mam: señorita laura! que hace usted por aquí de nuevo?

Laura respondió con una sonrisa: Por aquí de nuevo señora luz, molestándolas.

Mam: usted no es una molestia, no señorita.

Invité a laura a que siguiera. Nos dirigimos a mi habitación para que ella dejara todo allí, dormiríamos esa noche en mí casa y madrugaríamos al siguiente para la finca de mis abuelitos.

Por aquí puedes dejar todo -dije-.

lau: muchas gracias eve.

"no es nada, también está la ducha por si quieres utilizarla"

abrí mi ropero para que ella pusiera ahí lo que quisiera.

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Cuando bajamos a almorzar todo estaba en la mesa, nunca me gustaba comer en la mesa, lo hacía por respeto o por que mis padres siempre me obligaban.

Empezamos a comer y sonó mi móvil, mamá me miraba con unos ojos de 'no contestes', la verdad era que nunca contestaba a esa hora y menos con el nombre de ana apareciendo en mi pantalla.

En lo que terminé fui directamente al baño para lavarme los dientes y llamar.

-timbre sonando-

"Bueno?" -respondí.

ana: mujer bonita!

"Como estás ani?"

Ana: muy bien y tú? a esta hora ya con laura respirandote en la nuca ¿me equivoco?.

"A esta hora ya con ella ani y no, no está respirandome en la nuca."

Ana: yo solo espero que pases un buen fin de semana mujer y que sepas que quiero detalles de todo, tú sabes. El lunes que ya por cierto no debes ir más a el colegio iré por ti temprano para que pasemos  un día de spa juntas.

"Muchas gracias ani, yo preferiría estar metida en mi cama todo el día."

Ana: nada de eso, ya sabes... no me faltes.

-colgó-

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Terminé de cepillarme y fui a mi habitación, laura estaba doblando un pantalón. Me detuve en la puerta y ella seguía tan concentrada en el pantalón que no se había fijado en mí.

Entré y ella se fijó en mí.

"Te ves bonita, como siempre."

Laura se puso un poquito nerviosa.

Lau: no sé porque dices todo así, como si no supieras que me dan nervios.

Me acerqué a ella despacito y le dí un beso en su  boca, no podía estar resistiendo todo el fin de semana; cuando iba a despegarme de ella, ella solo se limitó a abrazarme y a darle continuación a nuestro primer beso desde que bajó de ese avión.

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La tarde estaba lluviosa así que habíamos decidido pedir un domicilio de comidas rápidas y quedarnos en casa viendo películas.

Cuando la sentí tan cerquita a mí no podía pensar más en que ella se iría, que bonita o no esta era una dspedida.

Estuvimos riendo toda la tarde, muertas de miedo y con algo de sueño en lo que caía la noche.

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Despues de la comida laura y yo fuimos al balcón a tomar un poco de aire.

Laura tomó mi mano y dijo: No sé que vaya a pasar, pero sea lo que sea quiero que sepas que tú fuiste algo bonito en mí vida y que sí, quizá no fue una forma bonita de terminar como aquella noche en el hotel; pero, aquí estoy de nuevo para darle una merecida despedida a lo nuestro.

"ese es mi punto, aquí estamos de nuevo dándole una nueva despedida a esto que alguna vez decidimos iniciar juntas."

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2:24AM

Laura estaba entre mis brazos, por alguna razón adoraba verla dormir.

Besé su espalda por que sabía que eso era lo que más le gustaba. Después de ello pude conciliar un poquito más el sueño; hasta que la sentí moverse y ponerse de frete a mí.

Dijo adormitada que tenía frío a lo que no dudé en abrazarla, ella era la mujer que quería en mi vida por el resto de los días que me faltaban.


Un capítulo algo demorado, pero como siempre aquí de nuevo.

Capítulo 30/31. Espero como siempre que os guste y que se encuentren muy bien lectoras bonitas.

Un beso y abrazo gigantesco.

Eve.


Y Ahora Es Mi Novia...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora