Blake & Chris

C u a r e n t a y d o s

Chris había llegado a la funeraria lo mas temprano que pudo, portaba una camisa azul marino de mangas largas y jeans de mezclilla oscura, junto con sus converse. Sabia que a un funeral se debía vestir completamente de negro, pero, ¿Cómo usar algo tan triste honrando a una niña tan feliz? Charlie siempre había sido importante en la vida de Chris, ayudaba cuando se lo pedían y fue ella quien le recomendó cantarle a Blake en su fiesta de cumpleaños. Aun no creía que finalmente la enfermedad había atacado su corazón.

La vio allí, a Blake, tan triste, tan rota, y por primera vez supo que era sincera, había dejado aquella faceta de chica dulce y alegre, cambiándola por la verdadera B. Y aun así le gustaba, a pesar de las ojeras, el cabello alborotado y las lagrimas. Quizás no era tan malo conocer la otra cara de las personas. Se acerco hasta ella y la envolvió en sus brazos de forma cálida y sincera. No tenia palabras que pudiesen consolar a su amiga, y le dolía de una forma inexplicable verla así, sabia que estaba triste, que se sentía sola y desprotegida, pero de alguna manera Chris también sentía lo mismo, por eso era que se complementaban tan bien. Sabían cuidarse y quererse mutuamente.

-Tranquila nena... Estoy aquí.

Las lagrimas por parte de Blake no cesaban, no podía controlarlas y solamente quería estar con Chris. Hasta ese momento se dio cuenta de lo mucho que lo había necesitado y extrañado. No quería tenerlo lejos nunca más.
Christian deposito un tierno beso en la frente de su amiga y acaricio sus cabellos dorados, dándole a entender que no estaba sola. El se quedaría con ella a pesar de las dificultades.

....

Blake aclaro su garganta y sorbió su nariz mientras caminaba hacia el centro del lugar desdoblando la hoja donde había escrito el pequeño discurso que daría ese día. Dio un vistazo fugaz a su hoja y la doblo y guardo en el bolsillo de su pantalón (su madre quería que vistiera vestido negro, pero se sentía tan incomoda que se negó rotundamente, por lo que eligió unos jeans oscuros y una blusa negra, nada formal). Limpio sus lagrimas que caían silenciosamente y suspiro, para comenzar a hablar.

-Charlotte siempre fue mi mejor amiga. Estuvo para mi cada vez que la necesite, incluso cuando no me quería cerca. Hace tiempo ella me pidió redactar el discurso que diría en su funeral, pero eso no es algo que diré ahora, eso es solo suyo.
Charlotte sufrió los efectos del cáncer desde los 11 años. Y siempre estuvo positiva, haciendo reír a todos los que estaban con ella, no seria justo recordarla como solo "La niña con leucemia", pues fue mucho mas que eso. Ella merecía vivir. Merecía jugar, reír hasta que le doliera el estomago, tener muchos amigos y enamorarse, aunque le rompieran el corazón.
Amber Charlotte siempre será mi hermana mayor, y se que ahora tiene lo que merece, un lugar para descansar. Su dolor ha terminado.
Te amo, sis.

....

Todo el mundo se había marchado, solo quedaban Chris y Blake, recostados en la cama de la chica. Ella sentía que debía hablar con Chris, pero no lo hacia, seguía teniendo miedo, y tristeza. No quería que el se fuera también.

-Lo siento.- Hablo Chris mirando al techo de blanco, mientras con una mano acariciaba la cabellera rubia de la chica y la otra reposaba sobre su abdomen.

-No es culpa tuya.- Su voz sonaba apagada, seca, definitivamente no le agradaba sentirse de esa forma.

-Por todo, B. Quizás te presione, lo siento. Ahora, con lo de Charlie... Se que todo esta mas jodido que antes pero te prometo que yo no te dejare.

Las lagrimas por parte de la rubia aumentaron t se sintió débil, sin fuerzas, lo único que tenia ahora y con lo que se mantenía era Chris. Siempre lo había tenido allí y no lo había notado hasta ese día, el no le fallaría, ¿Cómo hacerlo si la amaba? Y no era amor de amigo a amiga, o de hermano a hermana, era algo mas fuerte, y se sentía tan bien que no estaba dispuesto a dejarlo.