"Las Palabras"

Capítulo 5: "El cambio"

Un atractivo jovencito de cabello alborotado que vestía una camisa sport, pantalones de mezclilla y zapatillas sonreía ante la mirada de sorpresa de su abuelo.

Soy yo abuelito, tu nieto Gokú, dijo el joven de cabello alborotado sonriendo.

Vaya hijo te ves más apuesto vestido así, esa niña debe haberte cautivado de verdad para que tu decidas cambiarte de otra forma para impresionarla, dijo su abuelo.

¡Eh¡ si abuelito, dijo Gokú sonrojándose.

Pero sabes así te vistas como te vistas, tu siempre serás el chico noble y alegre que conozco, si esa niña te llega amar que te ame por lo que eres no por lo que pretendes ser, dijo el anciano.

Así será abuelito pero este cambio no es solo por ella, sino también por mí, quiero demostrarles a todos en la preparatoria que yo también puedo ser popular, dijo Gokú sonriendo mientras su abuelito lo miraba con preocupación.

Gokú desayuno rápidamente no dándole opción a más preguntas a su abuelito, luego salió lo más rápido que pudo de su casa para ir a la preparatoria.

Casa de Milk:

¡Nos vemos papito¡ decía la bella pelinegra tomando sus libros y bolso.

¡Nos vemos hija¡ cuídate, dijo su padre.

La pelinegra salió de su modesta vivienda caminando rápidamente hacia el paradero más cercano para tomar el bus que la llevaría a su preparatoria.

Minutos después:

La pelinegra miraba una y otra vez su reloj, mientras pensaba: llegare tarde y todo por quedare dormida. En eso sus pensamientos fueron interrumpidos por el claxon de un auto que paro junto a ella.

Sube linda te llevo, decía un joven cabello de flama.

Vegueta, dijo sorprendida la pelinegra.

Sí pasaba por aquí y me dije, ¿por qué no pasar por la niña más bella de la preparatoria?, dijo Vegueta en tono seductor.

¡Eh, no gracias¡ allá viene mi bus, dijo la pelinegra caminando rápidamente hacia el bus dejando enfurecido al joven cabello de flama.

Milk, no entiendo porqué eres la única chica que se me resiste, pero ya caerás, ya lo verás tú serás mi chica, dijo Vegueta con molestia mientras empezaba a conducir su auto.

Bus:

Una bella pelinegra subía al bus mientras buscaba con la mirada algún asiento disponible, logro ver en uno de los asientos traseros a un joven demasiado igual a Gokú pero que vestía de otra manera.

¿Gokú?, no puede ser, a él le encanta vestir con sus gi de entrenamiento, ya debo estar paranoica de no haber dormido bien por hacer el trabajo que me imagino a Gokú en todas partes, pensaba la bella pelinegra cuando alguien le hizo una señal para que se sentase. La pelinegra tomo asiento, ya no prefirió seguir mirando pues pensó que sus sentimientos hacia el joven le estaban haciendo jugar una mala pasada.

Gokú iba tan sumido en sus pensamientos que ni se percato que su amada pelinegra iba en el mismo bus que él. El joven no dejaba de pensar en todo lo que sus amigos le habían dicho para que sea un buen conquistador, que ni cuenta se dio que el bus ya había parado en su preparatoria para que los alumnos que estudiaban allí bajasen y ahora continuaba su camino.

Minutos después:

Gokú miro hacia la ventana y al ver al bus alejarse de su preparatoria, se paro alarmado de su asiento y fue hacia el conductor para pedirle que detenga el bus.