El Mejor Amigo de mi Hermano

CAPITULO 1

- Lo siento Isabelle -acomode mis gafas y me arrodille frente a sus descubiertas piernas, para recoger mis libros de historia.

Pero ella lo vio de manera diferente.

- Mueve te experimento, estorbas nuestro camino -dijo haciendo referencia a sus amigas.

Todas iguales, todas sus súbditas.

- Lo lamento mucho -me puse de pie al tiempo que ella tomaba mi hombro para empujar me, y que yo quede contra los casilleros.

- Maldita nerd, sabes que nunca tienes que cruzarte en mi camino ¿Verdad? -puso sus puños a cada lado de mi cabeza y yo me sobre salte cuando golpeo el casillero. - No te hago daño por tu hermano, tu hermano es la única razón por la que tu vida no es un infierno. -sus ojos miraban fijamente los míos y parecía que quisiera matarme con la mirada y lo estaba logrando por que yo, en esos mismos momentos, me comportaba como un cachorro asustado.

- Isabelle -le grito mi hermano - ¿Que crees que haces? -se acercó trotando hasta nosotras y se paro frente a mi cuando Isabelle dejo caer sus brazos.

- Ashton, cielo, yo....... -por primera vez en mi vida podía apreciar en vivo y en directo como la chica más popular del instituto, la que siempre me había tratado como su esclava, se quedaba muda - Estaba ayudando a Michy, es que lo que pasa es que me dijo que necesitaba un trabajo de un cortometraje que centrara el buylling para su clase de actuación -la tipa sabia como lavarse las manos.

- Y si era un cortometraje se puede saber ¿Quien estaba grabando? -pregunto mi hermano.

- Estábamos practicando antes de comenzar a grabar -y otra vez salia con las manos limpias.

- ¿Eso es cierto Michy? -cuestiono mi hermano sin voltear se, ya que creo que quería matar a Isabelle con su mirada.

Estaba a punto de responder su pregunta con un "claro que no" cuando en un descuido de mi hermano ella me agrando los ojos, dándome a entender que si mi respuesta no afirmaba lo que decía, iba a tener grandes problemas.

- Si, el profesor Clayton quería que nos enfoquemos en hacer vídeos o algo así este semestre -Ashton volteo a mirarme no tan convencido de mi respuesta.

-Lo vez mi amor, Michy y yo somos buenas amigas -soltó ella.

- ¿Mi amor?¿Cielo? Isabelle ni siquiera hemos follado, así que no me vengas con apodos lindos -Agarro mi mano y me arrastro hasta el estacionamiento en donde casi golpea el auto.

- Ashton, tranquilo -Trato de acercarme y tocar su espalda para calmarlo pero el parece seguir muy enfadado y no se por que.

- ¡Demonios Michy! ¡Quiero que me digas la verdad y quiero saber si ese pedazo d zorra te amenazo alguna vez! -por dios, el no tenia idea de cuantas veces lo había hecho.

- No -me obligue a decir, si no quería tener problemas sería mejor mantenerme callada.

Mi respuesta en vez de calmarlo, al parecer lo enfureció mas.

- Dime la verdad Michy ¿Alguna vez esa perra te amenazo?

- No -dije para mi sorpresa muy firmemente.

El suspiro y poco a poco comenzó a tranquilizarse.

- Siempre cuenta me todo ¿Si? Eres mi hermana, la única familia que tengo, y haría lo que sea para protegerte.

- Lo se -ni hermano abrió sus brazos ofreciendo me un lugar entre ellos, que muy gustosamente acepte.

Sin decir nada el y yo nos montamos en su auto y comenzó el viaje a nuestro hogar.

Bueno, hmmmm......., ¿Como comenzar? Ah, ya se.

Primero lo primero, me llamo Michelle Wallas, soy huérfana, mi única familia es Ashton, mi hermano, tengo 18.

No voy a hacer esto, esta es una introducción, como si yo misma no supiera quien soy.

Así que en resumen soy una chica normal, que al parecer lo único que hace mal es estudiar, y usar lentes, tengo una mejor amiga, una vida, solamente que por alguna razón, no soy "aceptada", por así decirlo.

Isabelle es la chica con la que todo el mundo quiere acostarse, es la adolescente mas desarrollada que eh podido ver en toda mi vida, es muy alta, muy delgada, y tambien tiene curvas.

Esta bien que todos los chicos tengan la baba hasta el piso por ella pero, eso no le da el derecho de menospreciar a los demás.

Siempre que pasa por los pasillo con su "grupo", todos y todas se apegan a los casilleros, para dejarlas pasar, eso mas que respeto, como algunos lo llaman, es una maldita dictadura.

Y ya que siempre eh sufrido sus abusos, ni se imaginan lo que siempre le hago en mi mente, pero solo hay, no tengo la valentía de hacer algo para que me respete, por que se que ella tiene el poder para destruirme.

- Llegamos -mi hermano se bajo del auto y cerro la puerta detrás suyo, yo repetí la misma acción.

Nuestra casa no era el la suite del hotel plaza pero, no me quejaba, era mas de lo que tenia en el orfanato.

Ah es cierto, no les explique como salí de ese infierno.

Resulta que nuestros padres nos abandonaron, tanto a mi como a Ashton, y cuando mi hermano cumplió la mayoría de edad, lucho por salir de ahí y lo logro, luego de eso me adopto.

Me dio una nueva vida, en la cual si podía respirar aire puro, y dibujar mis propios sueños.

El me salvo.

- Iré a mi habitación -le avise pero antes de que me pudiera ir el agarro mi antebrazo.

- Sera mejor que te sientes -un poco asustada por su tono tan serio, lo acompañe hasta la sala.

- Esta bien ¿Que me querías decir? -pregunte un poco ansiosa por saberlo.

- Drewvendra -eso lo dijo muy rápido.

- Habla mas despacio -dije lentamente.

- Drew vendrá, ya se inscribió para el próximo lunes en el instituto, y se mudara en un edificio cerca al nuestro -me quede sin aire, literalmente.

Todavía recordaba muy bien a Drew, el chico que me dio mi primer beso.

El se fue, sin despedirse, sin ver atrás, y nunca mas lo volví a ver.

- ¿Por que me lo dices recién ahora? -pregunte todavía procesando la información.

- ¿Te molesto?¿Te sorprendió?

- No, solamente que no me esperaba una noticia como esa en estos momentos -no dije nada mas y me puse de pie.

Camine a paso rápido a mi habitación y antes de que Ashton pudiera abrir mi puerta y preguntarme que por que demonios me porte así , le puse seguro a esta.

No estaba segura de poder soportar a Drew, no después de lo que me hizo.

El, no era mi persona favorita en estos momentos, tenia que evitarlo todo lo posible, por que sino me rompería y yo no podía permitir que eso pasara.