Ella ni se imagina cuánto la quiero.
No tiene idea de lo mucho que me hace sonreír.
Ella no sabe que cada vez que escucho su risa mi corazón se acelera. Cada vez que escucho su voz, me invade la alegría.
Puede que sepa que cada mañana me despierto pensando en ella, pero no sabe que no sale de mi mente en ningún momento del día. Lo mucho que la echo de menos cuando no está.
Ella ni se imagina las ganas incontrolables que tengo de besarla y tenerla entre mis brazos.
No se hace una idea de todo lo que causa en mí, del bien que me hace.
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Cartas para ella
RomanceÉrase una vez... No... Espera. No voy a empezar este libro como se empiezan las típicas historias porque no es una típica historia. Aquí voy a transformar mis pensamientos y sentimientos en palabras. Os voy a contar la historia de cómo conocí a ESA...