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Luego de separarnos de ese hermoso y tierno beso, Harry abrió la puerta del copiloto y yo subí, él rodeó el auto y también se subió. Estuvo conduciendo alrededor de 20 minutos cuando aparcamos al frente de un hermoso y lujoso restaurante, Harry se bajó, rodeó el auto y abrió mi puerta, yo bajé y el rizado le entregó al chico del ballet parking las llaves de su hermoso auto. Llegamos a la puerta de entrada y nos recibió el portero.

- ¿A nombre de quién la reservación? - Preguntó el hombre de edad avanzada. Quizás unos 50.

- Harry Styles - Respondió el ojiverde.

- Por aquí por favor - Pidió para guiarnos a una mesa que quedaba a las afueras del restaurante.

La mesa estaba situada en un balcón de donde se podía ver casi todo Los Angeles; era hermoso. Harry pidió por mí y por él, y el camarero se retiró, nos miramos unos segundos para luego decir;

- Eres hermosa, ___ - Comentó el rizado haciéndome sonrojar.

- G-Gracias. Tú igual - Respondí para luego pensar bien en lo que dije.

Imbécil.

Harry rió.

- ¿Sabes? Tus nervios dan risa, ya que tiemblas y hablas tartamudeando, pero sobre todo, dices cosas sin sentido - Dice para luego sonreír.

- Lo sé - Bajo la mirada - Soy una idiota -

- ¡Oh no, preciosa! - Me agarra la mano y acaricia el dorso con su dedo pulgar - No eres idiota. Sólo estás nerviosa. A cualquiera le pasa, y en especial cuando se está con un famoso o con su ídolo - Habla tratando de calmarme. ¿Puede ser más perfecto?

- Gracias por entenderme, Harry - Agradecí para luego dedicarle una sonrisa. Él responde el gesto.

- Aquí está su orden, señor Styles - Anunció el camarero para dejar los platos y jugos en la mesa. El camarero se retira y comenzamos a comer.

- Está buenísimo - Comenta mientras toma un sorbo de su Coca-Cola.

- Es cierto - Correspondí haciendo lo mismo.

- Y; ¿Cuándo cumples tus quince? - Preguntó volcando su mirada a su plato ya casi vacío. Come rápido.

- En un mes - Sonreí - Estoy feliz de que vayan a cantar en mi fiesta; gracias -

- No, cariño. Es un placer - ¿Acaso Harry Styles me llamó cariño?

- ¿Harry? - Llamé su atención.

- ¿Hmm? - Emite posando su mirada esmeralda en mí.

- Yo... ¿Te gusto? - Cuestioné sin medir lo que decía.

Pegué con mi mano mi frente. Idiota.

- Bueno; s-sí - ¡¿Escuché bien?!

- ¡¿Qué?! - Exclamé con la boca abierta.

- Sí, ___. Me gustas mucho. Desde que te vi llorar en tu casa al vernos, me pareciste tierna y hermosa. Luego, no podía dejar de pensarte, por eso le pedí a tu mamá si te podía llevar a la secundaria, porque quería estar cerca de ti. Sé que soy un pedófilo por ésto, pero-...

- ¡No, Harry! ¡No eres un pedófilo! ¡No me llevas 10 años! ¡Me llevas sólo 7. No es tanto! - Lo interrumpí.

- ¡Pero, ___, para mí es como si te llevara 50! Porque pienso que algún día te cansarás de mí y me mandarás a la mierda por ser mayor que tú - Habló sin pensar. Supongo.

- Harry, yo jamás haría eso; yo... T-Te amo - Confesé para luego darme cuenta de la confesión que hice.

- ¿T-Tú qué? - Preguntó abriendo sus ojos como platos.

Obsesión Sin Límites | Harry Styles.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora