6.Inquina

1K 115 15
                                    

Nunca te había molestado tanto una risa, al contrario, siempre habías disfrutado al escuchar las carcajadas de la gente que te rodeaba, pero ahora... Agarraste la brocha con más fuerza y Jinyoung, sentado delante tuyo y esperando a que empezaras a maquillarlo, se dio cuenta inevitablemente. 

—No aprietes tanto que la vas a romper —Comentó sarcásticamente.  Le miraste con el ceño fruncido olvidando por un momento que era tu superior y que eso era una falta de respeto, aunque cuando te devolvió la mirada con la ceja arqueada volviste en ti.

—Mira recto —Le ordenaste para disimular. Sin fijarte mucho empezaste a esparcir los polvos por su cara, ya era algo de cada día así que podrías hacerlo incluso con los ojos cerrados. 

—Sí, fue muy divertido, estoy segura de que la próxima vez nos lo pasaremos genial —La voz de tu amiga volvió a meterse en tu cabeza. Estaba hablando animadamente con Yugyeom sobre lo que habían hecho juntos el sábado, día que habías rechazado para salir con él dando la excusa de que no te encontrabas bien. 

Estabas molesta, muy molesta, aunque cada vez que estabas apunto de gruñir Jinyoung te miraba de reojo y tenías que aparentar y sonreír con falsedad. No estabas celosa, por supuesto que no, pero no te parecía correcto que hubiera llamado a tu mejor amiga para ir a una cita cuando el último mensaje que te había mandado había sido "No pasa nada, ya quedaremos otro día!" No era que no tuviera derecho a salir con otras chicas cuando ni siquiera erais nada, pero nunca hubieras pensado que Yugyeom era ese tipo de chico y te fastidiaba tanto... Aun más cuando cada vez que cruzabas miradas con ellos dos te sonreían como si nada. 

Habiendo terminado de maquillar a Jinyoung pasaste a Youngjae, quien tampoco tardó en darse cuenta de como mirabas a la nueva pareja. 

—Creo que el otro día tuvieron una cita. ¿No es genial? Yugyeom parecía muy contento cuando volvió a casa. —Dijo inconscientemente, ingenuo ante todo lo que estabas sintiendo en ese momento.  

—Me alegro por él. —Respondiste cortante, echándole la cabeza hacia atrás bruscamente para poder dibujarle mejor la línea de ojos, aunque en realidad no hiciera falta.        

Por primera vez desde que empezaste a trabajar en la compañía volviste sola a casa. No tenías ni idea de dónde se había metido tu amiga pero tampoco tenías ganas de saberlo. Después de salir de la sala de espera fuiste directa al ascensor, aunque en cuanto se abrieron las puertas de este te encontraste con quien menos querías ver en esos momentos. 

—¿Te vas ya a casa? —Preguntó Jinyoung en un tono desinteresado, apartándose un poco para que tuvieras sitio. Tu asentiste sin ganas y él soltó un bufido— Al parecer has tenido un mal día. 

—No te lo puedes ni imaginar —Le miraste de reojo. 

—Deberías superarlo, lo tuyo con Yugyeom no iba a funcionar de todas formas. 

—¡Hubiera funcionado si no te hubieras metido en medio! —Exclamaste. Los ojos de Jinyoung se abrieron como platos, no había esperado que explotaras tan pronto— ¿También vas a ir a decirle a ella que se aleje de él para que no arruine su imagen? Oh, no, porque ella te cae bien y no distrae a Yugyeom del trabajo, ¿verdad?  

—¿Que tonterías estás diciendo? —Dijo con firmeza— Yo solo hice lo que debía, no eras la correcta para Yugyeom y no hubiera estado bien que salierais, punto. 

—¿Y tu quien te crees que eres para juzgar si soy adecuada para él o no? —Apretaste con fuerza la correa tu bolso. Si no fuera por ello probablemente hubieras hecho una locura. 

—Soy... —Pero no tuvo tiempo de terminar, las puertas del ascensor se abrieron. 

—¡Un idiota, eso es lo que eres! —Gritaste antes de empezar a alejarte de él para que no pudiera ver tu cara roja y tus lágrimas de rabia.            

Let me || Kim YugyeomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora