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Ya se había vuelto rutina, ella se encontraba de nuevo en algún bar de esa ciudad besando a algún tipo que no distinguía muy bien,gracias al efecto del alcohol.

Luego de estar pasada de copas todos los hombres de aquel bar se le parecían a Iken,tal vez por eso le gustaba salir de fiesta,para sentirse un poco mas cerca de él.

Eso estaba mal,muy mal,porque ella era consciente de que tenia que olvidarlo,sin embargo,ansiaba recordarlo con todas sus fuerzas, aunque doliera más que nada.

"Te he extrañado mucho,cariño",susurro mientras bailaba con aquel hombre,él solo la miro de manera extraña y prosiguió a besarle el cuello sin mostrar importancia por sus palabras.

Inconscientemente ella dejo caer una lágrima por su mejilla,aunque estaba bajo el efecto del alcohol de inmediato se dio cuenta que el no era Iken,fue como si esa acción le hubiera eliminado todo el alcohol que poseía su cuerpo,porque simplemente él le hubiera respondido de una forma dulce,él hubiera querido que fueran juntos a casa,a verse a los ojos,a dormir, a hablar o incluso a mirar las estrellas mientras el contaba cada uno de los lunares que ella poseía, los cuales eran muchos a decir verdad

Pero ella no se separo de aquel hombre,porque sintió que si lo hacia tendría que enfrentarse a la realidad, y la realidad es lo que ella ha estado evitando desde su partida.

Tomo dos copas más de alguna mezcla de alcohol, fumo 4 cigarrillos más de esos que encontraba, lloro por algunas horas más mientras miraba sus manos,beso a 3 hombres más imaginándolo a él, se sintió vacía una vez más sintiéndose helada, y lo extraño toda la noche,una vez más como todas las noches.

GOODBAY.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora