Ambos Akashi se mantuvieron en silencio por un par de minutos, el mayor contemplaba la imagen que su hijo le habia mostrado, algo curiosos, sus ojos viajaban hasta el más pequeño detalle de los niños, admitiendo dentro de sí, que estos dos eran un calco de su hijo a esa edad.
-Así que... ¿son hijos de Furihata?- le pregunto el anciano antes de devolver el cular a su dueño
-Sí, lo son- respondió el contrario
-Ari y Lev...- murmuro para sí mismo mientras intentaba recordar algo -No son nombres muy comunes-
-Lo se... aun así tengo la sensación de haberlos escuchado antes-
-Yo también... luego recordare donde, por ahora... ¿Qué tienes pensado hacer?-
-¿Eh?- Akashi se halló desconcertado, perdido en sus pensamientos antes de escuchar la pregunta, haciendo que se sorprendiera
-Te estoy preguntando, ¿Qué piensas hacer?, ¿Los traerás aquí?, ¿vas a dejar que se queden con Furihata?, ¿les darás una pensión?- esas y más opciones cruzaron por la boca del mayor para que luego de escucharlas, Seijuro suspirara
-Por ahora... lo único que hare será encontrar un abogado que me ayude a probar la paternidad y reconocerlos como mis hijos-
El padre del adulto asintió, para que luego sus ojos viajaran a un lado de su hijo, encontrándose con los boletos del concierto. Abrió los ojos un poco impresionado antes de tomarlos, los observo curioso para luego mirar a su hijo.
-¿Cómo conseguiste estos boletos?, debieron constarte una fortuna- comento el mayor
-¿De qué hablas?-
-Estos boletos están agotados por todos lados... Hace unas semana dieron comienzo a una competencia de violín donde convocaron a los artistitas más jóvenes y talentosos de todo Japón, los enfrentamientos se daban en distintos lugares de la región, hoy es la gran final, y uno de los finalistas es hijo de un gran empresario, por eso las entradas se vendieron rápidamente ya no queda ninguna en el mercado... me sorprende que hallas conseguido sin siquiera saber de qué eran- le explico de forma calmada su padre mientras hacía unas pocas señas con las manos
El de ojos rojos se mantuvo en silencio unos segundos para luego mostrar una pequeña sonrisa.
-Ari participara hoy... él debe ser la persona contra la que se enfrente el hijo de ese gran empresario- luego de aquellas palabras guardo silencio, por su mente se cruzó brevemente las palabras que el chico le habia dicho y las relaciono con la información recién otorgada por su padre... si era una competencia, ¿Por qué Kouki no asistiría? ¿Qué era más importante que el ver a uno de sus hijos tocando en un gran teatro frente a una importante multitud de personas, por un título tan importante?
-¿Esta bien si te acompaño?- pregunto el Akashi mayor llamando la atención del menor
-Pensaba invitar a Shintarou, pero si tú quieres- contesto por educación, para luego volver a perderse en sus pensamientos
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El día habia transcurrido como siempre, Hotaru intento prestar atención a sus clases pero no podía sacar de su mente lo ocurrido el día anterior, sentía como su orgullo habia quedado algo dañado y eso lo hacía enojar.
Sus padres intentaron animarlo con palabras alentadoras antes de que abandonara su hogar, y, pese a ello, algo dentro de si se movía inquieto, estaba seguro de lo que quería hacer: quería verlos a todos de nuevo y enfrentarse a ellos una vez más, pero esta vez no daría su brazo a torcer como la última vez, no se iría con la cabeza agacha y con las palabras atoradas en su garganta... además... No pudo evitar sentir como su temperatura subía un poco y el calor invadía su cara.
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Los herederos milagrosos
FanfictionEsta historia comienza con 3 casos distintos sobre unos jóvenes donceles que deciden criar a sus hijos a espaldas de sus ex parejas y padres biológicos de los niños. Cada uno pasando por dificultades distintas, donde les hace darse cuenta lo difícil...