¿Me Amas? (Yaoi/BL/Chicoxchico)

Capítulo 7: Esteban.

Narradora.

De pronto hubo un silencio incómodo en aquella habitación oscura y helada en la que se encontraban. La madre de Adams, Adrianna aún seguía observando atentamente las expresiones de su hijo, hasta que Adams decidió romper el silencio finalmente.

— A-aún no puedo creer que seas mi madre — mientras Adams decía eso, sus lágrimas se desbordaban de sus ojos.

Mientras tanto Adrianna lo miraba indiferente y se aproximó a hablar.

— Ni que yo hubiese decidido ser tú madre — dijo ésta seriamente, era obvio que no le importaba los sentimientos de Adams.

— Todo fue culpa de tú estúpido padre! — en ese instante levantó la voz bruscamente. — Por su culpa te tengo como hijo! Él te puso ese nombre para atormentarme siempre! — Adrianna dejó en claro lo mucho que desprecia a Adams.

Sus palabras le cayeron a Adams como un balde de agua helada. No soportaba escuchar las desagradables palabras que salían de la boca de la persona que le dio la vida. Como podía ser tan cruel con su propia sangre, aunque ella no lo quiera, no hay necesidad de ser tan indiferentemente cruel y rencorosa.

James se quedaba atónito por aquella desagradable discusión, de una madre y su hijo; sobre todo por que se trata de la persona que ama.

— ¿P-por qué eres tan cruel?— cuestionó Adams con voz temblorosa.

— Si crees que lo soy, puedes irte de esta casa y dejar de ser una carga — su madre no mostraba ningún interés en mantener a su hijo, y lo demostró hechandolo.

— Puedes tomar tus cosas y marcharte para siempre. — al menos lo dejaría quedarse con las cosas que son de él  —No te quiero volver a ver en mi vida! — dijo con desprecio, se podía ver lo aliviada que estaba de haberlo hecho, realmente lo odió desde él día que se enteró que lo estaba esperando, arruinando sus estudios.

Adams no podía soportar escucharla ni un momento más, así que la miró por última vez con lágrimas en los ojos y se dirigió a su habitación rápidamente, tomó una mochila y metió en ella sus cosas, mayormente ropa, unos cuantos libros y su computadora. Al terminar bajó rápidamente y aún se encontraba su madre parada en el mismo lugar, y James enfrente de la puerta evidentemente esperándolo para irse.

— Adiós, lamento haber sido una molestia — se despidió secamente Adams que iba saliendo de aquella casa horrible y al mismo pensando en todo lo que había pasado en ese lugar, tal vez no muchas cosas buenas, pero eso hacen que sean más especiales esos momentos de felicidad.

Era evidente que Adrianna no tenía más que decir, ya había dicho lo suficiente. James se iba junto a Adams pero sin antes voltear a mirarla con odio y desprecio, hasta el punto de dar miedo. Ésta le regresó la mirada de desprecio y en cuanto cruzaron la puerta Adrianna la azotó fuertemente, haciendo que tanto Adams y James se sobresaltaran.

James

Claro que me preocupaba Adams, pero en cuanto su madre le dijo que se fuera, instintivamente pensé que era la oportunidad de ofrecerle vivir conmigo, así mismo pasaría más tiempo con él. Se que suena egoísta pero, es lo único que puedo hacer, estar junto a él cuando más me necesita, por culpa de esa estúpida mujer que tiene como madre.

—¿Ahora que vas a hacer?— pregunté obviamente sabiendo lo que pasaría.

—No lo se...— respondió ese preocupado.

—Pues... Si quie...— no logre terminar la frase ya que Adams me interrumpió.

—¡Ya se! Puedo quedarme en casa de Esteban— exclamó entusiasmado.

Aunque no me agradó la idea, me encantó como su tierno rostro se iluminaba al mencionar esas palabras.

—¿Quién es Esteban? — fue lo único que se me vino a la mente en ese momento.

Por que pensaría en alguien más que no fuera yo, su novio, es obvio que por mi parte, lo dejaría que viviera conmigo.

— Es mi mejor amigo de la infancia, pero se tuvo que ir del país.— respondió entusiasta y al mismo tiempo lamentándolo.

— ¡Pero justo hace unos días me dijo que iba a regresar aquí, a Japón! — dijo felizmente.

Que frustración que la persona que más amas en él mundo prefiera a su amigo en vez de su pareja. Me enoja la idea que ellos dos compartan la misma habitación.

— Ya veo... Que bien — dije secamente a lo que él lo tomó como algo normal, o eso creo, ya que no hizo algo que demostrara su curiosidad o algo por el estilo.

En cuanto dije eso, él busco su teléfono entre sus cosas de su mochila, debo suponer que buscó él número de ese tal Esteban, y luego sonó su teléfono unos minutos en forma de llamada.

— Hola! ¿Ya estas aquí en Hokkaido? — le preguntó por él teléfono obviamente a "Esteputo"( Esteban)

Claramente no podía escuchar lo que le respondía, pero me daba rabia él saber que alguien más estará junto a mi novio. Mientras lo hacia yo miraba a todas partes tratando de calmarme y no mostrar mi enojo y mis celos.

Vi que colgó él teléfono Adams y me miró confundido.

—¿Qué pasa?— cuestionó Adams dudoso y un tanto preocupado.

— Nada — contesté secamente, estaba molesto por lo que había hecho.

— Vamos, te llevaré a donde Esteban — dije fríamente, aunque en él fondo quería gritarle.