Live For Love.

Capítulo 31.

Cuando comienzo a despertar, lo primero que siento son los ronquidos de Daniel. 

Una sonrisa se asoma en mis labios y cuando estoy completamente despierta, tomo mi teléfono.

09:45.

Veo que tengo 1 mensaje de Nate.

'Hoy es la operación de Noah, se que lo sabes, pero el me ha obligado a mandarte este mensaje.'

Me levanto con cuidado de no despertar a Daniel y lo logro. Me doy una ducha rápida y en cosa de menos de una hora estoy lista. Le dejo una nota a Daniel, explicándole donde estoy.

Salgo de la casa y me dirijo al hospital una vez que tomo un taxi. Me bajo y unos metros antes de llegar, siento como si hubiera corrido mil kilómetros, cuando nada más había recorrido unos metros caminando. Un mareo me obliga a sentarme y una vez que siento que se va, me vuelvo a colocar de pie.

-Llegue. -digo al llegar a la habitación de Noah.

Están los chicos de The Tide ahí y al verme todos sonrien.

Austin quien estaba sentado, se levanta rápidamente.

-¿Quieres sentarte? -me pregunta de forma amigable-

Niego con la cabeza.

-No te preocupes.

Me acerco a la camilla y le doy una sonrisa a Noah.

-¿Te podemos dejar? -pregunta Drew, y guarda su teléfono en el bolsillo- Nuestro manager nos acaba de contactar y nos pide que vayamos urgente al estudio. Volveremos antes de la operación.

Noah asiente.

-Vayan -dice y les guiña el ojo-

Todos abandonan la habitación.

-Te ves algo pálida -dice Noah- ¿Tomaste desayuno?

Niego.

-Creo que estoy algo fatigada, siento que mi estomago esta revuelto.

El asiente.

-¿Quieres salir? -le pregunto-

Vuelve a asentir.

-¿Te ayudo? -le pregunto-

Niega.

-Yo puedo.

Saca las sabanas de su camino y con cuidado se pone de píe sobre sus pantuflas.

Salimos de la habitación y nos dirigimos a una terraza para los hospitalizados y por nuestra suerte estaba vacía.

Antes de llegar al pasto, Noah se agarra fuertemente de mi brazo derecho.

Por instinto lo agarro, hasta que vuelve a retomar el equilibrio.

-Gracias -murmura-

Nos sentamos en el pasto y nos apoyamos en el tronco de un árbol antiguo.

Ambos nos quedamos en silencio por unos cuantos minutos.

-¿Estas asustado?

-Claro que si.

-Todo saldrá bien. ¿Lo sabes no?.

-No sabes cuanto odio todo esto, odio el maldito cáncer.

Mi corazón se estrujo. Sin el cáncer no nos hubiéramos conocido. Y sin poder controlarlo, mis ojos se llenan de lágrimas. Noah lo nota y en cosa de segundos su rostro cambia drasticamente.

-Chloe-murmura y trata de tomar mi mano, pero la alejo- 

-Te arrepientes de haberme conocido. -y al decirlo en voz alta, las lagrimas caen por si solas.

-¡Claro que no! -se acerca rápidamente a mi- Eres mi mejor amiga, claro que no me arrepiento de haberme conocido.

-Sin el cáncer no nos hubiéramos conocido -murmuro-

Noah me agarra por los hombros desesperado.

-No me arrepiento de haberte conocido, claro que no. Siempre serás alguien importante para mi, más que importante. Estas aquí conmigo, sin juzgarme por como soy, por como me veo. Contigo puedo ser yo mismo, somos totalmente diferentes, pero aun así nos complementamos. No se como, pero lo hacemos y funciona. No puedo perderte, no a ti.

Y sin poder evitarlo, un sollozo sale de mi garganta y los brazos de Noah me refugian.

-Dios santo, lamento haber dicho esa estupidez -dice en mi oído- por favor perdóname.

Cuando puedo tranquilizarme, me separo de Noah.

-No es tu culpa, soy una dramática.

-Lo eres -dice Noah- pero yo también soy un estúpido.

Nos comenzamos a reír, pero como siempre, estoy yo arruinando los momentos.

Una tos incontrolable empezó a salir de mi, dejándome cada vez con menos oxigeno.

Noah comienza a hablarme preocupado, pero no puedo entender bien que me dice.

-mi... b.ols..o -susurro con dificultad y la tos no cesa.

Siento como Noah me recuesta en su pecho y coloca el inhalador en mi boca y cada vez que lo presionaba, sentía satisfacción.

-estoy mejor -susurro con dificultad unos minutos después y Noah asiente y guarda el inhalador-

-No hables -dice el y acaricia mi espalda- llamare a Daniel.

Niego rápidamente con la cabeza.

-Si lo llamas, interrumpirás sus ensayos, ademas le dirán a la doctora.

-¿Quien de ellos esta libre?

Si no le decía un nombre, Noah llamaría de todas maneras a Daniel.

-Logan -murmuro después de unos segundos, por lo que tenia entendido, hoy le tocaba aprenderse unas canciones en casa.

Noah asiente y agarra mi teléfono para marcarle a Logan. 

-Logan, soy Noah. Bien gracias, ¿que tal tu?.. que bueno. Entrare a pabellón en una hora, necesito que te quedes con Chloe, le dio un ataque de tos y le cuesta respirar. Yo estoy con ella ahora, no te preocupes, solo tienes que estar en una hora mas. Esta bien, Adios.

Suelto un suspiro, rogaba que Logan no mencionara nada.

-Vamos a la habitación -dice Noah- 

Asiento y me levanto con cuidado, un mareo viene a mi pero me agarro del árbol que estaba a mi izquierda. Noah se levanta después de mi. Una vez que esta de píe, pasa su brazo sobre mis hombros.

Luego de unos minutos caminando, llegamos a la habitación.

Noah se recuesta en la camilla y yo en el sofá que estaba su lado.

Nos quedamos una media hora hablando, cuando llegan las enfermeras para llevárselo.

Agarro su mano.

-Todo estará bien -murmuro algo lento, dando a entender que me costaba respirar.

-Todo estará bien -dice Noah y acaricia mi mano.

Finalmente se lo llevan y minutos mas tarde, entra Logan apurado.

-¿Que ocurrió? -pregunta cuando se sienta a mi lado-

-Solo un ataque de tos -trato de disimular lo mal que me siento.

-Se que no es así, Noah me dijo que te costaba respirar. ¿Estará bueno el tanque? -me pregunta y comienza a revisarlo- Esta todo bien.

-Es como si andará sin el -murmuro sin aliento-

Logan palmea sus piernas y recuesto mi cabeza en ellas.

Una de las manos de Logan acaricia mi espalda, mientras que con la otra revisa el teléfono.

-¿Esta todo bien? -le pregunto-

-Claro que si pequeña, no te preocupes.