Pasaría todas mis vaciones en la casa de los Styles, desde pequeña he sido bien recibida en su casa hasta el punto de nunca salir de ahí. Hace dos años se fueron a vivir a Londres, un tanto alejado de mi hojar en California, pero luego de una larga espera, estaré en tierra londinense dos meses.
Será increíble, por primera vez en dos años los veré de frente, siempre ha sido por chat, por Skype o por alguno de estos medios pero gracias al cielo mis padres me dejaron irme este tiempo y espero aprovecharlo al máximo.
Él único problema, Caleb, irónico que de lugar de estar preocupada por alguna chica que me pongalos pelos de punta, es un hombre, un hombre del que está enamorado el hombre de mi vida, Harry. Odio que sean novios, no me imagino el montón de escenas extrañas que tendré que enfrentar de ahora en adelante.
Solo espero que Gemma no se aparte de mi, ella parece ser mi consiencia, sin ella no me imagino la cantidad de estúpideces que podría haber hecho en el pasado.
Estaba a punto de irme directo al aeropuerto, pero antes de salir por mi puerta y despedírme por 60 días, mi celular vibró. Lo saqué y una hermosa foto de la última vez que vi a Harry, estaba ansiosa por verlo.
-Harry- exclamé contenta al escuchar su voz por el teléfono. Maldita enamorada.
-Hey -dijo contento- ¿ya te vas al aeropuerto?
-Estaba a punto de salir de mi casa cuando llamaste -sonreí por inercia, estaba realmente encantada de escuchar su voz, sabiendo que en pocas horas lo volvería a ver de nuevo.
-Que suerte, justo mandé a alguien de mucha confianza a recogerte - había mandado alguien por mí- abre la puerta, me dijo que llevaba mucho esperandote.
-Ya voy, ya voy -dije abriendo la puerta y al verlo ahí de pie, sonriendo solo pude lanzarme a sus brazos.
-Eres un gran imbécil Harry -dije tratándo de separme pero aún seguía abrazandome con fuerza-Harry..
-Lo siento, dos años es mucho tiempo -me dijo.
-Lo sé, pero olvidemos el pasado -dije mirandolo de arriba a abajo- como has cambiado -terminé asombrada, cada vez se ponía mas guapo.
-Y tú ni me lo digas que si no tuviera novio te haría mía en este momento -bromeó según él, cuando eso me había dado muy duro en mi corazón.
-Bueno-traté de esconder mi cara amargada- todavía no creo que seas gay.
-Bisexual -dijo al instante.
-Es la misma cosa-exclamé.
-¿Porqué no lo crees? -preguntó.
-Tan guapo, no tienes ni un pelo de gay, pero ni uno, pero me imagino que tengo que conocer a Caleb para darme cuenta -suspiré.
-Él es como una chica -dijo soriendo.
-Vamonos, voy a vomitar.
Seguidamente nos fuimos al aeropuerto, no hablamos del tema, hablamos de puras tonterías, como estrañaba a este chico, demasiado, pero aún me doy cuenta que pude haber pasado dos años sin estar cerca de él, pero eso no evita los sentimientos, el amor es el amor.
-Llegamos -dijo Harry cuando el taxi aparcaba en frente de una hermosa casa.
-Wow- miré asombrada- es hermosa.
-Vamos-dijo tomándo mi mano, no antes sin pagarle al taxista. Segundos después con la llavez abrió la puerta.
-Bienvenida-dijo Harry dándome paso para entrar primero, todo un caballero.
-Hermosa por fuera, hermosa por dentro -dije bajito, solo para mi.
Unas voces se escuchaban dentro del lugar que parece la cocina, segundos después varias personas conocidas aparecieron, Gemma, Anne y un chico sexy y guapo.
-Amor -dijo el chico guapo colgandose del cuello de Harry.
-Caleb -dije fulminándolo con la mirada.
-You&I