¿POR QUÉ SE HIEREN LOS SENTIMIENTOS?

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El tema del amor es tan complejo como el universo, tan sencilla como una palabra, tan frágil como un pétalo de rosa, tan abundante como el aire y a la vez, escaso como el agua.

Los sentimientos son la única fortaleza que tenemos a raíz de todo lo que nos sucede junto con las emociones. Ante tanta conexión con el entorno de otros nos produce la fatiga emocional. Cuando alguien nos defrauda sabemos exactamente lo que sentimos pero no aceptamos, hay etapas por la cual se pasa antes de recomponerse uno mismo. Habrá negación ante los hechos, nos negamos a ver la realidad, puede ser a través de una mentira, un engaño, una traición, una violencia verbal, física y espiritual. Luego está la ira hacia uno mismo. Llegan los cuestionamientos personales, pensamientos que nos recorren con la mala fortuna de querer ceder lugar a la culpa. Negociamos con nosotros mismo lo que nos conviene pensar, sentir y hacer al respecto.

Las personas son incapaces de no herir a otras. El sentimiento se genera a partir del interés hacia algo o alguien. Ese vínculo se vuelve fuerte pero también vulnerable. Y cuando ese vínculo pesa más de un lado que del otro se produce una inestabilidad en nosotros, es una caída, un golpe que nos arrebata por momentos. No somos tan fuertes como creemos que somos. Nadie es incapaz de sentir. Todo lo emocional siempre será una carga en lo cotidiano. El amor demanda sentirse algunas veces, nos invita a reflexionar, a cuestionar, nos hace daño y luego nos vuelve a la normalidad, todo pasa, todo por el tiempo. El tiempo es el eje de los sentimientos, el perdón no es olvidar lo que paso, el cariño no siempre es verdadero, la verdad es mentira y la mentira puede ser verdad, el engaño es defraudar, nos hacemos daño muchas veces por no aceptar las cosas como son. Ese daño es una herida tras otra, y cuando notamos que no se puede soportar ese dolor, la mente alerta, el corazón da lugar a la razón. Dejamos los sentimientos para ser cuerdos. No se puede ir por la vida sin más, o escoges depresión o elijes aceptación. Ambas son salidas. Se basa en una decisión.

"No podemos elegir si nos van hacer daño a lo largo de esta vida, pero sí podemos elegir que personas lo harán"


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