Capitulo 6

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Kuroko miraba emocionado a Kagami mientras esperaban el resultado de la primera prueba de embarazo. A decir verdad, si el pelirrojo pudiese esconderse en ese momento ya lo habría hecho, lo ponía nervioso la posibilidad de que se encontrara en cinta, para el había sucedido todo muy rápido. Todavía puede sentir la vergüenza cuando le pidieron que se abriera de piernas y lo inseminaron con el semen del peliceleste, ya que este había insistido en que se parecieran a el sus hijos, en fin, tuvo que estar una hora y media acostado de esa forma, para que luego viniera su hermano y se burlara de el por caminar como pato. 


Recordó el momento en el que ambos habían comprado el test, dios, estaba seguro de que la joven que los atendió se hizo una idea equivocada, ya que el y Kuroko no eran pareja ni el era su alfa, seguro que pensaba cosas como que había tenido un desliz o algo por el estilo. También le daba vergüenza la sobre protección de su amigo y el que lo siguiera a todas partes, ya que no era realmente necesario tanta atención, aunque le agradaba que que estuviera tan pendiente de el. 


Luego de 5 minutos a la expectativa pudo respirar en paz, la prueba había dado negativo otra vez. Cuando le dijo el resultado pudo ver la desilusión en el rostro de su amigo, pero la verdad no se sintió tan mal por el, solo le dio unas palmaditas en la espalda para animarlo. Era la cuarta vez que lo intentaban en el año y estaba verdaderamente decepcionado, ya que nunca contemplaron que los intentos fallarían. 



El doctor había dado muchas razones posibles por el que no estaba funcionando el método, tanto podía ser que el tuviese problemas hormonales, como que Kuroko simplemente era estéril. Finalmente Aomine convenció a su pareja de que si a la cuarta vez no quedaba embarazado su amigo, se tendría que hacer un examen para determinar si era el la causa de que no pudiese concebir y tendrían que intentar con su esperma o simplemente buscar a alguien mas que hiciera de vientre de alquiler.



Kagami tenia sus dudas de si realmente quería estar embarazado de Aomine, un chico que si bien no conocía mucho, se burlaba de el en la preparatoria con sus apodos tontos y mirandolo desde arriba.   Le estaba haciendo el favor a Kuroko, no a el, pero no se podía echar para atrás así como así nada mas por que no le agradase el moreno.



-Creí que estaba vez tendríamos suerte...-Murmuro desanimado Kuroko, se le encogió un poco el corazón al escucharlo tan triste. El acerco al peliceleste a su pecho y lo acomodo en sus fuertes brazos, los cuales le temblaban todavía luego de los nervios que había tenido, por suerte su amigo estaba tan concentrado en su malestar que no se percato. 



-Estoy seguro que si se puede Kuroko, solo hay que esperar-Lo abrazo mas fuerte mientras el otro lloraba en silencio.



-Disculpa mi egoísmo Kagami-kun, solo te estoy causando problemas-No le gustaba para nada ver a su amigo en ese estado de animo. Suspiro pensando en los sentimientos encontrados que tenía, quería verlo feliz, pero no quería saberse embarazado de alguien que no le amaba. 


Sintiéndose algo egoísta por pensar de esa forma, recapacito, tal vez era muy malo el no usar su don para algo bueno como lo era el darle el hijo que tanto deseaba esa pareja. Suspiro mientras le frotaba los brazos con cariño al peliceleste. Una vez dejo de lamentarse, lo miro a los ojos y le sonrió seguro de si mismo. 

Petición inesperadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora