Mi hermanastro.

||Capítulo 3; Mi hermanastro||

-Pero si aún faltaban un montón de cajas -Deje mi bolso en el suelo.

-Han dejado salir más temprano a Leo, y nos a ayudado a traer las cosas- Explicó mi padre.

-¡YO TAMBIÉN AYUDÉ! -Gritó Alex desde la cocina.

-Si, Alex, tu eras el supervisor ¿No? -Rió.

-Eso también importa.

Idiota.

-¿Entonces yo me quedo esta noche aquí? -Miré a mi padre.

-Si quieres si, yo me quedaré con Susan en nuestra casa para terminar de empaquetar unas cosas, y mañana traerlas. -Sonrió.

-Oh.. bien, bien.

(...)

Viernes, 2 días para el baile.

-Cris, te juro que como vallas con ese vestido al baile, te ignoro -Dijo Tamara.

-Eres odiosa -La fulminé con la mirada y busqué más vestidos- ¿Por que tengo que ir al baile?

-Por que si.

-Ni si quiera tengo pareja -Levanté una ceja.

-Cris, vamos, no seas aburrida.

-Iré, pero me las vas a pagar -Entrecerré los ojos.

**

-¿Y que te has comprado? -Preguntó Susan nada más sentarme en el sillón.

-Un odioso vestido, con unos odiosos tacones, para el odioso baile que ire sin una odiosa pareja -Cerré los ojos y suspiré.

-Tampoco será para tanto, digo yo -Rió Alex- Por cierto, hoy Raúl va a hacer una fiesta.

-¿Por que no llevas a Cris? -Susan me miró- Así conocerá más gente.

-¿Que? Ni hablar -Sacudí la cabeza.

-Venga Cris -Alex me dió un codazo en el brazo.

-Bueno, vale -Rodé los ojos y Alex sonrió de lado- Últimamente le digo que si a mucha, gente, me tengo que empezar a remplantear mi vida.

-Por cierto, la fiesta es en una hora.

Subí a mi habitación a cambiarme, no sé que ponerme la verdad...

-Tocaron mi puerta-

-¿Se puede?

-Si.. pasa -Estaba sentada en mi armario intentando elegir la ropa.

Sentí como cerraban la puerta y Alex se sentaba en mi cama, de repente me cogió del brazo.

-Voy a elegir tu ropa yo -Sonrió

-¿Que? Ni de coña -Bufé.

-Sh... -Empezó a regristar mi armario, saco unas prendas que no me dejo mirar, finalmente cogió unos zapatos.

Por fin me lo enseñó, cogió: Unos baqueros apretados negros, una camiseta rosa de vestir, y unos tacones del mismo color de la blusa.

-No me pondré eso -Levanté ambas cejas.

-Dejame al menos vertelo puesto.

-Suspiré- Esta bien, me lo pondré, pero la última vez que te digo que si a algo.

-Ya lo veremos -Salió de mi habitación.

Me vestí con la ropa que el me había elegido, luego fui al baño, me hice una coleta alta y empecé a maquillarme, me puse un poco de rimel, base, y un poco de brillo en los labios, luego pase al pelo, cogí mi plancha, y me separe el fleco en dos partes haciendo un rulo en cada lado.

-Tocaron la puerta-

-¿¡Quien es!?

-¿Estás lista? Tienes 5 minutos hasta que nos vengan a recoger.

Rodé los ojos y me puse los tacones, tan pronto como acabe, salí y vi a Alex apoyado en el marco de su puerta que daba en frente de la mia.

-Ya estoy lista.

-Ehhh.... mm.. estás.. -Me miró de arriba abajo y oímos una pita- Leo debe haber llegado ya.

-Si.. vamos -Empezamos a bajar las escaleras hasta llegar al coche.

-Guau! -Me miró Leo de arriba abajo- No pensaba que tubieras tanto estilo -Lo fulminé con la mirada.

-La ropa la eligió Alex.

**

-Hey Raúl, esta es Cristina, mi hermana. -Me presentó Alex a un chico rubio, alto, un cuerpo musculoso, ojos verdes.. era bastante guapo.

-Que bellezón ¿No? -Me dió dos besos.

-Raúl, no te acerques mucho, que es mi hermana -Amenazó Leo.

Que chico más sobreprotector.

-Tranquilo hermano. -Se apartó a un lado para darnos paso.

Entramos y todo estaba lleno de adolescentes borrachos, con música alta, nunca había ido a una fiesta, esto era nuevo para mi.

Miré a Alex, y me sonrió, luego me paso el brazo por encima del hombro y fuimos pasando entre la multitud.

-Si quieres algo de beber, allí esta la cocina, y el baño esta subiendo las escaleras -Me indico, luego se soltó y me dejo sola.

Busqué a Leo por todas partes, pero no lo vi, fui a la cocina y tampoco.

-Hey nena -Me giré y vi a un tipo de unos 20 años rubio, bastante guapo- ¿Necesitas algo?

-Eh.. ¿Sabes dónde esta Leo?

-Rió- No conozco a ningún Leo, pero yo puedo hacerte pasar un buen rato -Se acercó más a mi.

Apestaba a alcohol.

-No, gracias -Fruncí el seño y salí de la cocina, pero me volvió a llamar.

-Tienes un buen culo -Esta vez estaba detrás de mi, empezé a notar más su respiración en mi oreja, solo tube un impulso, darle una cachetada.

Todo el que estaba al rededor, se giró a mirarnos.

-¿Pero que haces zorra? -Se tocóa parte golpeada.

-Que haces tu imbécil, borracho asqueroso.

-¿Que paso? ¿Que has echo? -Alex me agarró del brazo y me solté.

Salí de la casa y me fui, sentí como nadie me seguía, y luego oí bulla dentro de la casa.