***NARRA BRI***
Llegué a mi casa exhausta, luego del largo día que tuve hoy con mis amigas y la emotiva graduación, solo podía pensar en dormir, pero claro, soy una persona que no tolera dormir sin comer antes, así que me dirigí a la cocina de mi casa en la que convenientemente está mi hermano preparándose un pan con palta. Con mis grandes habilidades de sigilo me dirigí lenta, cuidadosa y silenciosamente hasta su dirección. Él es grande y ruidoso, aunque menor que yo por, exactamente, un año, once meses y 24 días. Lo observo durante un rato, tiene el pelo como el mío, pero corto, lo peina hacia un lado y lo levanta un poco en punta, recuerdo que de pequeño era gordito, pero ahora está mas delgado y se pueden notar sus músculos, todos dicen que es igual a mí, pero con el pelo corto, yo digo que no, además sus ojos son oscuros como los de mi mamá y los míos azules como los de mi papá.
Se da la vuelta en un momento de descuido, no sospechando de mi presencia, sin pensarlo dos veces me lanzo a su pan y salgo corriendo por la casa hasta llegar a las escaleras. No logra ver quién fue la persona que le sacó el pan y yo me río bajito observándolo desde mi escondite en la escalera. Tiene cara desconcertada y luego pensativa, al cabo de dos minutos y su pan ya por completo en mi estomago se da cuenta que solo una persona le llevaría su comida.
—¡Bri!— escucho de repente, su voz es casi un grito. Nunca me acostumbraré a su voz grave.
—Ciego, sordo y bruto. ¡Gran combinación!—le grito en respuesta y corro a mi habitación, cierro la puerta con llave detrás de mí para asegurarme que mi hermanito no entre. Me lanzo a la cama, tomo mi peluche y sin molestarme en quitarme siquiera los zapatos cierro los ojos.
Pero no logro dormir, doy vueltas en mi cama y miro el techo. Escucho a mi hermano subir por las escaleras y golpear mi puerta diciendo lo mala hermana que soy, pero no le tomo atención, siempre es igual entre nosotros. Peleamos todo el día, pero cuando nos necesitamos siempre estamos, nos protegemos, defendemos y apoyamos, la verdad es que lo amo mucho. Luego de unos dos minutos se rinde y se va a su habitación.
Decido levantarme y tomar una ducha, tal vez eso logre hacerme dormir. Tomo una toalla, ropa interior limpia y mi pijama de ponys, que consiste en un short de arcoiris y una polera tres tallas más grande que la mía, esta tiene un pony con alas y un micrófono.
Entro al baño de mi habitación, es pequeño y solo para mí, está lleno de azulejos blancos, una tina, el inodoro, un lava manos y un mueble que tiene un espejo para dejar mis cosas personales. Dejo todo lo que traje sobre la tapa del inodoro y abro la llave de la tina, regulo el agua para que esté tibia y me dispongo a quitarme la ropa, entro a la ducha y comienzo a mojar mi cabello y seguir con el proceso de lavado; champú, acondicionador, crema; luego el cuerpo con jabón. Cuando estoy lista para salir no salgo, dejo que el agua corra y masajee mi cabeza. Comienzo a pensar en qué pasará ahora. No hay más colegio. Solo queda seguir nuestros planes.
Cuando eramos solo unas niñas soñábamos con viajar las cinco por el país, comenzamos a juntar dinero en primero medio, trabajábamos, teníamos cuotas e incluso multábamos nuestro comportamiento para juntar suficiente dinero. Cuando teníamos cierta cantidad, lo guardábamos en el banco. Al llegar el momento de salir de vacaciones decidimos ver cuánto llevábamos, nuestra sorpresa fue enorme al ver que teníamos nada más y nada menos que ¡un millón de pesos!
En segundo medio trabajamos aún más y así seguimos durante todos los años. Hace unos días fuimos a ver cuánto teníamos y casi se nos cae la cara al suelo al ver la cifra, tenemos ocho millones. Ya lo habíamos pensado y hablado con nuestros padres para entonces, íbamos a tomarnos un año sabático y recorreríamos Europa o una parte.
Recuerdo que nos costó convencer a Kate de tomarse un año sabático con nosotras, puesto que ella es la más inteligente y no quería perder un año de la universidad, pero luego de constantes súplicas cedió. Nuestros padres fueron un problema enorme, son todos bastante sobreprotectores, pero los convencimos de que cuidaríamos unas de otras y que no notarían nuestra ausencia porque todas las noches hablaríamos con ellos por Cam. Luego de un año de suplicas accedieron y nos dieron veinte millones más.
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The Five on Fire
Fiksi RemajaDías antes en facebook: "Nacha (Bri): Planeando la novela *-* son tan estúpidas, imbécilas, mesas, enfermas mentales y fomes. Las amo♥ mucho. Va a ser la mejor novela xD The five on fire. ***Comentarios*** Javi (Ally): *-* Ceci (April): y lo mejor...