MEMORIAS

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Lo encontré como desayuno, con su cuerpo desnudo, aún con su aroma a deseo, me entraron las ganas y un sútil cosquilleo me recorrió desde la punta del pie hasta mi cuello. Acerqué mis labios hasta su boca y lo besé acaloradamente, como si me urgiera sentir su fuego atravesando los poros de mi piel. Hay paraísos y placeres que se esconden bajo las sábanas. Su respiración se cortaba, su pulso crecía y el calor que nos quemaba por dentro, emergía a la superficie en forma de sudor. Mi corazón se aceleraba.

Estábamos vivos, muy vivos, en tierra de nadie.

Lo desayuné exquisitamente, una y otra vez hasta que vació mis ganas y lleno mi alma.

Con una sensación de escalofrío que camina por mi espalda, cada vez que recuerdo su vida entre mis piernas, y su corazón en mi pecho.

Fragmentos de mi alma (Fragments of my soul)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora