Saint Seiya [One Shot's]

Violeta y Milo de Escorpio

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Los cabellos rojizos de la chica se movían escandalosamente al compás del viento, llevaba un buen rato entrenando, -por no decir horas-, era una chica muy decida de si misma a pesar de ser pequeña. La luz del sol hacía ver sus orbes grises oscuras muy claras. Se limpio un poco el sudor que resbalaba en su frente, estaba lista para irse hasta que una voz la detuvo.

-¡Hey Vilu! - el escorpiano se dirigía hacia ella con una sonrisa de todo un casanova. -¿Qué haces?

-Aquí lavando ropa- respondió con evidente sarcasmo. -Hasta que saliste de tu escondite, mariquita.

-¡Deja de decirme así! - Milo se acercó a ella, el rostro de la chica quedaba en el pecho del griego. -¿Desde hace cuánto estás aquí? Hobbit.

La muchacha le miró molesta, detestaba que el escarabajo se burlara de su estatura, debía admitir que era pequeña, pero ya todo ese asunto le tenía hasta la coronilla. Hizo su pie para atrás y le dio una gran patada en la masculinidad del chico, quien inmediato cayó al suelo gritando un montón de improperios, los demás caballeros miraban la escena con gracia.

-Para que no dejes crías, cucaracha de alcantarilla- y se retiró de allí.

-Mocosa...

***

Vilu, se encontraba en su respectivo templo, el de Géminis, el cual compartía con sus hermanos: Drogas Locas y Copia barata del Mar, osea Saga y Kanon. Las noches allí no eran para nada aburridas a excepción que Saga, el mayor de los tres se pasaba como toda una madre:

-Vilu por favor baja los pies de la mesa.

-¡Ay ya vas! - respondió.

-¡Kanon! ¡Te dije que levantarás tu ropa del piso!

-Saga relájate, cómete un Snickers.

-¡Déjate de estupideces y ponte a lavar tu ropa! Por Athena, estos niños me daran un infarto - y entre quejas se retiró a la cocina.

-¡Buenas noches! ¡Ya llegó por quien lloraban!

Vilu y Kanon solo le miraron con pena ajena, y luego le ignoraron, -como siempre- sin importarle entro como si fuera su propia casa.

-¿Y qué haces aquí? - le indagó Kanon.

-Que uno ya no puede venir a visitar a sus compañeros para ver como se encuentran- Milo tenía una amplia sonrisa.

-¿Qué quieres idiota? - la chica le miraba con aburrimiento, ya suficiente tortura era verlo todos los días.

-¿Qué te hace pensar que si vengo es porque quiero algo? - se dirigió Milo "ofendido", la respuesta de Vilu fue una expresión obvia. -Bien, es que se no quiero cocinar y tengo hambre.

-¿Y qué a caso allá fuera dice Restaurante de Géminis o algo?

-Mira Kanon no seas pesado, yo te he ayudado muchas veces, regrésame el favor.

El mencionado le vio receloso, sin más acepto y así los tres se fueron al comedor. Saga les había servido, de hecho éste último andaba con un delantal azul y en el centro estaba el símbolo de la Constelación Géminis. [Que bello >//<]