Ramas de suspenso, misterio y romance, todas encajan en esta gran historia que desarrollará Nancy, como personaje principal, quién acompañada de su ansiedad y alteración, siempre tiene algo a lo que aferrarse para continuar investigando todas las pr...
Busqué a Alice y Jack, tenía que contarles lo que ocurría, no había tenido oportunidad de contarles lo que había pasado. Ambos estaban sentados en un sofá, tomando batido de frutilla.
-¡Chicos!- les grité
- ¿Qué ocurre?- dijeron los dos al mismo tiempo-
- Wild ha venido a mi fiesta y ha traído a una invitada-
- ¿Qué hace Wild acá? – preguntó Jack enojado-
- No tengo idea, pero el problema no es él, sino su invitada. Él ha invitado a Katie- dijé
- ¿Quién es Katie?- pregunta Alice confundida.
- Pues de eso les vengo a contar. Hoy en la mañana desperté en mi cama.- dije
- ¿Y qué hay de malo en eso? A menos que te guste dormir en el suelo de tu habitación, despertar en la cama es totalmente normal Nancy- dijo Jack riendo como un demente.
-No es sólo eso idiota. La otra noche, cuando volví sola a casa me perdí en el túnel, tal vez me desmayé y desperté recostada en mi cama con un olor extraño. El caso es que no recuerdo bien que paso conmigo esa noche.- les conté
- Nancy, esa noche fuimos a espiar al raro de Wild y luego volvimos a casa. No ha pasado nada luego – me explicó Alice
- Pero hay más, después de irme a dar un baño, noté que tenía una herida muy grande en mi brazo, había sangre en la lastimadura, ¡sangre! – les dije
- ¡No grites! Pareces una loca- me dijo Jack-
- Ya basta, es demasiado – dijo Alice
- Nancy, necesito que me respondas algo con sinceridad – me preguntó Jack preocupado-.
- Dime- dije enfadada
-¿Estás drogada? ¿Has consumido drogas? Dime si necesitas ayuda, sabés que Alice y yo siempre te apoyaremos – dijo Jack acariciado mi espalda.
Lo aparté bruscamente.
-¡No! No he consumido drogas, ¿Qué dices? ¿Estás loco? – dije enfadada
- No, pero al parecer tú si- dijo Jack.
- Basta Jack, Nancy muéstrame la herida, quiero verla- nos interrumpió Alice
-De acuerdo, pero no se asusten. – dije arremangando la manga de mi blusa.
Les mostré la herida.
-¡Dios Nancy! ¿Estás bien? ¿Duele mucho? – preguntó Alice preocupada-
-Estoy bien, duele pero no tanto como antés. Ya sanará. – dije tapando la herida-
-Deberías hablar con Katie- dijo Jack señalando sus enorme uñas pintadas de un rojo intenso-.
-Lo sé, yo también pienso que ella lo ha hecho.- cada vez me aterraba cuando pensaba en ella-
- Y ¿Por qué crees que fue ella quien te hizo eso? Cualquiera puede tener uñas grandes y no estar relacionado con el incidente de esa noche- dijo Alice
- Diablos Alice, ¿Qué dices? No la defiendas. Cuando desperté esa mañana toda mi ropa tenía olor a tierra mojada y es el mismo olor que tiene Katie. Además, si te fijas en sus uñas, son gigantes, como lo ha dicho Jack.
-Puede que tengas razón, trata de estar lo más alejada de ella.- dice Alice, apoyándome-.
- Si, lo estaré.- le dije con firmeza-.
Seguí disfrutando del resto de la fiesta, todo estaba tranquilo, trataba de alejarme de Katie lo más posible para poder disfrutar de la fiesta sin que me interrumpa. Hasta que...
Ahí estas- dice Wild y junto a él estaba Katie-.
-Ya vete ¿quieres? Y llévate a esa mugrosa contigo- le dije-
-Relájate, yo creo que seremos buenas amigas.- dijo Katie con su sonrisa forzada, su sonrisa era tan falsa que podría ver su falsedad desde Japón-.
Me quería largar y dormir y dormir y no despertar nunca más.
-Yo creo que no, ¿Podrían irse por favor? Estoy muy cansada – les dije a ambos procurando pareces cansada, aunque realmente lo estaba.
-De acuerdo- dicho eso, se largaron.
La noche se hizo eterna, luego de unas horas todos empezaron a despedirse e irse a sus hogares. Estaba cansada, saludé a un par de amigos y luego subí arriba para ponerme mi pijama e irme a dormir.
Me recosté en mi cama, me tapé con la frazada hasta los hombros y me hundí en un largo y profundo sueño.
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