Capítulo 8: "Toma mi locura y llévala a otro nivel"

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*Narra Carol:*

Solo podía ver las nubes que plagaban el cielo, podía ver el sol venir directo a mi cara, y a Morgan con un caballo y 3 personas más- *CRASH*- Caí al suelo, y no podía ver nada, solo sombras y siluetas, o espera, ¡Ahora si! puedo ver bien, no... espera un momento ¿esa es una mujer?

Carol: ¡No! No la golpees.- dije con las pocas fuerzas que tenía. Pude ver que un señor se me acercaba, y yo lo iba a recibir, pero de repente se transformó en un caminante completamente podrido, no entiendo... Como es que...

-¡Carol!- gritó Morgan dándole un fuerte golpe con su palo de escoba lijado (ok no) al caminante. Miré a mi alrededor y noté que el caballo que me transportaba estaba siendo comido por caminantes. ¿Pero porque esos hombres de la edad media están disparándole a esas personas?

- Carol... Carol... Carol.- escuché cada vez más fuerte. ¿Estás bien? ¿Carol, me escuchas?- dijo Morgan

-Ah... Ahm.. Si... Sólo,necesito un momento.- dije mientras Morgan se daba media vuelta y se le unía a los hombres, podía ver poco a poco como a esos caminantes les explotaban la cabeza a balazos, así que corrí, entonces encontré una casa, volteé a mirar y pude ver a una anciana quien me llamaba, parpadeé y no había nadie ¿Que me está pasando? decidí entrar, y cuando abrí la puerta...

- AJHKLÑ.- se me abalanzó una vieja decrépita.

- Déjeme... ¡AAh!- grité con todas mis fuerzas al notar que en realidad era una caminante, y no tenía ni una sola arma, así que me levanté con dolor y aplaste su cráneo contra el borde de un cuadro que se encontraba en el suelo.
Le perdí el rastro a Morgan y su grupo.

*Narra Carl*
Pude ver una débil silueta ingresando al bosque, así que la seguí hasta lo más profundo, hubo un punto en el que la perdí de vista y entonces fue cuando sentí un grito ahogado no muy lejos, no parecía ser un caminante, así que seguí los gemidos, llegué a un punto del bosque donde los rayos de luna me permitían ver mejor, fue entonces cuando encontré a Emma arrodillada y un caminante tendido en el suelo, ella no movía ni un solo músculo, entonces fue cuando mi preocupación aumento en un 30% la miré y noté que tenía la mirada elevada, parecía dormida pero con los ojos abiertos, entonces sin pensarlo la cargué (y a decir verdad es más liviana de lo que pensé) y volvimos al campamento.

CONTINUARÁ...
Perdón no haber actualizado antes, no tenía mucho tiempo con todo esto del estudio, pero mañana les viene la continuación

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