Capítulo 11: "Sigue la órden"

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Emma: Pero... 

Negan: ¡Pero! Nada... Lo dicho es hecho.

*Al día siguiente*:

Negan: Hey Rick,  ven aquí.- Rick se acercó.- Llévate a toda tu gente, a partir de la otra semana empezaré a recoger la mitad de todo lo que tienen, así que más les vale tener suficiente para mi... O  sino...- dijo moviendo a Lucille de lado a lado con una sonrisa en su cara.

Rick: De acuerdo.

Negan: Noup... Casi lo olvido,  déjame a Carl.

Rick: No lo necesitas.

Negan: Lo dejas.- dijo levantando la voz. Rick no tuvo más opción que dejar a Carl en el Santuario. Una vez se fueron...

Negan: Bien, grupo A irán al Reino, grupo B a Hilltop.

Carl: ¿El Reino?- dijo en voz baja.

Emma: Si, el Reino... ¿El Rey Ezequiel? ¿Su gata Shiva?

Carl: ¿Ezequiel? ¿Gato?

Emma: Agh...  No importa. Andando...

Negan: ¡Oh! Noo, Carl se quedará conmigo, Emma tu puedes irte.

Carl: Ella no puede trabajar en esas condiciones.

Negan: ¿No puedes?- dijo dirigiéndose a Emma.

Emma: ¿Que te hace creer que no puedo, inepto?- le dijo a Carl

Carl: ¡Hey! Solo intento ayudarte.

Emma: ... No necesito...  Tu ayuda... Si puedo.

Negan:- sonrío hacia Carl.- ¿Lo ves?

Carl: No durarás más de 2 horas allá afuera.- dijo dirigiéndose a Emma.

Emma: ¡No es! (...) No es tu problema.- le contestó con una mirada humillada. Emma se dirigió al camión.

*Narra Carl*:

Entonces cuando Emma caminó hacia el camión de carga noté su cojeo.

Carl: Pero no puede siquiera caminar.- le dijo a Negan.

Negan: Pero eres chismoso hasta la ver#@  ya te ha dicho que puede hacerlo.

Carl: Pero tú eres su líder, no la puedes enviar en esas condiciones, tú pierdes.

Negan: Yo gano, una soldada mejor, y  con respecto a ti...- dijo tomándome por el cuello de la camisa con su mano derecha y  con  la otra sujetando a Lucille.

*Narra Emma*:

¡Que metido! ¿Como se le ocurre decir semejante cosa delante de Negan?

Tomas: Oye Emma...- dijo acercándose lentamente a mi.- Fue difícil no notar que cojeabas, soy yo o... ¡NO, que sucia!

Emma: ¿De que hablas?

Tomas: Amor, sé que ahora tienes algo con ese sin ojo del otro campamento...

Emma: Espera ¿Que, hablas enserio? Ese chico y yo no tenemos nada, es un perdedor.

Tomas: ¿Entonces porque cojeas?

Emma: 1. No hemos tenido algo como eso, y nunca lo tendremos. Y 2. Eso no es algo que debería importarte.

Tomas: Pero pasa que si me importa.- dijo poniendo su frente con la mía.

Emma: ¡Que asco! Sáquese.- dije haciéndole una llave contra el piso del camión.

Arat: ¿Que es lo que...?- dijo furiosa mirándome fijamente, aún sujetando a Tomas levanté la cabeza con una mirada amenazante.

?- dijo furiosa mirándome fijamente, aún sujetando a Tomas levanté la cabeza con una mirada amenazante

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Ella dejó que peleáramos,  no dijo una sola palabra.

Emma: ¿Vas a seguir? Yo puedo seguir...

Tomas: Agh... Me...

Emma: ¿Lastima?

Tomas: No... Me encanta.-dijo con dolor en su cara, entonces doblé su brazo dominante (derecho) fracturándolo, hubo un silencio impresionante y un adolorido aullido. Tomas permaneció tendido en el suelo por  unos minutos, y luego Arat lo ayudó a ponerlo en un lugar en frente de mi. Tomas permaneció quieto el resto del viaje hasta que llegamos al punto (donde nos reunimos para recoger las pertenencias del reino.

Ezequiel: Buenas tardes.

Arat: ¿Cuanto tienen?

Ezequiel: 6 cerdos grandes.- entonces Ronald subió a verlos.

- entonces Ronald subió a verlos

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(Imagen: Ronald)

Ronald: Jum... Se ven bien.

Emma: De hecho...- dije bajando del camión con una ametralladora en mano.- No estoy de acuerdo contigo.

Ronald: Solo eres una niña, quítate.

Emma: Si, una niña a la cual Negan pidió que viniese con ustedes para tomar control, quítate.- dije tomando la pata de uno de los cerdos.- Jum... Agh... ¿Que es este olor?

Ezequiel: Son los cerdos señorita, se llenaron de barro cuando intentábamos atraparlos,  sin  embargo los hemos limpiado para ustedes.

Emma: La verdad no creo que esa sea la razón.- dije cuando Arat tomó mi brazo como un trapo.

Arat: Mira niña, no eres autoridad,  los tomamos o no llevamos nada.

Emma: Obvio, a menos que quieras morir envenenada.- dije cuando ella quedó confundida.- Esos cerdos no están frescos.

Arat: Si lo están, solo estás siendo arrogante de nuevo, así que vuelve en este momento al camión.- yo no seguí discutiendo y seguí la órden, ellos tomaron los cerdos (no sin antes haber golpeado a uno de los secuaces de Ezequiel) y nos retiramos.


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