Capítulo 7

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P.O.V  Emma

Ya ha pasado una semana en la que Luke no me dirige la palabra. No se que le sucede, cada vez que intento hablarle me evita.

En estos días he estado saliendo con Thomas. Se ha estado comportando muy dulce conmigo. Hemos ido al cine, a la playa, a comer y a otros lugares.

En este momento me encuentro entrando al instituto. Me dirigí a los casilleros a tomar los libros de historia, cuando veo a Holland coqueteandole a Thomas. Ella intentó besarle pero él se alejó. Se nota que está incómodo.

Thomas, al notar mi presencia me hizo señas para que me acercara, cosa que hice un poco confusa. Al llegar a su lado me tomó de la cintura y estampó sus labios con los míos.

Cuando nos separamos me gire en dirección a Holland, la cuál nos miraba roja de furia, se volteó, pero antes de poder decir algo al respecto, Thomas habló dejándonos sorprendidas a las dos.

—Holland, te presento a mi nueva novia.

¿Qué?

(...)


P.O.V  Yelina

Iba con mis hermanas hacia la salida cuando suena el celular de Nat.

—¿Si?...Sean,¿Qué necesitas?...¿En dónde?....esta bien, le avisaré a las chicas...por mi no hay problema...bien, adiós— colgó. Al ver nuestros rostros confusos se apresuro a decirnos— Esta tarde iremos al parque de diversiones con los chicos, Sean le avisará a Brooke, Kate y Ashley. Ah, por cierto, también irá su hermano.

—Me apunto. Necesito distraerme un poco— dije.

—¿Puedo llevar a mi novio?— preguntó Emma sorprendiéndonos a las dos.

—¿Novio?— cuestioné.

—Sí, Thomas— contestó entusiasmada.

—¿Thomas....el chico con el que te besaste?— Nat la miro con los ojos entrecerrados.

—Ajá-—dijo Emma volviendo a caminar con nosotras por detrás.

¿Y ésto cuando mierda ocurrió?

(...)

Eran las 3:00 p.m y los chicos pasarían a buscarnos en 2 horas.

Emma y Nat estaban dentro de mi armario observando qué me podría poner, ya que me suplicaron elegir mi atuendo, a lo que yo acepté sin otra alternativa.

Al final se decantaron por unos jeans rasgados en las rodillas, una blusa con el número 28 con la parte de atrás más larga que la delantera y mis converse negras.

Emma iba vestida con unos jeans pitillos negros, una blusa con tirantes suelta rosa pálido y unos tacones a juego.

Nat iba con un short de cuero negro de tiro alto, un crop-top blanco con las palabras: Fuck you en negro y unas botas militares.

Nos estábamos terminando de arreglar cuando el timbre sonó.

—¡YO VOY!— gritó Will desde abajo.

Salimos de mi habitación y bajamos las escaleras encontrándonos con Brooke, Kate, Will, Ashley y Thomas delante de la puerta.

—¿Dónde están Sean y su hermano?— preguntó Natalie.

—Me han dicho que se encontrarían con nosotros en el parque— dijo Ashley.

—Esta bien. Ustedes vayan en el auto, yo iré en mi moto— avisó Nat.

—Yo también— agregué.

—Como quieran. Nos vemos allí— sentenció Will.

Me subí a mi Yamaha YZF R1 negra y Nat a su Harley Night Rod también negra. Arrancamos, yendo así al parque de diversiones.

(...)

Estacioné bajo la sombra de un árbol y me bajé sacándome mi casco. Fui directo hacia donde sería nuestro punto de encuentro, no se encontraban todos, aún faltaban Sean y su hermano.

—¡Chicos!- gritó Sean—Les presento a Kilian, el es...

—¿Él es tu hermano?—interrumpí sorprendida.

—Sí,¿Acaso se conocen?

—Oh, claro que si, ¿No es así Yel?— dijo rodeando mis hombros con uno de sus fuertes brazos, ¡Dios que estoy diciendo!

—Suéltame imbécil— advertí.

—Tranquila fiera— contestó alzando las manos a signo de rendición.

Resoplé girando los ojos.

—¡Vamos al martillo!— gritó emocionada Emma.

—La última vez que lo hiciste vomitaste— concluyó Kate—Igualmente vamos.

Nos encaminamos hacia él, la verdad no soy de temerle a estos tipos de juegos, pero nunca me hagan subir a la rueda gigante, la odio.

En fin, hicimos la fila y a la hora de sentarnos nos ubicamos de la siguiente manera: Brooke, Will, Kate, Ashley, Sean,Natalie, Emma, Thomas y por desgracia Kilian a mi lado. No es que el chico me caiga mal, pero me parece un tanto egocéntrico y arrogante, pero nunca hay que juzgar un libro por su portada.

Se escuchaban los gritos de todos, en especial el chillido agudo de Kate, al parecer le tiene miedo a estos juegos.

Al bajarnos nos encontrábamos un poco mareados, entonces decidimos hacer un pequeño concurso entre los hombres y mujeres. A pesar de las quejas de las chicas, se decidió por el juego donde hay que embocar una pelota de fútbol con una patada por un agujero en una pared. Bien, yo soy buena para esto.

—La cosa es así; el que gana le hace una prenda al perdedor, ¿Ok?— dijo Thomas.

—Bien— respondimos todos.

Comenzaron los chicos, como era de esperarse estos no le fallaron ni un tiro. Al llegar nuestro turno no nos fue tan bien, corrección, no LES fue tan bien, pues no le atinaron ni a la pared, las pelotas salieron disparadas hacia cualquier lado. Yo era la última, estaba a punto de tirar, cuando una voz me interrumpe.

—Ya perdieron, no metieron ni una— habló Sean.

—Esperen, falto yo— me queje.

—Oh, vamos, no podrás Yel— dijo Kilian en tono de burla.

—¿Eso crees?—lo reté.

—Si puedes, todos nosotros cumplimos la prenda, ¿Va?

—Bien.

Me preparé y pateé la pelota, me giré viendo así las caras sorprendidas de todos, pues había ganado.

(...)

—Oh, por favor Yel; no nos hagas ésto.  





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