Capítulo 29.- "Ella es igual que todos"

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- Por favor, dejenme pasar. - hablé tratando de controlarme. No me dejaban entrar a mi casa y los intentaba mover a empujones pero no podia, hasta que una pregunta llamo mi atención.

- ¿Porqué te retiraste de la música? - frunci el ceño.
- Yo no me retire de la música. - mire al hombre que había dicho eso y muchos flases dispararon hacia mi.
- Creo que tu representante y tu madre no piensan lo mismo. - en sus manos traía una revista y me la dio con una página señalada.

Abrí la revista y pude ver una foto de mi madre y Andrew en una mesa con miles de micrófonos frente a ellos y en el encabezado aparecía algo que me intrigo aún mas.

"¡Súper confirmado! Ahora no solo Andrew confirma el retiro de Matthew Bennet, si no que también su madre"

No terminé de leer la nota cuando la hice puño y entre a mi casa ignorando a todos.

- Matt... - murmuró viendo mi cara. Sentía la cara caliente de rabia.
- ¿Qué significa esto? - extendi mi brazo para enseñarle la nota. Me miro horrorizada.
- No quiero que te enojes, calmate... - se intentó acercar a mi y me aleje.

Había decidido sobre mi opinión, sobre mi vida, podía ser mi madre y la persona que me dio la vida, pero yo ya era suficientemente grande para poder decidir por mi mismo y mas si se trata de mi vida y mi carrera.

- ¿Porqué lo hiciste? - murmure serio.
- Es lo mejor para ti, eras un monstruo cuando llegaste aquí Matt, entiendelo. - sus ojos se aguaron y mi corazón se estrujo pero no me permití caer, esta vez, se habia excedido. La música significaba muchísimo para mi y ella lo sabía.

- No, no lo entenderé, tu sabes lo importante que es la música y mi carrera para mi, y si tu... - mi voz titubeo pero la volvi a endurecer. - si tu ya no me piensas apoyar, bien, pero esta es mi vida.

Me dolía demasiado decir eso.
Sus mejillas estaban ya llenas de lagrimas.

- Si no querías que me enterara, ¿porque los llamaste?

No me podian haber encontrado por si solos, desde que habia empezado mi carrera nadie sabia de donde venia originalmente y cual era la casa donde me crié. Eran demasiado idotas para encontrarme por si solos.

- Yo... yo no los llame. - negó con su cabeza y la mirada en el suelo. - Genial... - murmure y di la media vuelta dispuesto a irme.
- Matt. - mi madre se puso delante de mi. - Todo esto fue para protegerte, no espero que lo entiendas en este momento, pero si espero que lo hagas en un momento.
- Lo sé, entiendo que lo haces por protegerme, pero me lo tenias que consultar. - la rodee para salir de mi casa por la puerta trasera.

Me sente en las escaleras que daban al patio y pase mis manos por mi cabello frustrado.

Por un lado, tenia a Lia enojada, creyendo que no queria ser visto con ella cuando lo que mas deseaba era gritar en el edificio mas alto de una ciudad entera que me gustaba, que me encantaba, que ella era la vagabunda mas perfecta para mi. Pero no podía, yo tengo una vida que no nos va a dejar ser feliz, salir a pasear al parque o solo comer un helado, tenia miedo, de que la lastimaran por mi culpa, de que la prensa la consumiera. Ella era demasiado buena para eso, ella merecía alguien con quien hacer el ridículo en la calle sin que el mundo entero se enterara.

Y por el otro lado tenia a mi madre. No dudaba que lo hubiera hecho para protegerme, pero... eso no quitaba que no me hubiera dicho nada. Me dolía mucho que mi madre hiciera algo así, porque yo creía que ella era absolutamente sincera conmigo, pero no.

Unos pasos me hicieron levantar mi cabeza y darme cuenta de que un paparazzi estaba parado a unos metros de mi con su cámara en manos. Un impulso me hizo hablar.

- Dime quien los llamo y te dejare hacerme una pregunta. - me pare y pude ver una sonrisa de satisfacción en su cara.
- Bueno... no tengo tan buena memoria ¿sabes? - suspire tratando de calmarme.
- Te dare 15 grandes. - apreté la mandibula. Sonrió.
- Bueno... creo que era alguien que respondía al nombre de Lia Williams.

Sentí todo mi interior quebrarse, senti cada pedazo de mi corazón romper para luego apretujarse en mi pecho haciendolo doler.

- Si me llevan a Los Ángeles en su helicóptero les dare una exclusiva. - mi voz sonó fria.

Pero no me importaba, ya nada me importaba mas que recriminarme en mi mente por dejar que Lia me gustará, por dejarla entrar a mi corazón.

Porque al final del día, Lia era igual que todas aquellas personas falsas que me prometian confianza.

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Ay :c

¿Porque Lia habra hecho eso?💔

Os quiero.
-Azul💙

Un egocéntrico enamorado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora