Mi dulce Anastasia

Capítulo 18

Pov Christian

Veo que Ana se pone tensa, todo estaba bien hasta hace unos segundos.

_¿Pasa algo Ana?_ le pregunto algo preocupado, desde que llegó he querido preguntarle que paso, pero no quiero arruinar esta noche. Ana me mira fijamente y suelta un suspiro.

_Hoy me tope con José, me dijo cosas horribles...pero ciertas, fue por eso que no quería salir de mi casa_ me explica mirándome a los ojos, esperando mi reacción, aprieto los puños muy cabreado ¡como se atreve ese hijo de puta a confrontarla!

_¿Que te ha dicho?_ le pregunto seriamente.

_No entremos en detalles por favor, prefiero olvidarlo...

_Pero yo no, dime que te dijo.

_No, por favor Christian, no quiero más problemas solo quiero disfrutar de esta noche contigo...por favor_ se ve tan angustiada que me rindo, su labio tiembla un poco y me doy cuenta de lo mal que se siente por lo que sea que le haya dicho ese idiota. Me levanto para abrazarla fuerte y de paso darle un beso en sus dulces labios.

_Tranquila mi amor, todo va estar bien...estamos juntos en esto, siempre estaré a tu lado_ digo con toda sinceridad, Ana me ha hecho descubrir que tengo un corazón que es capaz de latir por ella y he llegado a la conclusión de que definitivamente es amor lo que siento, no puedo imaginarme ni un solo día sin ella y eso que solo ha pasado un mes desde que estamos juntos, me sorprende como el amor puede cambiarte...

_¿Estas muy seguro de lo que dices?_ Ana interrumpe mis pensamientos, parece sorprendida.

_Si.

_¿Y como sabes que lo que sientes por mi es verdadero?_ sus ojos parecen brillar, debo responderle su pregunta así que comienzo a decirle lo que siento.

_Cuando te vi entrar a ese bar, me quedé embobado no puedes imaginar lo mucho que me impresionaste, durante días no deje de pensar en ti, jamás me había pasado eso, entonces algo dentro de mi quería verte con desesperación y tocarte, hablar contigo...lo que siento por ti es muy fuerte, solo quiero estar contigo toda la vida, simplemente por que todo mi ser grita por ti_ aunque estoy algo sorprendido por las palabras que digo, la tomo de la nuca y uno nuestros labios, que bien se siente estar a su lado y decirle todo lo que había guardado todo este tiempo, cuando nos separamos ella tiene una gran sonrisa en su rostro.

_Cada vez me sorprende más, fueron unas palabras muy bonitas...te amo Christian_ su aliento choca contra mis labios y su dulce voz diciéndome que me ama se queda grabada en mi mente y se repite una y otra vez. Con desesperación la levanto de su silla, la abrazo por la cintura y la beso con pasión, estoy ansioso por hacerla mía por demostrarle todo lo que siento, con mis besos mis caricias...

_Quiero...haerte el amor_ le digo con la voz agitada, ella se muerde su labio nerviosa.

_¿Ahora?_ pregunta con la voz agitada también, sonrió.

_Si, ahora.

_Pero no hemos acabado de cenar.

_Ya casi hemos terminado.

_Pero...

_No debes poner pretextos, solo dime que no quieres_ esta pensativa, parece debatirse entre lo que su cuerpo siente y lo que su mente le dice, para no abrumarla la suelto y me regreso a mi lugar pero antes de sentarme nuevamente en la silla ella habla.

_Si quiero_ casi murmura pero logro escucharla bien, sonrió de oreja a oreja.

_¿Estas segura? No quiero presionar...

_Estoy segura...quiero que me hagas el amor_ la miró detalladamente desde mi lugar, con ese sexy vestido, su rostro blanco brilla bajo la luz de mi apartamento al igual que su cabello, sus ojos son de un azul intenso y me roban el aliento, es hermosa y es mía, solo mía. Me acerco a ella y la tomo entre mis brazos, la beso con pasión y me pierdo en su sabor...me separo de ella y la lleva cargando hasta la habitación, estando ahí enciendo la luz, Ana esta nerviosa puedo notarlo y me preocupa un poco, no quiero que se sienta presionada, quiero que sienta placer, así que le pregunto de nuevo.

_¿Ana estas segura de lo que vamos a hacer?

_Si, quiero estar contigo_ me sonríe para tranquilizarme, pero lo que logra es que me ponga más duro.
Bajo lentamente el cierre de su vestido mientras le devoró los labios, acarició la piel que se va descubriendo y ella tiembla, le bajo el vestido por los hombros y dejo al descubierto sus pechos, dejó de besarla y la observo, es lo mejor que me pudo haber pasado en la vida.

_Son hermosos_ le digo mientras tomo sus pechos entre mis manos, beso su cuello y bajo lentamente hasta meterme uno en la boca, Ana se retuerce en mis brazos y continuo chupandolo, después de unos segundos me detengo para desnudarla completamente, la recuesto en mi cama, esta solo en bragas negras, me mira con expectación y excitada, me desnudo delante suyo y me reúno con ella, desaparezco sus bragas y beso todo su cuerpo de pies a cabeza, bajo mis manos a su sexo y acaricio su clitoris...

_¡Christian!_ gime cuando lo froto frenéticamente, su cuerpo se tensa y tiene su primer orgasmo, continuo tocando su sexo pero con lentitud y la penetro con mi dedo para prepararla, ella se queja.

_¿Te hice daño?

_Me dolió un poco.

_Es normal por ser tu primera vez pero te prometo que seré cuidadoso_ ella asiente con la cabeza y continuo metiendo y sacando mi dedo con lentitud, sus gemidos y jadeos me vuelven loco y ya no puedo más, me pongo el preservativo y separo sus piernas_ te dolerá nena, no puedo evitar eso, pero seré cuidadoso.

_Lo se_ responde mirándome a los ojos_ ahora hazme el amor_ obedezco de inmediato y me posicionó entre sus piernas, froto mi miembro en su sexo y con lentitud la penetro, Ana se tensa y comienza a respirar agitado, cuando casi estoy profundamente dentro de ella se queja del dolor.

_Tranquila_ susurro y beso su cuello y labios, cuanto quisiera que no sintiera dolor, avanzo unos centímetros más y y estoy dentro de ella, pero su grito me desgarra el corazón_ perdóname nena_ beso su rostro, ella mantiene sus ojos cerrados_ mírame por favor.

_Estoy bien_ abre los ojos_ ya no soy virgen_ parece tranquila y eso me relaja.

_Así es_ me mantengo sin moverme dentro de ella, esperando a que se adapte a mi, pero no podré aguntarlo más_ comenzaré a moverme lentamente ¿esta bien?

_Si_ con lentitud salgo de su interior y vuelvo a penetrarla, Ana se queja pero me dice que continúe, conforme me muevo ella se va adaptando y entonces gime de placer, disfruto de cada momento con ella. No cabe duda que Ana llegó a mi vida para cambiarla y hacerla mejor, no podría explicar la felicidad que siento al estar con ella, lo satisfecho que estoy de tenerla bajo mi cuerpo haciéndola mía.
Nuestros cuerpos se tensan y explotamos juntos en un orgasmo alucinante...