Primer beso

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Paso un mes, Gabriela se quedaba despues de clases con la profesora que parecia nada interesada en darle estudio, trato de devolverle la pulsera pero no la acepto, le dijo que era un regalo.

Malia le daba regalos todo el tiempo, eso se le hacía raro a la niña pero la mujer se le iluminaba tanto la cara cuando se los daba que no tenía corazón para rechazarla, las cosas habían cambiado un poco parecia que todos hacían lo que Malia decía.

Esto era un poco incomprensible para ella, pero algo en la rubia llamaba su atención había momentos en los que se perdía en esos ojos verdes. No quería meter en problemas a la profesora, pero le daba la impresión de que le estava coqueteando, tal vez era su imaginación, en el trancurso del mes siguiente tuvo una sorpresa ella abrió y encontro a un tipo con unas flores.


- un encargo de flores para Gabriela Zaneti - le dijo el tipo, para ella? Firmó y se las entregaron, "para mi dulce niña" esa era la manera en la que Malia había empezado a llamarla, no fue la última vez que paso, tambien le llagaban chocolates.

Eso alerto a su mamá que le preguntó quién le mandaba eso, le dijo que era un compañero de la antigua escuela que ella le gustaba, eso lo dejo tranquilo si era otro niño igual, eso la tenía alerta todas las atenciones que la mujer tenía con ella en poco sería el cumpleaños de su hermana y además de estar pediente lo que paso con el profesor, iba a haber un festivo el lunes y el martes iba haber junta de profesores creo que aun se estaba investigando lo de Gonzalo.


Aprovecho para pedirle a su mamá que fueran a la playa, diciendole que tenía una tarea sobre la salinidad del agua. Llegó de nuevo el viernes y ya salóa rumbo al carro que la llevaría a su casa.

- Gabriela espera - le dijo Malia

- ¿si?

- abrieron un nuevo lugar de helados, ¿quieres venir? - ¿la estaba invitando a salir? ¿Debía aceptar? Sus papás siempre le dijeron que no se fuera con adultos desconocidos, pero sabía que la halederia quedaba a media cuadra, y que era un lugar público, y deseaba saber que le pasaba a esa mujer, se acercó a su mamá que la esperaba en el auto y le dijo que llegaría después, este le dio para el taxi, claro la niña no le dijo que sería con Malia, si no con sus amigos, se encontraban en un silencio incómodo esperando que la orden llegara fue la mayor quién lo rompio.

- ¿tienes a alguien especial?

- ¿quiere decir un novio?

- si

- no, por que tengo 11 - dijo señalando lo que creía obvio.

- lo sé, es que eres tan linda
que...

- voy hablar claro, ¿que es lo que quiere usted conmigo?

- ¿de que hablas?

- me hace regalos, se preocupa demasiado por mi y... - y en eso llegaron con el helado de Gabriela, era de su favorito asi que lo comió y luego continuo hablando.


- te amo - le confesó la mujer de manera directa, la niña se sonrojo fuertemente se le acababan de declarar, y estaba muy nerviosa, ¿le gustaban las mujeres? Nunca había pensado en la posibilidad del lesbianismo, ¿le gustaba la profesora? La miro, era una mujer muy hermosa, al principio le incomodaban los detalles de Malia, pero era tan dulce y le prestaba tanta atención que le agradaba que lo hiciera, pero no era cualquier cosa, una mujer adulta le decía que la amaba, no era tonta, sabía que lo adultos podían mentirle a los niños para sacar prevecho aunque usualmente eran hombres no había nada que indicara que no podía hacerlo una mujer.

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