Quería estallar, quería llorar y solo encerrada en un baño. Mis ojos rojos se reflejaban en mi celular cuando se apagaba cuando ponía música con audífonos. Note que ninguno me siguió hasta aquí, excepto Harry, que Alejandra lo agarro para que no se fuera y siguieron en lo que estaban, Mi amiga prefería a Harry ante mí.
Pero en realidad la entiendo, ella no sabía que a mi Harry me gustaba, ella no sabía que mi celular no se quedo en el baño. Pero Harry sí. Salí del baño, fui a ver donde estaban besando a ver si seguían ahí, y no estaban.
Mirando hacia allá y vibro mi celular, un mensaje;
Alejandra: ¿Dónde estás?
___: Mi tío me llamo porque necesitaba un papel y fui a mi pieza y no alcance a despedirme ¿y tú? –le respondí lo más simple y fácil para que no se diese cuenta de nada.
Alejandra: Con Harry en la piscina.
Y no le respondí no lo haría. Me dirigí a mi pieza por un lado que no se veía la piscina ni el patio. Mi ventana daba justo a la piscina y con una parte amplia de todo el internado hacia el lado del colegio. ¿Miro o no? Mi duda. Pero porque no hacerlo, mis sentimientos ya estaban rotos.
Miro con delicadeza y disimuladamente. Abro la cortina y ahí estaban los dos, en el mismo lugar donde estábamos con Harry esa noche donde nos besamos, en la misma posición, besándose.
Era difícil y es difícil asumir que el niño que te gusta se esté dando besos con tu mejor amiga, tenía que hablar con él todavía tenía que hablar con él a pesar de todo. Hoy es viernes, mañana sábado y viene el domingo donde hoy si quiero salir y muy lejos donde nadie me vea, nadie.
Los chicos me vinieron a buscar y Harry me miraba incómodamente, como si estuviese siéndome infiel. A mí me dolía, pero nunca tuvimos nada. Nada. Dije que no, que no tenía hambre, preferí no ir con ellos porque interrumpiría entra sus besos. Aunque estaba muerta de hambre, no iba ir y si lo hacía iba ser después.
Cayó la noche y tenia sueño. Salí de mi cama para ponerme pijama, me puse el rosado transparente que ocupe esa noche que Harry se quedo a dormir aquí. Me peine el cabello YA QUE ODIO CON O mayúscula peinarme en las mañanas. Golpearon la puerta y me para abrir.
XXX: Wau –dijo sonriéndome y mirándome de pies a cabeza, eso me hizo sonreír, Harry estaba aquí.
___: Hola –trate de parecer fría, tenía que seguir así.
Harry: ___... sabes que lo siento mucho, no sé como…. –se paso la mano por la cabeza –decírtelo, en realidad esto es incomodo pero me sentí mal cuando nos viste besándonos y la vez anterior, coqueteando. –dijo poniendo su mano en la boca.
____: No importa. –dije cerrando la puerta donde Harry se interpuso.
Harry: si importa, yo te bese -¿Le importaba? Pensé –yo te bese y fue importante para mí y espero que para ti.
¿Realmente fue importante para él? O lo decía porque le gustaba andar con todas. Pero según él le importo, le importo nuestro beso, mi primer beso, pero, ¿Entonces porque beso a Alejandra?
____: entonces, ¿Por qué besaste a Alejandra?
H: no le podía herir los sentimientos.
____: A, que buena forma –dije con sarcasmo. –la ilusionas.
H: pero… -lo interrumpo
____: pero nada, capaz no le hieres lo sentimientos a ella, pero si lo haces ami porque yo sufriré junto a ella cuando este mal.
H: tú me gustas, -dijo agarrándome por la cintura y atrayéndome a él –tú me gustas ___, y mucho.
____: A mi tu igual, y creo te diste cuenta fácilmente, pero es mi amiga.
H: y ella es tu amiga también, no siempre tienes que ver por los demás, siendo tú la prioridad de tu vida.
____: Harry, … ponte en mi lugar, es mi amiga y se fijo en mi cuando nadie me vio, cuando estaba destrozada por dentro. Es raro decir esto ya que han sido dos días, pero me gustas pero ella es mi amiga y cuando tú ya no estés, ella, siempre estará.
No respondió y se quedo callado, y se acerco a mí colocando nuestras cabezas unidas, nos mirábamos los ojos y el tomo la iniciativa, sentía su respiración acariciando mis labios, sonrió y beso dulcemente, un beso larguísimo como nunca antes había visto. Sus labios presionando los míos, con tal suavidad que me hacia volar. Se separo de mí antes de dar un breve beso y me hablo.
H: tus labios, -dijo con su dedo tocando mis labios –son hermosos.
____: -solo sonreí-
H: Adiós.
Me gustaba, y demasiado, pero no. Prefería sufrir en silencio. No quería que Alejandra se diese cuenta, no. Me recosté en mi cama y mi techo tenía un traga luz, justo arriba de mi cama. Me acosté y me quede mirándolo por dos horas. Había unas estrellas hermosas y una luna amarilla. Y sin tomar uso de la razón me quede dormida.
