Todo lo que escribí hasta ahora son vivencias de cosas que ya viví, que ya sentí. Pero nunca escribí algo sobre algo que estoy sintiendo en el momento, y creo que hoy va a ser la primera vez. Se siente raro, porque las palabras afloran de entre mis dedos al mismo tiempo que los acordes llegan a mis oídos. "No tengo ganas de amar" escucho, y me pongo a pensar en la cantidad de veces que dije eso por miedo.
Sí, por miedo. No me creo capaz de querer a alguien, por miedo a que me rechacen. Pero eso ya lo dije hace rato.
Así que, continuando con la letra, no, no tengo una vida exclusiva.
Creía que la tenía porque yo me creía especial, pero hace tiempo descubrí que soy tan común como una taza de café. Aunque hagas millones de tazas de café en cualquier parte del mundo y con el mejor café inclusive, al fin y al cabo siempre vas a terminar tomando lo mismo: café. Amargo, negro y caliente. (Aunque yo no soy nada de eso, exceptuando por lo "amarga", porque casi siempre soy cortante y aparentemente estoy de mal humor).
Y si sigo, mi corazón nunca se encendió, porque nadie llegó a él. Bueno, capaz que alguien alguna vez lo hizo, pero no supe, corrijo, no supimos como seguir con lo que sentíamos.
Como eco, una y otra vez esos minutos se reproducen en mi cabeza, haciendo que imagine cualquier tipo de situaciones, que, nunca van a convertirse en realidad. Sólo por una cosa: no soy capaz de afrontar lo que me pasa.
Que tan roto debes haber estado para escribir eso? No consigo entender a alguien que no tenga ganas de amar por que sí no más. Yo no amo porque no ME amo, pero vos? A quien querés engañar?
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Vómito de emociones
Non-FictionEl nombre no es muy agradable, verdad? Pero sinceramente no busco eso. Esta es una historia obvio, mi historia personal. Estará llena de sarcasmo, realidad, música, sueños y personas que dejaron una huella imborrable en mí, dejaron sí, porque las de...
