10.- Olivia

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Ya cayó la noche y nos preparamos para ir a ver la casa de Olivia. La verdad que es no había tal cosa de un hostal, pero estaba segura de que ella me ayudaría.

Era de noche y de a poco los lugareños comenzaron a llegar, primero familias con sus hijos que caminaban en la playa rumbo a sus casas y luego hombres y mujeres solas. Los que trabajaban para "Gideon".

Fuimos a buscar el auto a donde Cherry lo había estacionado y guié a las chicas hacia la casa de Olivia, era pequeña, llena de musgo verde y con un gran jardín delantero lleno de plantas trepadoras y, frutas y verduras de distintos tipos que crecían en la tierra. No habían árboles a la vista.

Luego de que Cherry aparcó el auto Carmen comenzó a buscar las mochilas con nuestras pertenencias, la roja de Cherry, la vieja y fea era mía y por último una negra con lentejuelas doradas que era de ella.

Les dije a las chicas que buscarán comida para llevar ya que eso no entraba en el aviso que yo había visto y entré en el jardín, esperando que la vieja Olivia acudiera a mi llamado y me hiciera el favor.

"Albert, no tengo tu merienda hoy. Tendrás que volver mañana, ya es muy tarde". - se escuchó detrás de la puerta de madera

Toqué dos veces más y Olivia abrió la puerta.

"Tú" - susurró mientras entrecerraba los ojos para luego salir hacia el exterior

"Hola Olivia, necesito tu favor" .

Olivia observó sobre mis hombros a las dos chicas que se dirigían a la casa con bolsas entre sus manos para luego observarme a mi. Ella tocó mi hombro y mi cabello, me miró por unos instantes más y luego entró a la casa. La seguí junto con Cherry y Carmen que ya estaban al lado mío para cuando ella entró, me miraron por unos segundos y les sonreí.

La casa estaba alumbrada por un candelabro con figuras de peces de diferentes colores, el centro de la casa estaba formado por un piso relleno de rocas, el cual tenía encima una pequeña fogata y unas rejillas encima en las que había una olla con un líquido hirviendo.

Cherry me tomó del brazo y comenzó a murmurar

"No parece un hostal, pero aún así el lugar está genial. Como sacado de un cuento"

Olivia se arrodilló junto a el fuego y comenzó a revolverlo con una vara de madera, nos miró por unos instantes y suspiró.

"Yo, no, eh. Nosotras, le hemos traído comida a cambio de alojamiento, lamentamos mucho no poder pagarle con dinero. Pero, lo que íbamos a conseguir hoy se vio interrumpido por un impasse". Dijo Carmen mientras le sonreía a la mujer y dejaba las bolsas a su lado.

Olivia miró, alternando las miradas entre cada una de nosotras y las bolsas que se encontraban cerca de ella.

"Sí, los avisos estaban por todas partes. Es una pena lo que está pasando, el abandono, la acción de huir de algo es una responsabilidad muy grande. Y mayor lo es sí eso cambia el curso de tantas vidas." Olivia me miraba a los ojos mientras las palabras salían de su boca, el mensaje era más que claro.

Cherry se aferró más a mi al mismo tiempo que la olla burbujeaba.

"Se quedarán, por el tiempo que necesiten. Gracias por la comida y su amabilidad ..."

"Carmen, su nombre es Carmen. Ésta es Cherry" dije mientras trataba de que Cherry se desenredara de mi brazo, no entendía el por qué de aquello, pero mientras Olivia hablaba Cherry se calmaba.

"¿Y cuál es el nombre de tu amiga, Cherry?". Le preguntó

Olivia se paró y se dirigió a el mueble que estaba entre la puerta y la ventana, lo abrió y saco 4 vasijas pequeñas, cada una de distinto color. Parecían sacadas de otra época, y de distintas formas.

La primera era roja, llena de líneas que se cruzaban una contra otra, con una oveja dibujada de un lado y un león en el otro.
La segunda era de greda, simple pero hermosa, sin mayores detalles, corta y ancha comparada con la anterior.
La tercera era de color ámbar, parecía algún tipo de vidrio mezclado con algunas hojas atrapadas en el borde de ella. Y la última era azul, celeste, blanca y con detalles dorador, era la más brillante y la que más sobresalía entre todas, pero a la vez la más simple y bonita.

"Ella es Acuario". Dijo Cherry, terminando completamente de desaferrarse de mi brazo y acompañando a Olivia a un lado de la fogata. Estaba completamente hipnotizada por el contenido burbujeante.

"Acuario, ¿tus padres te llaman así?". Olivia comenzó a verter un líquido verde pero de olor delicioso dentro de las vasijas, Cherry se los recibía mientras que ella los ubicaba al rededor de la fogata.

Su pregunta fue instantánea y rápida, Cherry y Carmen no parecieron oírla. Por lo que solo mire a Olivia y negué con la cabeza.

"Ya que nos quedaremos aquí y abusaremos de su hospitalidad, ¿qué es eso?". Carmen se arrodilló al frente de Olivia y tomó la vasija brillante.

"No, me temo que esa no es tuya." Dijo Olivia mientras se la quitaba de sus manos y la cambiaba por la de color Ámbar. "Ven, siéntate a mi lado, estarás más cómoda, ese lugar es muy frío y no puedes tomar los lugares de otros. Ven, acostúmbrate a la compañía y a buena comida". Olivia palmeo el suelo en el lugar que estaba a su izquierda y le sonrió a Carmen.

Me acerqué y pude observar que el líquido que estaba en los pocillos lucía diferente en cada uno de ellos. Todos tenían un color diferente, el de Cherry era de un color más claro, más transparente, ya no era verde. En el de Carmen éste tenía un color rojo espeso. En el de Olivia parecía agua, y en el mío no tenía un color, era distinto en todos los lugares, y tenía un olor dulce, como caramelo.

Olivia me observaba mientras me arrodillaba y tomaba la vasija entre mis manos, mientras lo bebía, mientras todas bebíamos.

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⏰ Última actualización: Dec 09, 2016 ⏰

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