Capítulo​ II: Nightmares Hunting in the Forest

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El testimonio se recuperó de la central de policía de Montpelier a cincuenta kilómetros de distancia de las ruinas de Raccoon City. El testimonio escrito fue mal logrado en los años de abandono durante y después de la guerra, pero se puede intuir que es de un lapso de tiempo entre septiembre y noviembre del 2018.

- Durante meses estuve planeando ir a los bosques de las montañas Arklay en el noroeste de las ruinas de Raccoon City, sabía que algo malo podría pasar, ya que el perímetro de la ciudad está estrictamente restringido y la desde luego la entrada sería complicada, pero tenía que grabar un homenaje a las víctimas de la ciudad en su vigésimo aniversario.

Estuve durmiendo en mi camioneta cerca del poblado de Montpelier, para abastecerme y prepararme para entrar al bosque, el tiempo jugaba en mi contra ya que mi homenaje debía estar listo para el primero de Octubre, así que una noche me adentre en el bosque después de asegurarme de que ninguna patrulla de la Policía militar estuviese en mi zona, los había visto antes, siempre iban bien armados y con perros, como si esperarán que algo malo pasará en cualquier momento. Después de que pasará la noche en un árbol alto baje para continuar mi viaje, pero de inmediato me puso en alerta una parte de un periódico tirada justo a mis pies. No había nada relevante en este sólo el caso del brutal asesinato de unos gemelos en una zona residencial cerca de Silent Hill además también hablaba del tráfico de Cocaína en el pueblo antes mencionado; aunque era raro ver un periódico de Pensilvania por éstos rumbos, aunque no encontré a nadie cerca seguí alerta. Caminaba agachado y me detenía a escuchar.

Después de unas horas interminables finalmente arrive a un viejo hospital de ruta abandonado. No encontré nada en el interior, pero decidí no quedarme ahí porque la estructura estaba propensa a un derrumbe por los años de abandono. Seguí avanzando hasta que llegue a lo que posiblemente alguna vez estuvo cimentada una gran mansión. Aunque estaba fuera del radio de la bomba atómica lanzada a la ciudad. ¿Será a casó que fue la mansión de Umbrella donde supuestamente empezó el primer brote vírico a gran escala?... Lo más perturbador fue que cerca de ahí encontré una manta de rostros humanos... Algunos de esos rostros parecían demasiado viejos y otros parecían demasiado recientes. Deseé que el autor de aquella horrible escena no anduviera cerca.

Cuando finalmente cayó de nuevo la noche, estaba a unos cuantos metros del cerco de seguridad al rededor del cráter de la ciudad. Todo parecía que sería una noche tranquila más. Pero una serie de disparos, gritos y los rotores de varios helicópteros me despertó. De inmediato me puse pecho tierra, empecé a ver a mi alrededor. Al norte de mi posición vi los fogonazos de las armas de fuego. Pero aquel enfrentamiento duro muy poco, podía sentir que algo andaba mal así que me acerqué al lugar de la confrontación, había cadáveres por todos lados, uno de ellos estaba partido a la mitad con el torso, brazos y rostro completamente mordisqueados, era claro que una ó varias B.O.W.'s anduvieran en el área así que de inmediato cogí una pistola y un cargador para poder salir de ahí rápidamente. Pero cuando estaba a punto de salir corriendo, varios de los cadáveres empezaron a reanimarse... De inmediato notaron mi presencia, avanzaron hacia mi lentamente con los brazos alzados y emitiendo un fuerte gemido.

Retrocedí instintivamente mientras esas cosas me rodeaban lentamente, estaba en shock pero finalmente entre en control de nuevo y le disparé al primero en la sien, cayó fulminado repetí lo mismo con los demás, tarde unos minutos mientras esperaba a que llegarán más pero no vinieron más, era raro deberían haber llegado más de esas cosas pero no pasó nada más, así que corrí de vuelta a la ruta hasta que unos ladridos me hicieron detenerme, al darme la vuelta vi no sólo a una jauría de perros, sinó también a las criaturas que creí haber matado; ¡Se habían levantado de nuevo y ahora corrían!, De nuevo comencé a correr tan rápido como pude hasta llegar al hospital abandonado.

Cuando entre moví lo más pesado que pude contra la puerta y me escondí en el rincón de una habitación del primer piso. Pasarón las horas y esas cosas aún seguían esperándome afuera, podía escuchar a los perros ladrar ó gruñir, además también podía escuchar a los otros monstruos gemir a diferentes distancias; si no hubiese llevado bastantes provisiones no estaría contando el cuento ahora, los días pasaron y aquellas criaturas seguían acechando... No era seguro ni pensar en voz alta porque alguna de esas bestias podría entrar y terminar el trabajo de una vez por todas, pero no pasó los días eran eternos, incluso me aventure por el hospital y encontré varias cosas raras, lo primero fueron​ los restos mortales de un tipo con vestimenta de verdugo, al lado de una hacha gigante; además también encontré un diario de un individuo que creía que su esposa "muerta" vivía en una gigantesca planta que creció por todo el hospital, entonces él se dió la tarea de cuidarla y... Alimentarla, no quiero imaginar a cuántas personas mató este sujeto, además también encontré el viejo gafete de Alyssa Ashcroft la famosa periodista de "The Raccoon" creó que ahora trabaja el Louisiana; si ella logro escapar, yo también podía hacerlo; pero antes de poder hacer algo más las criaturas del bosque entraron por las ventas traseras, pude escuchar sus gritos y gruñidos mientras se acercaban rápida y ferozmente hacia mi, les disparé rápidamente mientras esquivaba sus rápidos ataques. Pero baje la guardia un momento y uno de ellos me mordió en el hombro, me dolió como mil infiernos, lo tiré hacia atrás y le revente la cabeza de un pisotón.

Después de la pelea tiré sus apestosos cadáveres por el segundo piso, sabía que de todos modos estaba perdido, el virus pronto me convertiría en una de esas cosas, así que mi única tarea sería tomar fuerzas para volarme la cabeza. Pero para mí suerte (ó desgracia) logré sobrevivir a esa, unas horas después del entrenamiento volví a escuchar ruidos en el exterior, no parecían ser zombies pero al mirar por la ventana del segundo piso, una lengua me cogió del cuello y casi me tira pero logré sacar mi cuchillo y cortar la lengua, otro ruido me hizo darme la vuelta.

De inmediato vi a una criatura cuadrúpeda, con los músculos y el cerebro expuestos, una vez más intento cogerme con su lengua pero me tiré a un lado para esquivarle, desde el suelo pude ver su corazón y no desperdicie la oportunidad para dispararle, el impacto lo hizo retroceder emitiendo un horroroso gruñido, lo perseguí y me lancé sobre el para apuñalar su corazón, en el forcejeo logró darme un sarpazo, pero conseguí matarle.

Pero la otra criatura salto hacia mi poniéndome contra el suelo, pensé que era mi fin... Aunque en el último momento alguien le disparó dejándolo muerto en acto, antes de que pudiera agradecer a mi salvador alguien me golpeó por la espalda, dejándome inconciente.

Lo último que recuerdo antes de despertar en la calle de una ciudad cercana fue que estaba abordo de un helicóptero, a un lado estaba una mujer, su cabello era largo y negro como la noche, además tenía unos ojos verdes esmeralda hipnóticos. Imaginé que era un ángel... Un ángel salvador, espero algún día volver a verla.

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