El beso había sido corto, pero tan intenso como si hubiera durado horas. El tibio y dulce sabor aun hormigueaba en los labios de Samy quien estaba aferrada en un abrazo al cuerpo de su amigo. Porque lo había hecho? no tenia necesidad de llegar a esto si solo quería levantarle el animo. No podía permitirse confundir sus sentimientos. El cariño era mutuo y el deseo los atraía con fuerza, aun así Samy se aparto bruscamente de el, y soltó un suspiro.
-No lo vuelvas a hacer.- Dijo Samy mirando al suelo, quería evitar el contacto visual por que sabia que se rendiría nuevamente.- Si querías levantarme el animo, podría haber hecho cualquier otra cosa Hunter.-
Los labios de Hunter se curvaron en una sonrisa. No podía creer que Samy no se diera cuenta lo mucho que la deseaba.
-No lo hice por lastima si es lo que estas pensando.-
-Y porque diablos lo harías entonces? Se supone que eres mi amigo Hunter. Tu sabes lo mucho que valoro nuestra amistad, no me vengas con una estupidez.- Soltó Samy con evidente molestia.
El sabia muy bien que ella amaba esa amistad, no podía pasar por encima de sus deseos si ella no lo quería como el hombre que podría amarla. Pero sus sentimientos, en que momento serian valorados? Lamentablemente esto se estaba saliendo de control, y no quiso seguir discutiendo por miedo a perder lo poco que estaba quedando de aquella hermosa relación.
-Maldita sea.- Se le escapo con furia a Hunter- Lo siento, no era mi intensión Sam, perdóname.- Dijo al instante y Salio tan rápido como le dieron las piernas.
Después de la escena en el cumpleaños de Samy, nada volvió a ser como lo era antes, mucho menos como había sido antes de la muerte de Albert. La distancia los estaba lastimando silenciosamente, Samy no salia de su casa a menos que Emma fuera por ella y la obligara a ir de compras o a pasear. Navidad y Año nuevo había sido bastante diferente a otros años, habían pasado ambas fiestas en casa de Hunter junto a toda la familia de Samy. Sus familias cada vez estaban mas unidas, mientras que entre ellos, se había instalado una distancia dolorosa para ambos.
A principios de enero Hunter y su familia se habían ido de vacaciones a la playa. Samy mientras tanto, buscaba trabajo con urgencia. La muerte de su padre no solo había dejado dolor, sino también una familia que alimentar y una casa que mantener. Los tramites legales para cobrar el seguro de vida tardarían un tiempo. Y Samy no creyó correcto que Amelia saliera a trabajar. Sus hermanos pequeños la necesitaban en la casa. Pero el motivo mas grande era salir de su casa, distraerse haciendo algo. No podía vivir todo el tiempo encerrada estaba llegando a un estado depresivo sin darse cuenta.
Todos los días Samy salia temprano a buscar empleo. El viernes, luego de un día bastante caluroso, decidió ir a visitar a su amiga. Hacia una semana que no la veía y solo se hablaban por teléfono. Sabiendo que estaría sola, decidió darle una sorpresa y solo aparecer en la puerta de su casa. Cuando la puerta se abrió luego de tocar timbre, una enorme sonrisa se dibujo en el rostro de Emma.
-Samy, que sorpresa.- Dijo mientras la abrazaba.- Te ves tan diferente.- Le dijo mientras admiraba su cabello recogido en una cola, y vestía con una remera sin mangas color verde agua, un short de jean azul y unas sandalias bajas color piel.
-Ya deja de abrazarme, hace demasiado calor, invítame a pasar y regalame al menos un vaso de agua, estoy casi deshidratada.- Dijo Samy sonriendo.
Emma sintió un nudo en su garganta. Samy había cambiado de aspecto y al parecer había vuelto a ser la de antes, tan habladora y de palabras duras. Luego de la muerte de su padre, esa muchacha de repente había desaparecido. Las dos amigas se sentaron en la cocina a compartir un refresco y algunas galletas dulces mientras se ponían al día.
ESTÁS LEYENDO
Regalame una sonrisa (Serie MELODY 1)
Roman pour AdolescentsSamy no es una chica muy femenina que digamos, mucho menos delicada. Normalmente vestía ropa de hombre y jugaba al fútbol. No sentía atracción por los chicos hasta que conoció a Hunter. El es una persona dulce y amable oculto detrás de una dura pe...